“¡Tenemos formación, no queremos estar en el fogón!”

Miles de personas se manifestarón este domingo 8 de marzo en Madrid con motivo del Día Internacional de la Mujer para exigir "la derogación de la actual reforma laboral, particularmente agresiva con la igualdad; una política económica feminista que ponga en el centro el bienestar de las personas; una política preventiva y de protección contra el terrorismo machista; aborto libre gratuito fuera del Código Penal; el reconocimiento de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres; y la participación paritaria de las mujeres en todos los órganos, listas y esferas políticas y económicas". 

La marcha, convocada por el Movimiento Feminista de Madrid, arrancó a mediodía de la plaza de Cibeles bajo el lema "Contra las violencias y el capital, feminismo radical", serigrafiado sobre una lona plastificada de color morado que encabezaba la marcha. Al grito de "¡Fuera el aborto del Código Penal!", los manifestantes comenzaron a caminar hacia la Puerta del Sol, punto final del recorrido, mientras la Solfónica 15-M interpretaba Rebelión, una de sus letras más reconocidas. "Queremos una democracia real, república laica, justicia social...", cantaban algunos participantes a la manifestación acompañando a los miembros del coro.

Al acto acudieron el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez; los candidatos socialistas al Ayuntamiento de Madrid y al Ejecutivo autonómico, Antonio Miguel Carmona y Ángel Gabilondo, respectivamente; el candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón; el cabeza de lista de IU a la Comunidad de Madrid, Luis García Montero y la excandidata Tania Sánchez. Pedro Sánchez, Gabilongo y García Montero se hicieron una foto juntos. 

Pedro Sánchez, Luis García Montero y Ángel Gabilondo. EFE

Durante el recorrido, el sonido de la batucada que participaba en el acto se mezcló con las consignas de los asistentes. Los manifestantes clamaron durante todo el trayecto contra la violencia machista –"¡No son muertes, son asesinatos!", "¡Ninguna agresión sin respuesta!", "¡No están todas, faltan las muertas!"– y la desigualdad de las mujeres en el mercado laboral –"¡Queremos empleo, trabajo nos sobra!", "¡Tenemos formación, no queremos estar en el fogón!", "¡Igual trabajo, igual salario!"–. Además, otro de los ejes reivindicativos de la manifestación fue el rechazo a la ley del aborto y la presencia de esta práctica en el Código Penal –"¡Fuera los rosarios de nuestros ovarios!", "¡Que saquen el aborto del Código Penal!", "¡Nosotras parimos, nosotras decidimos!", "¡Si el papa estuviera preñado, el aborto sería sagrado!".

La proposición de reforma en la que se encuentra trabajando el Grupo Parlamentario Popular y por la que las menores de edad no podrían abortar sin el consentimiento paterno también estuvo muy presente durante la marcha, con gritos como "¡Voy a abortar sin permiso de papá!" y carteles en los que rezaban lemas reivindicativos en este sentido: "En el aborto también yo decido a los 16". Durante la manifestación, en la que participó el Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid (Cogam), también se escucharon consignas en favor de la situación del colectivo: "¡Bolleras somos, bolleras seremos, y en el armario no nos quedaremos!".

"Todavía las mujeres tenemos que luchar mucho para igualarnos en derechos a los hombre. Seguimos cobrando en algunas profesiones, sobre todo en los niveles medios y bajos, menos que nuestros compañeros de trabajo. Además, los trabajos que se nos asignan son más duros y peor pagados", explicó a este infoLibre Concha Colomo, de 62 años, preguntada por su asistencia a la manifestación. "Tenemos que hacer mucho más esfuerzo para llegar al mismo puesto que un hombre", apuntó, y deseó que algún día "no haga falta salir a la calle el 8 de marzo".

Preguntada por la prohibición de abortar de las menores de edad sin el consentimiento de los padres, Colomo aseguró que "no tienen en cuenta las situaciones". "Una chavala que con 14 o 15 años quiere abortar porque se ha quedado embarazada, lo normal es que se lo diga a sus padres y estos la apoyen. Pero cuando una chica de esta edad no se lo quiere decir es porque los padres ni la van a entender, ni la van a apoyar en el proceso", sentenció.

En la entrada a la Puerta del Sol, la manifestación se detuvo. Las jóvenes que portaban la pancarta de cabecera, se pusieron en la boca una mordaza. "Tres, dos, uno...", grito una de las organizadoras. Las muchachas se arrancaron el trozo de celofán de la boca y gritaron todas juntas: "¡Movimiento feminista contra la ley mordaza!". Después, la manifestación fue accediendo a la plaza madrileña y se colocó frente a la estatua de Carlos III, donde una activista de la página feminicidio.net fue colgando en la valla, uno a uno, los nombres de todas las mujeres asesinadas desde 2014.

Finalmente, se procedió a la lectura del manifiesto de convocatoria para poner punto y final a la manifestación. "Exigimos la derogación de la actual reforma laboral por ser particularmente agresiva con la igualdad; una política económica feminista que ponga en el centro del bienestar a las personas; aborto libre gratuito y fuera del Código Penal; un sistema educativo laico, público y gratuito, que incluya una educación afectiva y sexual; la derogación de la ley de Bases de Régimen Local que impide a los ayuntamientos hacer políticas de igualdad; la participación de las mujeres en todas las políticas públicas...", se escuchó desde uno de los megáfonos después de construir, frente a la pancarta principal, un gran lazo morado. Con los aplausos de los asistentes, los carteles reivindicativos con frases como "A igual trabajo, igual salario", "Repartir tareas, en casa como fuera" o "Salarios machistas, ¡no!", entre otros, fueron abandonando la plaza.