Para Pepe Mujica
No dejo Pepe, casi cada día,
de pensar cuánta falta nos has hecho
en todos estos años de barbecho
con tu autito, tu chacra y tu Lucía.
¿Qué fue de la verdad y la osadía?
El siglo veintiuno es un estrecho
cuartucho con goteras en el techo
y olor a vomitona y sangre fría.
Tu voz insobornable nos ayuda
a cebar la esperanza en que el planeta
podría ser más limpio y más decente.
¿Cómo evitar que mi saudade acuda
a aquel hotel de tu Punta Carretas
donde abracé a mi tupa presidente?
* El pasado enero, cuando Pepe Mujica anunció que el cáncer que padecía se había extendido y que no se sometería a más tratamientos, sus allegados pusieron en marcha una iniciativa para hacerle llegar mensajes, poemas o canciones de quienes quisieran enviarlos. Joaquín Sabina envió este soneto que ahora ha querido publicar en infoLibre.
Para Pepe Mujica