La Guardia Civil interviene 1.300 kilos de cocaína en un barco cerca de Cádiz que fue asaltado por polizones
La Guardia Civil ha evitado en la madrugada de este jueves la introducción de un alijo de cocaína que iba dentro de un portacontenedores que realizaba la ruta Vigo-Málaga. La nave, que ha sido interceptada a 40 millas de la Bahía de Cádiz, ha sido escoltada al puerto de la localidad andaluza antes de que pudiera llevar a cabo el desembarco de la mercancía. El Instituto Armado explica que descubrieron que en alta mar un grupo de polizones intentó hacerse con la droga y descargarla a otra embarcación tras salir de las Rías Baixas gallegas en dirección al sur de España.
Se desconoce si esos polizones viajaron desde Sudamérica, la hipótesis más probable, o si se introdujeron en el portacontenedores, el As Carelia, en su escala en Galicia. Una secuencia parecida se vio en la ría de Pontevedra, primero, y en el Estrecho de Gibraltar, después, conocidas tras sendos éxitos policiales.
Hasta el momento, explica el Instituto Armado, se han incautado 38 fardos de cocaína que han arrojado un peso total aproximado de 1.300 kilos, pero los agentes inspeccionan todavía el buque debido a su gran tamaño.
La intervención se realizó cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la trayectoria del buque portacontenedores As Carelia en la ruta Vigo-Málaga y del que se sospechaba que pudiera llevar cargamento de cocaína. La sustancia no pudo ser detectada en Galicia en un barco que llegó a España procedente de Cartagena de Indias, en Colombia.
Los guardias civiles descubrieron que el buque había sido asaltado por polizones en altamar con el propósito de extraer los fardos de cocaína del interior de los contenedores para luego descargarlos a otra embarcación.
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Tras localizar el buque a 40 millas de la Bahía de Cádiz, la Guardia Civil lo escoltó en todo momento hasta el puerto. Una vez atracado se inició un despliegue policial para realizar una inspección minuciosa donde se localizaron, en la cubierta superior, muy próximos a los contenedores, 38 fardos de cocaína.
Las grandes dimensiones del buque, de bandera portuguesa y que recorre de forma rutinaria la ruta entre Sudamérica y España, tocando con frecuencia los puertos de Ecuador y Colombia en origen y los de Vigo, Málaga y Livorno, en Europa, harán que la inspección se prolongue durante horas.
Precisamente hace algunos meses, Narcodiario daba cuenta de la llegada de 2.000 kilos de cocaína al puerto de Livorno a bordo del Mersin Express, otro de los buques que efectúa de forma rutinaria la singladura entre Ecuador y Europa y que pasó por el puerto de Vigo.