Comisión Europea

Rajoy promete a Bruselas de forma reservada llevar a cabo nuevos recortes después de las elecciones

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El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, escribió una carta de cuatro páginas dirigida al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y datada en Madrid a 5 de mayo, días antes de la decisión de Bruselas de posponer hasta después de las elecciones el procedimiento que puede resultar en una multa para España por incumplir los objetivos fiscales, según ha publicado el diario El País.

En el mensaje, Rajoy resalta el esfuerzo realizado por su equipo durante los últimos cuatro años, y promete tomar medidas para reducir el déficit tras las elecciones del 26 de junio."Conscientes de la necesidad de salir del procedimiento por déficit excesivo cuanto antes, en la segunda mitad del año, una vez haya un nuevo Gobierno, estamos dispuestos a adoptar nuevas medidas, si se requieren, para cumplir con el objetivo", expresa el líder el PP en el escrito que La Moncloa no ha querido hacer público.

Por otro lado, el presidente arremete contra las autonomías, a quienes culpa del desvío presupuestario del pasado año. La celebración de comicios autonómicos y locales en mayo, así como las generales en diciembre, llevó a "desvíos presupuestarios en las Administraciones regionales muy notables", asegura Rajoy, quien sin embargo se jacta de que el Gobierno central sí cumple el objetivo, "compatibilizando además con rebajas de impuestos".

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El presidente en funciones enfatiza, asimismo, en que el Ejecutivo "ha realizado acciones efectivas adecuadas" para cumplir con las reglas "en línea con lo acordado" y reitera la idea del "contexto político complejo" para evitar males mayores. Madrid, sostiene, reclama que "se miren todas las actuaciones en los últimos cuatro años" y que "la valoración no se ciña únicamente al mero ámbito presupuestario".

De este modo, lamenta que con una multa "se daría la paradoja de que un país que ha hecho un gran avance en múltiples ámbitos de la política económica pudiera ser el primer país sancionado", lo cual "no sería un buen precedente", puesto que, considera Mariano Rajoy, se penalizaría "de igual manera a aquellos países que reforman sus economías que a aquellos que no lo hacen".

En cuanto a las medidas tomadas, sostiene que "la estabilidad y la mejora del bienestar social son los objetivos esenciales de la política económica de la UE", al tiempo que alardea de la reforma laboral puesta en marcha en el año 2012. Finalmente, manifiesta ser "consciente de las dificultades" de reducir el déficit por debajo del 3% del PIB, teniendo en cuenta el "entorno político actual", aunque promete "nuevas medidas" en caso de continuar en el Gobierno tras la cita electoral del 26-J.

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