El fiscal general no habló con periodistas la noche de la filtración del correo del novio de Ayuso

El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, no habló por teléfono con ningún periodista la noche en la que se filtró el correo electrónico en el que el abogado de Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ofrecía un pacto a la Fiscalía a cambio de reconocer dos delitos fiscales. Así se desprende del último informe realizado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tras analizar el tráfico de llamadas del jefe del Ministerio Público entre el 8 y el 14 de marzo de 2024.
"Es preciso señalar que, como se va a describir seguidamente, no existe ninguna llamada, ni intento de comunicación con este terminal del fiscal general del Estado, a excepción de éste, fuera del ámbito de la Fiscalía durante toda la tarde/noche en la que se desarrollan estos acontecimientos, al menos por este medio", recoge el documento elaborado por los investigadores, que siguen sin poder aportar ningún elemento de cargo irrefutable contra García Ortiz.
El análisis de las comunicaciones por parte de la Guardia Civil se ha realizado a petición del magistrado instructor del Tribunal Supremo, Ángel Hurtado, que a comienzos de enero se dirigió a dos operadoras de telefonía para que aportasen "los datos del tráfico de llamadas emitidas y recibidas, así como los titulares de las líneas que los reciben y emiten" relativas a dos de los números de teléfono utilizados por García Ortiz.
En relación a la primera línea, que está a nombre de la Dirección General de Racionalización y Centralización de la Contratación, los investigadores destacan que en el periodo analizado "no existe comunicación alguna". "Atendiendo a los paquetes de datos emitidos y recibidos cabe señalar el escaso número existente de este tipo de comunicaciones, únicamente 24 paquetes de datos. La información recibida no recoge la identificación de los receptores de paquetes de datos emitidos por el usuario ni la identificación de los emisores de paquetes de datos con destino a éste", concluye.
En cuanto a la segunda, en este caso línea personal de García Ortiz, constan 123 llamadas entrantes y salientes en los días analizados. Pero no hay prácticamente nada fuera del ámbito del Ministerio Público. Consta una comunicación el 8 de marzo, cuatro días antes de conocerse la querella contra González Amador por fraude fiscal y falsedad documental, a un número titularidad de Audiovisual Española 2000 SA, que los investigadores vinculan con el diario La Razón.
En cuanto a la tarde o noche en la que se produjo la filtración del mail, lo único que consta de fuera de la Fiscalía es una llamada realizada por un periodista de la Cadena Ser que tuvo acceso al correo. La misma se produjo a las 21.38 horas, diez minutos después de que el diario El Mundo publicase la información averiada que, según han declarado varios testigos en el procedimiento, estaba moviendo Miguel Ángel Rodríguez, jefe de Gabinete de Isabel Díaz Ayuso. Una llamada que no obtuvo respuesta y que se produjo mientras García Ortiz mantenía una conversación telefónica con la otra investigada, Pilar Rodríguez.
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A finales de enero, tras conocerse que los investigadores no habían encontrado un solo mensaje en el terminal intervenido durante los registros al fiscal general del Estado, el instructor autorizó la conexión "a aquellos repositorios de información donde pudieran encontrarse archivos susceptibles de contener información de interés". Y acordó la emisión de una comisión rogatoria a los proveedores de servicios WhatsApp LLC y Google para que aporten la información que tengan relativa a García Ortiz.
La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil destaca que no se ha encontrado ni un solo mensaje de la aplicación de mensajería instantánea anterior al 16 de octubre, el mismo día que el Supremo abrió causa contra el fiscal general del Estado. "La falta de mensajes anteriores se debe, fundamentalmente, al vaciado o borrado intencionado de todos los mensajes contenidos en las distintas conversaciones, siendo realizada esta acción hasta en dos ocasiones el 16 de octubre", sostienen los investigadores.
El informe también concreta que no han podido recuperarse "datos de interés en copias de seguridad" almacenadas en Google Drive por "la eliminación deliberada de la cuenta de Google asociada a este servicio". En este sentido, apunta que la cuenta personal de García Ortiz, en la que recibió la cadena de correos electrónicos relativos al abogado de González Amador, "ha sido eliminada recientemente".