El Gobierno no amplía la prohibición del corte de suministros ni la moratoria hipotecaria

Algunas de las medidas aprobadas en marzo por el Ejecutivo para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la crisis del coronavirus y conocidas como el 'escudo social' se prorrogarán hasta el 31 de enero de 2021, según fuentes del Ejecutuvo consultadas por infoLibre.

Entre las prórrogas aprobadas este martes en el Consejo de Ministros se encuentra la prohibición de desahucios sin alternativa habitacional, que vencería el próximo viernes 2 octubre. Durante los próximos meses, el mandato permanecerá activo en los mismos términos recogidos el pasado 1 de abril en el Real Decreto Ley que regula este paquete de medidas.

Asimismo, se prolongará hasta enero de 2021 lo referente a los contratos de alquiler vigentes hasta el momento para evitar subidas abusivas en los precios y ayudar a que los inquilinos puedan hacer frente al pago. Además, los grandes propietarios tendrán que decidir entre quitar del 50% del alquiler o una reestructuración de la deuda en, al menos, 3 años.

Las medidas que caen

Durante todo el lunes, el Gobierno estuvo negociando la prolongación de otro tipo de medidas, como la prohibición de cortes de agua, luz y gas natural a particulares, que también vencen este miércoles, el bono social eléctrico. O la moratoria hipotecaria. A última hora del lunes fuentes del Ejecutivo advertían de que, salvo cambios de última hora, no iba a haber prórroga ni en lo relativo al corte de suministros ni en los relativo a los préstamos hipotecarios. Y así ha sido.

"Unidas podemos ha intentado hasta el último momento incluir en el decreto del Consejo de Ministros la prohibición de cortes de suministros, pero al final no ha sido posible; se ha logrado pactar una medida intermedia, la aplicación del bono social eléctrico también a los ciudadanos-as que han quedado en situación de vulnerabilidad desde que se inició la pandemia", explican fuentes de la formación morada.

Sobre la mesa también estuvo incluir la prórroga de préstamos hipotecarios y no hipotecarios, al menos hasta el próximo 31 de enero, pero fuentes conocedoras del contenido de las negociaciones destacan que la iniciativa se ha topado con el rechazo de Economía.

Respecto al bono social eléctrico, este se reforma para adaptarlo a las circunstancias del covid-19 y asegurar que todas aquellas personas que hayan podido caer en situación de vulnerabilidad puedan acceder a él de forma rápida.

Se establece que el acceso al bono social eléctrico se calculará teniendo en cuenta los ingresos del mes anterior a la solicitud en lugar del año anterior como está establecido. De esta manera, se podrá acceder al bono tras situaciones repentinas de pérdidas de ingresos sin tener que esperar a la declaración de la renta, al año siguiente, para poder comprobarlo.

Mediante esta medida se acoge a consumidores vulnerables que a raíz de la crisis se encuentren en situación de desempleo, ERTE,  que hayan visto reducida su jornada o hayan experimentado una pérdida sustancial de ingresos.

En el mes de julio ya se dilataron los tiempos de algunas de las disposiciones del 'escudo social', como la solicitud de moratorias en términos de hipoteca, alquiler y consumo, hasta este 30 de septiembre.