Día mundial del refugiado

Todos los 20 de junio se celebra el día mundial de los refugiados. Cada años son millones de seres humanos, de todos los continentes, los que asumen en sus carnes el estatus de refugiados, ya sea por motivos políticos, religiosos, de sexo, o simplemente buscan mejorar su estatus social y emprenden un camino, donde algunos, por desgracia mueren en el intento acabando en unos de los grandes cementerios humanos que es el Mediterráneo. Por desgracia, la Unión Europea, con su apoyo a las devoluciones en caliente, no responde de forma adecuada a la crisis humanitaria que se está generando de forma continuada como consecuencia de los flujos de personas que tratan de llegar a la UE en busca de protección.

Es vergonzoso que la Unión Europea, con más de 500 millones de habitantes, se muestre incapaz de acoger adecuadamente y en condiciones dignas a las cientos de miles de personas que están llegando a la UE en situación de riesgo o persecución. Es más, hace años se realizó una propuesta que suponía una “reparto solidario” de una cifra en torno a los 80.000 solicitantes, pero la iniciativa, quedó en el saco roto a la vista de la vergonzante respuesta de los Estados miembros.

Es importante recalcar este extremo, que parece olvidarse: son personas que huyen de países en situación de grave conflicto humanitario, donde existe riesgo cierto para su integridad y la de sus familias, muchos de ellos niños. Necesitan y merecen la protección internacional reconocida en los tratados internacionales firmados por los países de la UE. Huyen hacia la UE, que es el oasis soñado de acogida y respeto para sus derechos y donde, encuentran un limbo inhóspito bien de cinismo bien de abierta hostilidad.

Resulta insultante asimismo que los Gobiernos se escuden y al mismo tiempo agiten el fantasma, de la inmigración irregular para no cumplir sus obligaciones y responsabilidades, generando una ceremonia de la confusión y mezclando conceptos diferentes como son flujos migratorios de carácter laboral con personas que huyen de situaciones ciertas de riesgo para sus vidas.

Con el culo al aire

Ver más

La sociedad debería exigir que de manera inmediata se proceda al aumento de los medios necesarios para garantizar la tramitación y respuesta adecuados a las personas que llegan buscando protección, y asimismo exigir la finalización inmediata de las respuestas policiales, coercitivas o represivas por parte de los países de la UE que no faciliten la protección y el amparo de esas personas. E intentar, con todos los medios, prevenir y evitar discursos demagógicos o xenófobos de los partidos de ultraderecha cada día pronuncian, cada vez más de una forma irracional, absurda e insensata y de eso sabemos mucho en nuestro país con los discursos de Vox y sus planteamientos parlamentarios, allí donde les dejan gobernar.

El 20 de junio no debería ser solo el día del refugiado, sino también el día de partida que por fin todos los Estados miembros de la UE, así como todos los Estados que gozan de estabilidad política social de comenzar, de manera real a apoyar y realizar leyes que den cobertura y un apoyo real al refugiado para darle dignidad y sobre todo derechos que le son usurpados, día tras día y lo peor que se estigmatiza como delincuentes y sirve para que aumente el odio y empeore la convivencia entre los seres humanos. Todos en algún momento hemos sido refugiados, de alguna manera, y España y Europa sabe mucho de tener que refugiarse en otros países. Por tanto es necesario ya de ponerse a trabajar con realidad, sensatez y coherencia para dar al refugiado el estatus de ser humano que se merece y debe tener y no de criminalizarlo y estigmatizarlo y menos quitarle los derechos que como ser humano tiene.

Ximo Estal Lizondo es socio de infoLibre