Al menos 635 migrantes han perdido la vida este año en el Mediterráneo intentando alcanzar las costas del sur de Europa, entre ellos 217 que habrían perecido tratando de arribar a España, según un nuevo balance publicado este viernes por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y recogido por Europa Press.
En total, 26.026 personas han llegado a Italia, Grecia, Chipre o España desde el 1 de enero de 2018, unas 30.000 menos de las registradas durante el mismo periodo de 2017. La mayoría de las llegadas este año corresponden a las costas italianas, con al menos 10.659.
La ruta hacia España en el Mediterráneo se cobra 235 vidas en lo que va de año y supera a las de todo 2017
Las muertes también han descendido, de 1.363 a 635, con Italia de nuevo al frente de esta lista negra. La ruta central del Mediterráneo ha registrado este año 383 víctimas mortales, frente a las 35 de la parte este —Grecia y Chipre— y las 217 de la ruta occidental, donde se encuentra situada España, según el recuento de la OIM.
Por nacionalidades, la oficina de la OIM en Roma ha asegurado que Túnez encabeza la lista de países de origen, seguido de Eritrea, Nigeria, Sudán, Pakistán, Malí, Guinea y Senegal.
El balance está basado en estimaciones, en la medida en que no existen informaciones completas sobre el número de personas que podrían haber perecido ahogadas en el Mediterráneo mientras intentaban alcanzar de forma clandestina las costas europeas. Además, la OIM estima que casi 5.000 personas han sido devueltas a Libia por la Guardia Costera del país norteafricano.
Al menos 635 migrantes han perdido la vida este año en el Mediterráneo intentando alcanzar las costas del sur de Europa, entre ellos 217 que habrían perecido tratando de arribar a España, según un nuevo balance publicado este viernes por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y recogido por Europa Press.