¿Qué fue del Capitán Trueno?
Aprieta el calor y la desfachatez. La desvergüenza y la ira. En Génova se alquilan esperanzas para una legislatura, tal vez la más importante de los últimos veinte años. Aprieta la desfachatez, la desvergüenza, la ira y el calor. Se endurece Julio, se tensa y amenaza temporal, mar gruesa, en la que los cobardes suelen “ponerse al pairo”, “pairear”, “fachear” o detener la embarcación. ¿Qué fue del Capitán Trueno?
Los titulares no dejan lugar a dudas, si había algo que ganar, se perdió
La tarde y el teclado se tiñen de gris plomizo. Huele a cerrado y fascismo. Los titulares no dejan lugar a dudas, si había algo que ganar, se perdió. Mueren las esperanzas en la UVI de críticos, traqueostomizadas con cánulas azules y verdes, transparentes, asépticas, con la única compañía de un “vip-vip” monótono. La muerte no llama, espera a que la ira y la desvergüenza realicen su trabajo. Todo es cuestión de tiempo, de mentiras y de alquilar falsas esperanzas a la ciudadanía.
Aprieta el calor.
Julio se tensa y contrae el poco músculo político que le queda. La licencia, los derechos quedan en un plano apenas perceptible, difuminado por una derecha de ultramar cuya especialidad es “pairear”, “fachear” o detener la embarcación, en este caso: el país. Los logros épicos y el intercambio de opiniones agonizan en la UCI.
La tarde y el teclado agonizan.
Las medias verdades o las mentiras se deslizan a través o por medio del gotero, a la arteria principal de la democracia: la Constitución Española.
Hay un botón de mi camisa que lucha denostado para no sucumbir a la ira y la desvergüenza. El pobre desgraciado ignora el deshilachado y las leyes de la gravedad. Sabe perfectamente lo que hay, pero se niega a alquilar esperanzas para un ojal tan maltrecho como él. ¿Qué fue del Capitán Trueno?
Aprieta el calor.
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Pako Martí es socio de infoLibre.
