El debate de investidura

PSOE y ERC se comprometen a seguir negociando sobre el “conflicto político” catalán para desbloquear la investidura

De izquierda a derecha, Salvador Illa, José Luis Ábalos y Adriana Lastra, del PSOE, y Gabriel Rufián, Marta Vilalta y Josep Maria Jové, de ERC.

El Partido Socialista y ERC se reunieron en la tarde de este jueves durante más de dos horas para intentar acercar posturas de cara a una investidura de Pedro Sánchez. La reunión culminó sin acuerdo cerrado, pero con la voluntad de seguir negociando. Al término del encuentro, ambas formaciones emitieron sendos comunicados en los que coinciden en la voluntad de "diálogo". La postura de los independentistas catalanes, no obstante, aún se mantiene en el 'no' a Sánchez para la investidura. Pero ya hay una nueva fecha para seguir negociando: el martes 3 de diciembre, fecha de constitución de las Cortes. Como el encuentro de este jueves, será a las 17.00 horas.

"Ambas partes han establecido un punto de partida común al constatar la necesidad de abordar políticamente un conflicto que es, esencialmente, de naturaleza política", puede leerse en uno de los puntos del comunicado de ERC. Y añade: "Aunque los diagnósticos de las partes no son coincidentes, sí comparten la necesidad de poder retomar la vía del diálogo entre partidos e instituciones, así como implicar en ésta a la sociedad civil. Un diálogo que debe ser abierto y sincero"."Recuperar los derechos cercenados por el Partido Popular"

"Recuperar los derechos cercenados por el Partido Popular" Por su parte, el comunicado conjunto del PSOE y del PSC habla de "una primera aproximación en la que se ha podido constatar la existencia de diferencias pero también de puntos de encuentro". De "una voluntad compartida de diálogo que permita desencallar la formación de Gobierno y asegurar la estabilidad política necesaria que permita afrontar: una agenda de derechos sociales, recuperación de derechos civiles y laborales cercenados por los gobiernos del Partido Popular, la situación industrial en Cataluña y en el conjunto de España, en particular el sector de la automoción, y encauzar el conflicto político en Cataluña desde el diálogo y el entendimiento institucional".

Los comunicados de ambos partidos coinciden, por tanto, en reconocer la existencia de un "conflicto político" en Cataluña y en la necesidad de resolverlo mediante el "diálogo".

Los negociadores republicanos, señala el comunicado de Esquerra, han trasladado a los socialistas "que la solución democrática para Catalunya pasa por una mesa de negociación que se fundamenta en cuatro pilares: que sea entre gobiernos, sin apriorismos ni temas vetados, con calendario y con garantías de cumplimiento". En términos similares se había expresado Gabriel Rufián a comienzos de semana en el Congreso.

"De igual a igual"

La reunión había comenzado pasadas las 17.00 horas en dependencias institucionales del Congreso. Del lado del Partido Socialista, se sentaron a la mesa los números dos y tres de la formación, Adriana Lastra y José Luis Ábalos, y el secretario de Organización del PSC, Salvador Illa. Por parte de Esquerra, acudieron el diputado Gabriel Rufián; la portavoz y secretaria general adjunta, Marta Vilalta, y el diputado en el Parlament, Josep María Jové. 

Rufián acudía a este encuentro con dos advertencias muy concretas. Para que las conversaciones lleguen a buen puerto, el martes exigió una negociación en dos fases. En la primera, previa a la investidura, debe celebrarse una mesa de negociación entre partidos en la que se reconozca que hay un "conflicto político inequívoco" en Cataluña. Y, ya tras la investidura, una mesa de diálogo institucional entre los dos Gobiernos, "de igual a igual". Entre el Ejecutivo que salga de esa investidura y el Govern.

Como respuesta, desde el Gobierno se advirtió de que un diálogo sobre el derecho de autodeterminación es una línea roja. Porque "no está" recogido en la legalidad española. Y se circunscribió cualquier conversación Gobierno-Govern a la Comisión Bilateral Generalitat-Estado, un órgano contemplado en el Estatut y que, como mínimo, debe celebrar dos encuentros al año.

Además, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, aseguró que el PSOE está abierto a hablar de cambios en el Título VIII de la Constitución.La base para unos Presupuestos

Los límites constitucionales de las exigencias del independentismo a Pedro Sánchez

Los límites constitucionales de las exigencias del independentismo a Pedro Sánchez

Según ha informado infoLibre, la idea de PSOE y Unidas Podemos es intentar atraer a Esquerra a un acuerdo que no se limite a la apertura de un diálogo sobre el conflicto territorial sino que comprometa "las bases" del apoyo de los republicanos a los Presupuestos Generales del Estado para 2020. Porque sacar adelante las cuentas públicas después de un año con presupuestos prorrogados será la prioridad del Gobierno de coalición si Pedro Sánchez consigue superar la investidura.Tanto el presidente en funciones como el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, desean armar no sólo una mayoría suficiente para una investidura que desbloquee la legislatura sino una alianza de izquierdas que garantice cuatro años de estabilidad y políticas progresistas. La idea es evitar lo ocurrido en febrero, cuando la ausencia de un acuerdo marco con los republicanos tumbó el proyecto de Presupuestos para 2019 y acabó provocando la convocatoria de elecciones anticipadas.

La vía de buscar la abstención de los 13 diputados del grupo de Esquerra es la única a explorar por Pedro Sánchez después de que el Partido Popular haya sido muy insistente en su "no" a Sánchez.

El partido de Pablo Casado descarta una abstención. También descarta negociar un Gobierno de coalición. Los españoles, subrayan, les pusieron el 10N como principal partido de la oposición y eso implica que ellos son "la alternativa". No obstante, los conservadores sí están abiertos a acuerdos puntuales de legislatura sobre cuestiones de Estado como Presupuestos y pensiones.

Más sobre este tema
stats