IGUALDAD

Cuando el Camino de Santiago no es seguro para ellas: peregrinas relatan el miedo a caminar solas

Hubo siete denuncias en 2023 y ocho en lo que va de año por delitos contra la libertad sexual en el contexto del Camino en Galicia.

Ana G. Liste (Praza.gal)

Mujeres que han hecho en solitario el Camino de Santiago desde distintos puntos de la geografía europea se refieren a un "aterrador" acoso sexual en zonas escasamente pobladas de zonas rurales de España, Portugal y Francia. Así lo reveló un reportaje publicado hace unos días en el diario británico The Guardian, firmado por las periodistas Ashifa Kassam y Mabel Banfield-Nwachi, en el que entrevistan a nueve peregrinas que cuentan sus experiencias de acoso en los últimos cinco años.

De las nueve mujeres que participaron en el reportaje, seis denunciaron los incidentes de acoso ante las fuerzas de seguridad locales donde se encontraban y sólo en uno de los casos –señalan– se detuvo y procesó al agresor. Preguntada por esta información sobre las denuncias presentadas en nuestro país en el marco de la ruta jacobea, la Delegación del Gobierno de España en Galicia explicó a Praza.gal que "según los datos facilitados por la Guardia Civil y la Policía Nacional, en los últimos en dos años se han registrado 15 denuncias contra la libertad sexual en la demarcación del Camino de Santiago a su paso por Galicia".

En 2015, Miguel Ángel Muñoz Blas asesinó a la peregrina estadounidense Denise Thiem cerca de Astorga tras haber modificado el trazado del Camino para que pasara junto a una finca de su propiedad. Este caso abrió el debate sobre la seguridad entre las mujeres que ya habían hecho la ruta jacobea y entre las que estaban pensando en realizarla. El asesino fue condenado a 23 años de prisión, una sentencia ratificada por el Tribunal Supremo.

Ese mismo año se crea el grupo privado de Facebook Camigas , que cuenta con alrededor de 37.000 miembros y está diseñado específicamente para mujeres que planean hacer el Camino de Santiago solas desde cualquier parte del mundo, para que puedan conectarse entre ellas "para compañía y seguridad". Su fundadora, Lorena Gaibor, asegura a The Guardian que "el acoso sexual es endémico en el Camino".

La periodista francesa Marie Albert relató en un artículo publicado en la revista We Demain las distintas agresiones que sufrió a lo largo del Camino Norte en 2019. Un hombre intentó agarrarla, otro se masturbó delante de ella, otro hizo gestos obscenos con las manos y la boca, otro le hizo comentarios sobre su físico, otro la insultó, otro la siguió por la calle... Marie Albert coincidió a su llegada a Santiago, tras recoger la Compostela (la credencial de peregrinos), con otra peregrina francesa que le contó cómo había sido acosada "tres veces seguidas" por "tres hombres diferentes" en Burgos.

Los datos de Policía y Guardia Civil que gestionan la Delegación del Gobierno indican que hubo siete denuncias en 2023 y ocho en lo que va de año por delitos contra la libertad sexual en el contexto del Camino en Galicia. "Se trata de denuncias de agresiones sexuales sin acceso carnal , principalmente exhibicionismo y comentarios ofensivos hacia las personas", afirma la Delegación, destacando que se trata de "casos muy concretos , debido a que afectan al 0,003% del total de mujeres que las más de 460.000 que han hecho el Camino durante estos años”.

"Podemos afirmar que el Camino de Santiago en Galicia es seguro para las peregrinas", defiende la Delegación del Gobierno. Las mujeres representan ya el 53% de las personas que hacen esta ruta, muchas veces solas, por lo que desde 2021 se lleva a cabo la campaña informativa #NoCaminasSola en Galicia, Aragón, Navarra, La Rioja, Castilla y León y Extremadura para reforzar su protección. Se recomienda a las peregrinas planificar su viaje con antelación, acudir siempre con identificación, informar a familiares y amigos de su posición y ubicación, llevar un teléfono móvil con batería suficiente, no descuidar sus pertenencias y caminar por lugares seguros y concurridos. También promocionan que instalen la aplicación móvil AlertCops para poder comunicarse con la Policía o la Guardia Civil en caso de necesidad, y enviar su geolocalización, así como imágenes y vídeos.

Además, la Delegación del Gobierno informa de que hay cuatro oficinas móviles de atención al peregrino desplegadas a lo largo de los diferentes recorridos "para hacer del Camino una experiencia más segura para las personas que lo realizan". “Este servicio se complementa con policías extranjeros que tienen el cometido de dar apoyo durante los meses de mayor afluencia del Camino”, añaden.

Uno de los testimonios que logró reunir el diario británico reflexiona sobre cómo la cuestión de la propia seguridad es otro de los retos para las mujeres que hacen el Camino de Santiago en solitario. Esta mujer, que denuncia una agresión sexual en suelo portugués, afirma que esto afecta por completo a cómo las mujeres pueden disfrutar de la experiencia del Camino.

En diciembre del año pasado, la Guardia Civil detuvo a un hombre en Nájera (La Rioja) por agredir sexualmente a una joven alemana de 24 años que hacía el Camino sola. La peregrina se había quedado sin sitio en el albergue y le pidió indicaciones al hombre para continuar la ruta, pero él le ofreció su casa para pasar la noche. Una vez allí, la retuvo contra su voluntad y la agredió, hasta que ella logró escapar de allí y acudió a una comisaría a denunciarlo.

"No tienen por qué ser agresiones consideradas las más graves porque las agresiones que se están denunciando en el Camino hablan de la impunidad de los hombres que mantienen este tipo de conductas vergonzosas, de las que las mujeres, que son las víctimas, todavía muchas veces se sienten avergonzadas por tener que denunciar ese tipo de conductas. Ciertamente hay muchos ataques no denunciados debido a las dificultades que ya tenemos en nuestro entorno. Pienso en todas las veces que una mujer tiene miedo de denunciar por si no le creen o incluso por si la juzgan por denunciar”, afirma Victoria Canosa , psicóloga sanitaria de Ourense y miembro del Colegio Oficial de Psicología de Galicia. .

"A ver si empezamos a cambiar el enfoque y que estos casos no sean sólo entre la víctima y el agresor. Ahora que hemos identificado estas actitudes como violencia, hay que sacarles los colores a quienes se sienten libres de actuar de esta manera", propone la psicóloga, que explica cómo las mujeres "están más alerta" pensando en la posibilidad de una agresión: "Eso deja huella en la persona, es una experiencia realmente adversa".

¿Todos los gallegos son narcos? Cara y cruz del éxito de 'Clanes' y 'Fariña'

¿Todos los gallegos son narcos? Cara y cruz del éxito de 'Clanes' y 'Fariña'

En la película Todas las mujeres que conozco, de Xiana do Teixeiro, la periodista y poeta Nieves Neira Roca comparte su experiencia en un tramo del Camino Primitivo, a su paso por A Fonsagrada, y el miedo que sintió tras encontrarse con un hombre en un automóvil. "La película habla de cómo a las personas que somos socializadas como mujeres nos condiciona ese terror sexual en forma de relato, de violencia simbólica, en el que nos educan; y también la acumulación de agresiones que estamos recibiendo, siempre en relación al espacio público. Cada día de nuestra vida, ¿cómo logramos estar en los espacios públicos teniendo en cuenta cómo nos educan y cómo funcionan esos espacios públicos aquí respecto a la violencia machista, sobre todo de carácter sexual”, describe la cineasta.

Es un documental grabado en el verano de 2017, antes del Me Too y la primera huelga feminista en España. Comienza con testimonios personales de un grupo de mujeres y luego surge el tema de viajar solas. En la experiencia que comparte la periodista Nieves Neira, esta cuenta cómo días después, ya en la redacción del diario para el que trabajaba, una colega le dijo que había sido muy valiente porque hay muchos lobos en esa zona. Todas las mujeres de la película comprenden lo irónico de la pregunta, porque ella, en cualquier caso, de quien tuvo miedo es de los hombres. [Todas las mujeres que conozco se pueden ver en la plataforma Filmin ]

"Falta confianza en que puedas contar lo que te pasó", apunta la psicóloga Victoria Canosa, que ha tratado a mujeres víctimas de violencia machista. Canosa afirma que una experiencia como las que cuentan estas mujeres puede llegar a "limitar" a una mujer en su vida. "Al final dejas de hacer cosas a las que tienes todo el derecho, como caminar a cualquier lado porque no te sientes lo suficientemente segura", lamenta. "Protegernos siempre es bueno, pero no podemos permitir que la protección nos limite hasta tal punto que dejemos de poder desarrollar nuestra vida –subraya el especialista–. A ver si finalmente podemos poner los recursos necesarios para que los hombres no se sientan con esa libertad y comprendan que estas agresiones no tienen cabida en nuestra sociedad".

Más sobre este tema
stats