¿Estamos de enhorabuena?

 “Con patriotas así no necesitamos separatistas”. Maraña.

“Nada nuevo en el horizonte de máxima crispación política que ha caracterizado desde el minuto uno esta legislatura, una especie de carrera de relevos en la que Casado y Abascal se van turnando a la hora de lanzarse al cuello del gobierno de coalición, sea cual sea el momento y la escala de gravedad de la pandemia”. Maraña.

Y por eso son especialistas en centrar el debate en el estercolero que les convenga, poniendo a “su país amado” a los pies de la suspicacia y la sospecha más rastreras, porque les importa un comino nada que no sea recuperar el poder, empezando por señalar al Gobierno actual como el “eje del mal” de todos sus complejos y maquinaciones miserables y perversas.

Una vez más, así se mostraron el miércoles en la sesión de “control al Gobierno”, en sesión parlamentaria.

Tras haber puesto en peligro la obtención de los “fondos europeos de 140.000 millones”, a recibir con satisfacción, compromiso y lealtad para ese país al que insisten que "tanto aman”, en nombre de un informe tan de suyo como para haber sido elaborado por quienes lo debieron presentar ante la Unión Europea, sin que les importe el efecto de haber logrado el monto de los 140.000 millones. Lo que les importaba era ensuciar el nombre y la intención de “su Gobierno”, mal que les pese, el Gobierno de su nación y patria, mal que manoseen hasta la náusea esas “sagradas palabras" cuando se trata de que “solo ellos” hayan de ponerse firmes, a las órdenes, repito y no me canso de repetirlo, de sus “amos y señores”.

Y ahora ya Casado ha ampliado la “nómina” de indeseables gobernantes de su patria, desde los filoetarras a los ultraderechistas, pasando por los separatistas. Todos invalidados salvo ellos mismos, los de ¿la derecha de pata negra?, ¿esa derecha que ha de enfrentarse de nuevo a sus fantasmas de la corrupción sistemática? Una vez que parece más claro, hoy que ayer, que el tal “M. Rajoy” igual va a resultar que era “Mariano Rajoy”, y que lo de la contabilidad B, las dádivas, los donativos, los sobres… a cambio de mordidas satisfechas eran, lo que ya sabemos todos, salvo ellos que ¿disimulan o enfangan? la “verdad del barquero”, la práctica habitual de un partido “podrido”, capaz de ir del “tamayazo" a la “exigencia altanera y ruidosa” de exigir a los “socialcomunistas” que se rindan de antemano, simplemente, ¿por haber osado existir?

El pasado miércoles mismo constataron las referencias oficiales que ha bajado la incidencia media a 815 contagios por cada 100.000 habitantes. Claro que entre miércoles y jueves, la cifra de fallecidos había ascendido a 1.300 seres humanos. Un tema menor, por lo visto, para quienes, desde la sede de la soberanía popular, aún les cuesta un mundo ponerse al servicio de sus “responsables” gobernantes, elegidos democráticamente para gobernar y gestionar, con… ¡la ayuda y la lealtad de todos!, y nunca con “la zancadilla diaria puesta al servicio de sus airadas impotencias”.

Y con 815 contagios ya se ha iniciado la “campaña” de “salvemos la Semana Santa”, al estilo ¿del verano, de la navidad?, jugando a mantener el respiradero asistido a una economía que no resistirá el mal ejemplo de quienes, bajo el benévolo título de irresponsables volverían a hundir a la sociedad en el desastre sanitario de vuelta a los fallecidos por cientos y el colapso hospitalario. Actualmente el 46% de las UCIs están ocupadas por enfermos/as del virus.

Pero eso no le importa a la derecha de Abascal y Casado, que tanto montan. A los primeros esparciendo odio sobre “los pobres” que osen migrar a nuestro país. Nada que decir sobre los adinerados que vengan a enmierdar este país de una economía subsidiaria, de un turismo barato y baratero, o también de esos “tiburones” especuladores que hacen “El Dorado” de sus inversiones suculentas en la vieja piel de toro. Y a los segundos bastante tienen con echar toda la porquería posible, sospechas indemostrables por medio, contra un Gobierno que es el suyo, a su pesar, promoviendo el “neoliberalismo” de amiguetes de su nueva lideresa in péctore, con un despitorre absurdo y filibustero con el resto de sus gobernantes autónomos a los que solo les quedará ¿tirar de argumentario oficial?

Mientras, paralizan sine die y por la cara la renovación legal del Consejo del Poder Judicial. Les importa un comino, y centran su rechazo a la obtención de unos fondos europeos, 140.000 millones, a cuenta de un informe que se debió elaborar, que se elaboró, que se presentó y que ahora exigen ¿para qué?, para seguir fustigando todo viso de esperanza y respetabilidad, en nombre de “una transparencia” que ellos se la han saltado cuando han querido e interesado.

Pero saben muy bien lo que hacen, desgraciadamente para “su propio país”: perseguir el mayor desprestigio posible, caigamos quienes caigamos en esta lucha que solo primará si se antepone la economía, “su economía”, a la salud de todos.

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Por cierto, el miércoles mismo la Justicia, es decir el Juzgado de lo Contencioso-administrativo de Madrid, nº 29, con fecha de 2 de febrero, dio “diez días” a la Comunidad de Madrid para que cumpla con la sentencia de “recuperar las tres mil viviendas sociales vendidas al fondo buitre de Goldman Sachs”. Claro que esta desvergüenza no interesa. Y por eso Díaz Ayuso se resiste tanto… mientras “nos entretiene" tanto con que si “cuatro o seis comensales por mesa en terrazas… y tal y tal”.

Pero vamos avanzando, a pesar de tanto contratiempo. Cada vez puede haber más esperanza en que el “M. Rajoy” de la contabilidad B del PP sea “Mariano Rajoy”. Esto es como intentar cerrar un crucigrama o un jeroglífico. Váyase a saber… 

Antonio García Gómez es socio de infoLibre