Koldo el infiltrado

Miguel García Tarrío

Dice el juez Leopoldo Puente en su auto de ingreso en prisión de Santos Cerdán que no hay elemento alguno que permita considerar que Koldo tuviera la condición de agente encubierto, condición que habría persistido durante años alrededor de Santos Cerdán.

Los actos realizados por Koldo durante todos estos años de relación con Cerdán contienen todos los elementos para ser considerados como espionaje. ¿Está Koldo capacitado técnicamente para actuar como un espía? ¿Es un agente libre o trabaja para algún servicio de inteligencia? La respuesta a ambas preguntas es clara, puesto que es conocido que ha trabajado como confidente de la Guardia Civil en asuntos de terrorismo. Y debía de ser bueno, pues le llegaron a condecorar. Es perfecto conocedor de las técnicas de espionaje, ahí están los teléfonos móviles encriptados que utilizaba. ¿Quién se los facilitó? Parece que un comandante, también, de la Guardia Civil.

Dice el juez que las conversaciones grabadas halladas en poder de Koldo se sucedieron a lo largo de un extenso periodo de tiempo, y que habría resuelto grabarlas primero y conservarlas después, no con el propósito inmediato de denunciar los hechos a los que aquellas se referían ¿Entonces, cuál era el interés de realizar grabaciones a lo largo de ese extenso periodo de tiempo, y de mantenerlas, sobre todo cuando es notorio que algunos términos de las conversaciones son forzados por el propio Koldo?

Un exconfidente, informador de la Guardia Civil en asuntos de terrorismo, perfectamente formado en la disciplina, indultado por Aznar tras haber sido condenado por algún delito, recibe la instrucción de infiltrarse en el PSOE de Navarra, consigue acercarse a Santos Cerdán en el momento más importante de su vida política, cuando comienza a trabajar políticamente junto a Pedro Sánchez. Este es el escenario soñado por una agencia de inteligencia, va a tener acceso a información política privilegiada del más alto nivel en España.

¿Vamos descubriendo el propósito de Koldo al grabar y mantener las conversaciones que él mismo forzó?

Las grabaciones obtenidas por Koldo no son evidencias que permitan, por sí solas, condenar a Santos Cerdán, pero son la clave que ha permitido a la UCO realizar un informe que pone en serios apuros al Gobierno.

En el auto del juez se pueden contar hasta en treinta ocasiones las palabras “indiciaria” o “indiciariamente” cuando se refiere a las razones para enviar a Cerdán a la cárcel. Pues bien, aquí tiene otros indicios a tener en cuenta, más si cabe cuando el famoso informe de la UCO era público antes de ser entregado al juez. A Feijóo se le notaba muchísimo.

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Miguel García Tarrío es socio de infoLibre

Dice el juez Leopoldo Puente en su auto de ingreso en prisión de Santos Cerdán que no hay elemento alguno que permita considerar que Koldo tuviera la condición de agente encubierto, condición que habría persistido durante años alrededor de Santos Cerdán.

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