Librepensadores

Para liderar al PSOE

Luis González Iglesias

El pasado 26 de marzo presentó oficialmente su candidatura Susana Díaz a la Secretaría General del PSOE. Se culmina con ello una serie de despropósitos en ese partido que ha sido lo habitual desde hace muchos meses. Primero con una oposición desleal de Susana Díaz a Pedro Sánchez casi desde que fue nombrado éste para dirigir el partido. Es decir, desde muchísimo antes del No es no, con que Pedro se dio la puntilla a sí mismo, demostrando una falta de visión política que le llevó al desastre. Pero desastre que sirvió para poner de manifiesto lo que ya sabíamos, las malas artes de moverse en la política y en el partido de Susana Díaz. Quedó muy claro que los dos quedaban inhabilitados para ser líderes del PSOE a la vista de mucha gente sensata.

Pero no, el político es un ser especial y el poder político debe de ser una droga que quien lo acaricia ya nunca va a renunciar a perderlo o a conseguirlo. De forma que otra vez tenemos aquí a los dos peleando por liderar el partido al que tanto daño han hecho. A ninguno les importa que el partido se rompa o el daño que puedan hacer, no. Lo único que quieren es aniquilar al otro, por cualquier medio, y hacerse con las riendas del PSOE. Afortunadamente dio un paso al frente Pachi López, una persona que, sin tener el tirón que requiere un líder hoy, al menos se percibe como honesta, sensata y que puede servir para cerrar heridas en el seno del partido, para esperar tiempos mejores. Porque votar a Pedro Sánchez, que tan poca visión demostró en los momentos decisivos, y tan poca mano izquierda tuvo en la organización del partido, le va a ser difícil a mucha gente. Y votar a Susana Díaz, siendo tan evidente su habilidad para mover los hilos del PSOE andaluz a su conveniencia, manipuladora y viendo cómo se rodea de gente tan mediana como Cornejo, Mario Jiménez o Verónica Pérez, para muchos va a ser un plato muy difícil de digerir. Pero ahí la tenemos, arropada por lo que la prensa llama vieja guardia: Felipe González, Alfonso Guerra, Rubalcaba… Yo creo que se equivocan.

¿No había otras opciones en el partido? Yo esperaba que hubiesen dado el paso al frente caras nuevas, como Ignacio Urquizu y Juan Lobato. Una candidatura de ambos habría sido muy fuerte y esperanzadora. ¿Por qué no lo dan, qué temen? Quizás al propio aparato del partido? O quizás esperan un momento más propicio? Sí era el momento y todavía lo es. Lo que no es momento de tácticas y matemáticas, sino de verdaderos líderes, preparados y honestos.

Luis González Iglesias es socio de infoLibre

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