Estado Islámico
La Policía lleva a cabo varias redadas en Berlín en busca del sospechoso tunecino
La Policía llevó a cabo registros en dos apartamentos de la capital alemana como parte de las operaciones de busca y captura de Anis Amri, el joven tunecino que figura como principal sospechoso del atentado perpetrado el pasado lunes en un mercado navideño de Berlín, informa Europa Press.
Fuentes policiales revelaron al diario alemán Welt que los agentes irrumpieron en dos viviendas en el barrio capitalino de Kreuzberg, pero no encontraron a Amri.
La Fiscalía Federal identificó a Amri, de 24 años de edad, como principal sospechoso porque las autoridades alemanas encontraron su permiso de residencia en la cabina del camión con el que se llevó a cabo el ataque terrorista.
El Ministerio Público difundió una ficha con dos fotografías de Amri y una descripción física. "Mide 1,78 centímetros, pesa unos 75 kilos, tiene el pelo negro y los ojos marrones", indicó. Además, detalló que tiene "lesiones" en nariz y cuello y que cuando ocurrieron los hechos llevaba "ropa oscura y una bufanda blanca".
El padre de Amri contó a Radio Mosaique, una emisora tunecina, que su hijo salió de la localidad rural de Oueslatia, donde vivía junto a su familia, hace siete años en el marco de una operación migratoria ilegal.
Su padre reveló que Amri fue condenado in absentia a cinco años de cárcel por un robo con violencia en Oueslatia. Una vez fuera de Túnez, cumplió cuatro años de prisión en Italia por un incendio en un colegio. Tras eso partió hacia Alemania.
El diario local Suedeuschte Zeitung precisó que, ya en Alemania, estuvo en contacto con Abu Walaa, un islamista detenido el pasado noviembre junto a otras cuatro personas que formaban parte de una red yihadista que aportaba combatientes a Estado Islámico.
El sospechoso de atentar en Berlín se comunicó con Dáesh y estaba bajo el radar de EEUU
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Amri preguntó a un hombre, que era confidente de la Policía de Renania del Norte-Westfalia, su última residencia conocida en Alemania, cómo podía adquirir armas de fuego, por lo que se debería haber vigilado sus comunicaciones telefónicas. En este sentido, un investigador admitió que no está claro cómo la Policía perdió su pista.
La Policía berlinesa ya detuvo poco después del ataque terrorista –reivindicado por Estado Islámico– a un refugiado paquistaní de 23 años, pero lo liberó sin cargos un día después porque no pudo probar su presencia en el vehículo.
El lunes por la noche un camión arrolló el mercado navideño próximo a la Iglesia Memorial Kaiser Wilhelm, dejando 12 muertos y 48 heridos. Según las primeras investigaciones, un hombre secuestró el camión y mató al conductor, de nacionalidad polaca.
