Rajoy culpa a Europa de los recortes sociales y sigue mudo sobre Bárcenas

Casi a la misma hora que el Congreso de los Diputados, a través de la Junta de Portavoces, ponía en bandeja que Mariano Rajoy no rinda cuentas en la Cámara hasta después del verano sobre la financiación del PP y los supuestos sobresueldos, el presidente del Gobierno reunía en la Moncloa a representantes de las entidades de acción social.

Convencido de que lo que toca ahora es no hablar del escándalo de los papeles de Bárcenas, el presidente del Gobierno ha dejado en manos del partido y de los ministros las reacciones a las últimos avances judiciales y a lo publicado últimamente. Unas informaciones que le atañen personalmente ahora que el diario El Mundo ha publicado una parte de la contabilidad del PP, cuya veracidad ha reconocido Luis Bárcenas, y en la que figura como perceptor de sobresueldos en su etapa de ministro de los gobiernos de Aznar.

Rajoy está convencido de que su verdadero enemigo es la situación económica y no Bárcenas. Cree que si logra dar una vuelta al paro y fluye el crédito será premiado en las urnas. Por ello, sus discursos, como el de este jueves, tienen siempre un marcado tono económico.

Las ONG y las organizaciones sociales tampoco se han escapado de los recortes emprendidos por el Gobierno del PP. “Ajustes”, prefirió calificarlos el líder del Ejecutivo en una intervención encaminada a justificar este tijeretazo y a insistir en que su objetivo es la creación de empleo y en que cuando se cree empleo las cosas irán mejor. “En España siempre tendremos necesidad de atender a la gente, pero si somos capaces de crecer, les habremos hecho el mejor servicio a los españoles”, mantuvo.

“¿Usted por qué hace ajustes?”, se preguntó el presidente. Una cuestión a la que respondió apuntando hacia Europa. “Primero, por nuestros compromisos con Europa. Pero también lo hacemos porque todo lo que gastemos por encima de lo que ingresemos hay que pedirlo prestado”.

Como ejemplo, el presidente del Gobierno aseguró que, a finales de 2011, cuando llegó a la Presidencia del Gobierno, España tuvo “que pedir prestados 90.000 millones de euros”. “Eso es mucho dinero”, añadió. “Pagamos al año 37.000 millones de euros de intereses. Tenemos que hacerlo, pedir menos dinero para no hipotecarnos”, insistió.

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Pese a los recortes sociales y en servicios públicos ejecutados por su Ejecutivo desde que llegó a la Moncloa, Rajoy sostuvo que “toda la labor del Gobierno va dirigido a un solo objetivo: mejorar el bienestar de las personas”.

El presidente recalcó que está volcado en la creación de empleo. “Cuando la gente no trabaja no recibe seguro de desempleo, paga impuestos y consume y eso genera los ingresos necesarios para que la administración pueda mejorar el bienestar de las personas”, dijo.

La ministra de Sanidad, Ana Mato, también intervino en este acto en el que recordó que el Gobierno destinará 3.200 millones a ayudas a las familias en situación de vulnerabilidad.