Hilo de lluvia - Ricardo Virtanen
Ediciones La Garúa (Barcelona, 2024)
Con el título Hilo de lluvia, Ricardo Virtanen nos presenta su última entrega. Título sutil con toda la dosis significativa y simbólica del haiku, en esta nueva incursión, en su faceta de haijin, es decir de escritor que versa haikus, evoca de una manera gráfica y sugerente la naturaleza plena y las pequeñas cosas con las que tropezamos en la vida. En este ámbito de poemas de tres versos formados por 17 palabras, 5+7+5 sílabas, el autor tiene ya publicados: Notas a pie de página (2005), La sed provocadora (2006), Sol de hogueras (2010), Nieve sobre nieve (2017) y Llama de luna (2021). El género breve es inherente a su escritura lo muestran, también, sus varios libros de aforismos, las ediciones de antologías a su cargo y estudios críticos.
Ricardo Virtanen es un escritor, mejor un artista polifacético, versátil, madrileño de origen finlandés, este profesor y músico, es poeta, novelista y aforista. Como expresa tan didácticamente Luis Alberto de Cuenca en el prólogo del libro: "Virtanen se atiene la mayoría de las veces a la más pura ortodoxia del haiku japonés, que ha de versar sobre un tema relacionado de uno u otro modo con la naturaleza, el paso de las estaciones y la observación del mundo circundante, sin permitirse en ningún momento (en casi ningún momento, si queremos ser exactos) a la efusión sentimental. Para el amor y otras perversiones del espíritu ya tenían y tienen los nipones la otra estrofa fundamental de su sistema lírico vigente, a saber, la compuesta por cinco versos de 5+7+5+7+7 sílabas, 31 en total, que recibe el nombre de tanka o waka y no presenta restricciones temáticas de ninguna clase".
El título del libro, está espigado del poema: "Bajo la luna,/ el aullido de un perro./ Hilo de lluvia.", incluido en la segunda parte. Contiene cien haikus que conforman las tres secciones en las que está estructurado. Las dos primeras tituladas Inquietudes y Rumores, son más festivas dentro de un tono medido, sugerente y callado, la tercera Presencias, a modo de coda cierra con poemas de ausencia (antítesis con el título), es más triste, de espera, nos lleva al final, a lo que no va a hacer mudanza en su costumbre.
Abren las distintas partes citas de Bösha, Shiki, Issa y Santöka.
Así en la primera sección, Inquietudes, asistimos a una serie de piezas en donde las flores, los árboles (lespedeza, crisantemo, camelia, jazmín, amapolas, almendro, encina, naranjo…) se unen a la lluvia, al viento, la nieve y el sol, en donde las sensaciones a través de las distintas estaciones se entremezclan, ofreciéndonos un arco iris de aromas, de colores, texturas y sonidos que el autor describe y sugiere de manera fiel y táctil, todos los elementos de la naturaleza que se perciben con delicadeza, precisión e intuición: "Cómo la lluvia/ se disputa los pétalos/ de cada flor".
En la segunda, Rumores, bandadas de pájaros (mirlo, gorrión, pinzón...), aves, peces, todo tipo de animales por tierra, mar y aire aparecen en estos breves poemas revoloteando entre mariposas, libélulas y luciérnagas: "Una libélula,/ como una mariposa./ O como un pájaro."; "Todas las aves, en una dirección. Se escucha el viento".
En la última parte Presencias, que es la más breve, tal como es la vida consigue con un léxico significativo y simbólico que augura el desenlace final ("al borde del camino", "sombra", "morir", "la última hoja", "desafinando"…), pero siempre con la esperanza y la serenidad por medio.
Con el oficio que conlleva la experiencia, Ricardo Virtanen ha transmitido y conseguido, a través de recursos como la sinestesia, el paralelismo, la metáfora, la elipsis, la personificación, entre numerosos, detenernos en las pequeñas cosas, en los instantes que son las cosas importantes. Así se pueden observar nuestros estados de ánimo: "Calles vacias./ Sólo el olor a espliego./ Viento y aroma."; "El sol alumbra/ un campo de amapolas./ La soledad.", que junto a los meses y las estaciones: "Lluvia de agosto./ Su sonido en las hojas/ rompe el silencio."; "Llega septiembre./Al borde del camino,/ solo unos cardos."; "Nadie se acuerda/ de la tumba en otoño. /Aquella lluvia.", nos pasean por la existencia.
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En este pequeño libro se pasean, también, estas gotas de Oriente con Horacio, Jorge Manrique, Antonio Machado o Juan Ramón Jiménez. El hilo de la lluvia es el eje conductor del hilo de la vida. Por eso nos recomienda: "Coge la rosa/ antes de que sus pétalos/ estén en tierra". Todo queda dicho.
* Carmen Canet es crítica literaria y aforista. Su último libro 'Telegramas' (Ediciones Libros del Aire, 2025)