Al grito de
“¡Abolición ya!”, este sábado ha finalizado el
5º Congreso Mundial Contra la Pena de Muerte con un recorrido entre la céntrica Plaza de Callao y la Puerta del Sol de Madrid.
Después de tres días de intensas sedsiones en el
Palacio Municipal de Congresos de Madrid, miles de personas han acudido a la clausura del evento con la intención de concienciar a la ciudadanía de la necesidad de
acabar con este tipo de condena. Amnistía Internacional ha apoyado el acto para “sumar esfuerzos a nivel mundial y acabar con la pena de muerte en todo el mundo”, como ha explicado a
infoLibre Safira Cantos, coordinadora de Amnistía Internacional en Madrid.
Cantos considera que este tipo de eventos son imprescindibles para
hacer presión y promover la movilización ciudadana. “Sus efectos”, ha dicho, “a veces no son visibles a medio plazo, pero al final se logra el cambio”. Y ha insistido en que es necesario que gobiernos, como los de
Estados Unidos, China o
Irán (que han sido los grandes
ausentes del evento), escuchen a aquellos que les dicen que este tipo de pena “no debe existir, porque está demostrado que
la pena de muerte no reduce la criminalidad. Hay que acabar con ella bajo cualquier circunstancia”.
Presionar a China
La representante de la organización ha querido hacer hincapié en que los gobiernos de diferentes países del mundo incorporen en sus programas políticos la abolición de la pena de muerte, y que, principalmente, se haga presión a China,
“el país que más personas ejecuta al año”. Y ha añadido que es necesario luchar y tomar conciencia contra un “acto de tortura terrible” y una práctica esencialmente “injusta por su
carácter irreversible”.
La ONG, junto con miembros de delegaciones de diversos países, han marchado desde Callao a Sol al ritmo de la batucada del grupo Samba da Rua. En el recorrido se han podido escuchar lemas en diversos idiomas con el mismo mensaje:
“Decid no a la pena de muerte”. En un acto simbólico, representantes de diversos países (Francia, España, Taiwan, Marruecos, Argelia, Túnez, Egipto, Líbano, Reino Unido, Noruega, etc), donde el papel de Oriente Medio y Norte de África ha sido destacable,
han portado una cuerda gigante para representar las ejecuciones en la horca.
Al acto, además, ha acudido
Joaquín José Martínez, el primer español y europeo en salir de un corredor de la muerte de Estados Unidos, que desde que
consiguió su libertad hace doce años lucha contra esta práctica. También han asistido familiares de
Pablo Íbar, único español que actualmente se encuentra en una cárcel de Estados Unidos a la espera de su ejecución.