Una familia de Ourense, con un bebé de un año de edad y otra hija adolescente, ha tenido que abandonar este martes la vivienda en la que residían desde hace un año en régimen de alquiler por no poder pagar.
La familia contactó con la plataforma Stop Desahucios al no poder asumir el pago de una deuda de 2.170 euros, puesto que se habían quedado sin empleo y solo contaban con una renta de integración social (Risga). La dueña del inmueble, tras siete meses de impagos, puso una demanda de desahucio.
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Por su parte, los miembros de la Plataforma Antidesahucios no han responsabilizado de esta situación a la propietaria del piso, sino a la Xunta de Galicia, a quien acusan de no garantizar el derecho constitucional a una vivienda digna de cualquier ciudadano del Estado.
Una familia de Ourense, con un bebé de un año de edad y otra hija adolescente, ha tenido que abandonar este martes la vivienda en la que residían desde hace un año en régimen de alquiler por no poder pagar.