El futuro de la monarquía
El rey emérito recibió en mano miles de euros que entraron en España a través de Barajas por vuelos ordinarios
Los 64,8 millones de euros que Juan Carlos I recibió de parte del rey Abdulá de Arabia Saudí en 2008 pasaron de la cuenta en Suiza a las manos del emérito en España a través de los controles del aeropuerto de Barajas. Así lo desvela la investigación de El Confidencial, que ha trazado el recorrido de miles de euros a través de los movimientos de la cuenta 505523 y las facturas de la agencia de viajes contratada por el testaferro del rey para sus vuelos Madrid-Ginebra.
La cuenta suiza abierta en el banco Mirabaud y gestionada por una sociedad intelectual panameña, Lucum Foundation, fue beneficiaria de dos transferencias de dinero por parte de Arabia Saudí: los mencionados 64,8 millones de 2008 y otros 1,5 millones en 2010. El testaferro del rey, Dante Canonica, fue el encargado de realizar los reintegros en Ginebra y transportarlos como equipaje en vuelos ordinarios hasta Zarzuela. Un método barato —volar en jet privado hubiera costado unos 200.000 euros— y que podía pasar los controles en Barajas sin problemas.
La mecánica era muy sencilla. Canonica retiraba el dinero, volaba a Madrid y pasaba los controles aeroportuarios sin ningún tipo de problema. Se reunía entonces con Juan Carlos I y este firmaba un recibo sin membrete, en el que solo constaba la fecha y el importe de la transacción. Después, Canonica volvía a Suiza, la mayoría de las veces en el mismo día. En algunas ocasiones, era su socio Arturo Fasana quien se ocupaba de la tarea.
En cualquier caso, no hay constancia de que ese dinero fuera declarado a Hacienda en ninguno de los viajes, a pesar de la normativa que obliga a hacerlo cuando se mueven más de 10.000 euros en efectivo desde un país externo a la Unión Europea, como es el caso de Suiza.
Los reintegros solían oscilar entre los 200.000 y los 300.000 euros y tenían una periodicidad bimensual, aunque estaban al cargo de las necesidades del rey. Cuando la ocasión así lo requiso, la Casa Real llegó a solicitar los servicios de Canonica una vez por semana. No en vano, las retiradas de dinero siempre llevaban el mismo concepto: “Entrega en España para gastos personales”.
La primera retirada de dinero se produjo cinco meses después de que entraran en la cuenta 505523 los 64,8 millones saudíes. El 12 de enero de 2009, salieron del banco Mirabaud 207.000 euros a nombre de Rhone Gestion, el bufete de Canonica y Fasana. Los meses siguientes, el mecanismo fue similar: 205.000 euros el 11 de marzo de 2009, 105.000 euros el 23 de marzo y 209.000 el 17 de junio de ese mismo año.
Los reintegros de dinero en efectivo continuaron ininterrumpidos incluso tras el escándalo de Botsuana. Apenas una semana después de que el emérito pidiera disculpas por su comportamiento en el safari, el 25 de abril de 2012, la Zarzuela recibió una visita de Canonica.
De hecho, es en 2012 cuando el registro de la agencia de viajes del testaferro registra una mayor periodicidad. Canonica viajó a Madrid casi cada semana entre abril y junio de ese año. Entre los documentos que referencia El Confidencial se encontraría un dosier de la cuenta de Lucum firmado por Juan Carlos I, de su puño y letra, el 13 de junio de 2012 —una de las fechas coincidente con el vuelo Ginebra-Madrid de Canonica—.
El descubrimiento de estas transacciones bancarias sin declarar ha despertado el debate sobre la inviolabilidad del rey. Será el Tribunal Supremo quien deberá decidir ahora si estos movimientos, todos anteriores a 2014 y, por tanto, a la abdicación de Juan Carlos I, son o no constitutivos de delito.
De la retirada del título de emérito al fin del aforamiento: las posibilidades legales para acabar con los privilegios de Juan Carlos I
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Unidas Podemos pide una investigación
El secretario primero de la Mesa del Congreso y diputado de En Comú, Gerardo Pisarello, ha insistido este martes al PSOE para que reconsidere su negativa a que la Cámara Baja cree una comisión de investigación relativa al Rey Emérito porque las últimas noticias sobre sus "posible actuaciones fraudulentas", además de "perturbadoras e inquietantes", como las calificó el presidente Pedro Sánchez, son "inadmisibles".
Unidas Podemos tiene presentado un recurso contra el veto que, con los votos de PSOE, PP y Vox, impuso la Mesa del Congreso a esa investigación que también reclaman los partidos nacionalistas, independentistas, Compromís y Más País. Ese recurso está pendiente de resolución y por eso Pisarello ha insistido en la conveniencia de que los socios de gobierno de Unidas Podemos cambien de parecer y den vía libre al debate sobre la conveniencia de abrir esa investigación parlamentaria. También ha pedido lo mismo al PP y Vox.
