Milei, el alumno político que utiliza al profesor Mises
En algún momento de su carrera profesional como economista, Javier Milei tuvo una revelación, según él mismo ha contado; la revelación se produjo tras la lectura de la obra de Ludwig Von Mises.
El economista y pensador Mises es uno de los más importantes teóricos de la escuela austríaca de economía; discípulo suyo y más conocido fue Friedrich Hayek, premio Nobel de Economía en 1974, inspirador a su vez de Milton Friedman, el autor más conocido de la Escuela de Chicago, de carácter ultraliberal, pero que no sigue al pie de la letra los postulados de la escuela austríaca.
Mises murió en 1973 en Estados Unidos, tras haber salido de su Viena natal, por la persecución de los nazis, al afincarse primero en Suiza y después en Estados Unidos. Desde 1920 y hasta su muerte creó una obra extensa, pero nunca tuvo grandes reconocimientos en vida. Fue un pensador, un teórico, nunca un político aunque su obra contenga una determinada filosofía política (que no se va a analizar en este comentario).
Trabajador y metódico, aunque según Milton Friedman “era una persona de opiniones muy firmes y bastante intolerante con las diferencias de opinión” (en Samuelson vs Hayek de Nicholas Wapshott), e "inflexible en la disciplina del trabajo del que está en misión", según comenta Gabriel Zanotti en su ensayo La Filosofía Política de Von Mises.
El terrorífico discípulo tardío
El discípulo tardío Milei seguramente habría aterrorizado al maestro Mise, quien repudiaba la violencia y el conflicto teniendo siempre la paz internacional y social como objetivo civilizatorio. La motosierra, el león rugiente, el mono con navaja, los insultos, el espectáculo, habrían producido en el serio Mises un profundo rechazo; aunque intolerante debatía sus ideas y razonaba sus argumentos. Cuesta imaginar a Milei en un debate sereno, escuchando a sus oponentes.
Milei es un político de extrema derecha al que las ideas ultraliberales en lo económico de Mises sirven como apoyo y coartada de sus verdaderos objetivos. Está alineado con la extrema derecha española y europea en su concepción de la democracia que convertirán en iliberal si llegan a alcanzar el poder. Mises era un demócrata liberal sin fisuras e internacionalista frente al nacionalismo estrecho de Milei y Abascal; también era antiimperialista y antimilitarista frente a las ambigüedades de Milei en relación con la Junta Militar argentina y de Abascal frente al franquismo.
En definitiva, Mises habría rechazado al político Milei, quien se está apropiando de la obra de Mises para su campaña, en particular del ensayo El Socialismo escrito en 1922.
El presidente argentino se ha autoasignado el papel de difusor y portavoz de la batalla cultural cuyo objetivo es erradicar las ideas progresistas en todos los ámbitos de la sociedad. Ha delegado la gestión diaria en su hermana y ministros. Mientras él está en campaña ideológica, aquéllos llevan a la práctica sus ideas económicas.
Su ataque al socialismo utilizando la obra de Mises parte de una falacia: atacar el socialismo analizado por el autor austríaco, en dos países donde aquel socialismo no ha existido nunca.
¿Socialismo en Argentina y en España?
"El socialismo arruinó a Argentina", dice Milei. La pregunta es: ¿Cuándo ha habido un gobierno socialista en Argentina, donde además los partidos comunistas y socialista han tenido escasa relevancia? A no ser que se confunda el peronismo, dividido en varias fracciones, con el socialismo, lo que ningún historiador o politólogo admitiría.
Argentina ha sido gobernada desde los felices años 20 del siglo pasado por todo tipo de gobiernos: radicales, varias dictaduras militares, diversas fracciones peronistas, derecha liberal, pero nunca un gobierno al que pudiera calificarse de al menos socialdemócrata.
Lo que ha arruinado a Argentina ha sido la incompetencia de todos esos gobiernos y de sus clases dirigentes, que nunca supieron aprovechar las grandes ganancias de su economía exportadora, agrícola y ganadera, para desarrollar una economía dinámica y una sociedad menos desigual.
Milei vino a España invitado por Vox y la extrema derecha europea. En su discurso en Vistalegre, el 19 de mayo pasado, olvidó que la Constitución española garantiza las libertades individuales, así como la propiedad privada. También olvidó que estaba en una país con un gobierno socialdemócrata, pero donde existe una economía de mercado y un sistema capitalista en lo económico. Habló como si estuviera en una país del socialismo soviético, esa es la falacia.
La campaña y sus discursos sirven sólo a la extrema derecha, mientras intenta engañarnos sobre sus verdaderos objetivos: una democracia iliberal en lo político y ultraliberal en lo económico, es decir, sin derechos y servicios sociales y sin límites para la desigualdad.
En el mismo discurso de Vistalegre expresó su absoluto rechazo a la discrepancia y al diálogo, "los zurdos nunca tienen razón”; su preferencia por el enfrentamiento, “los zurdos nos van a correr si no vencemos; "los zurdos son envidiosos y resentidos...y asesinos en potencia”.
Uno de los momentos más chocantes en su discurso madrileño se produjo cuando afirmó que a ellos (Vox y él) les había costado sudor y lágrimas llegar a donde estaban. Si uno contempla la primera fila de sus oyentes, Abascal, Buxadé, Marinne Le Pen, entre otros, procede a preguntarse, ¿cuándo estos personajes han tenido que sudar o derramar lágrimas para llegar al puesto político que ocupan o simplemente para ganarse la vida?
En cuanto al propio Milei, ¿no esconde esa calificación de su sudor y lágrimas un cierto resentimiento? A ver si va a resultar que no sólo los zurdos son resentidos.
Las cenas de la libertad
El 25 de abril de este año la Fundación Libertad, un centro de pensamiento argentino autocalificado de liberal, ofreció una cena de la libertad a Milei. Seguramente entre los asistentes estaban una parte de los que han arruinado a Argentina o sus herederos. Por parte española asistieron Aznar y Cayetana Alvarez de Toledo muy ligada por via materna a las clases pudientes argentinas. La fundación, según sus propias informaciones, se financia con las aportaciones de varios cientos de empresas.
En su discurso, Milei dijo estar ante un público calificado y se dedicó a explicar en un plano teórico lo que es la inflación y los autocalificados logros de su gobierno en su contención, acompañando sus palabras de burla a los opositores y a la banda de choros del gobierno anterior.
Cuando Milei grita "¡Viva la libertad, carajo!", escucho "¡Viva mi libertad!". La libertad nunca ha necesitado ir acompañada de ninguna palabra malsonante, excepto cuando en realidad se dice "¡Viva mi libertad!" y la vuestra me importa un carajo
En España se ofrecerá otra cena de la libertad a Milei el próximo 21 de junio; el evento está organizado por el Instituto Juan de Mariana, que ha otorgado su premio anual al presidente argentino. Previamente el Instituto ha convocado un concurso denominado Encomio audiovisual a Javier Milei, que según el Instituto “busca videos creativos y originales que homenajeen la carrera, impacto y contribuciones de Javier Milei al mundo de la libertad y la economía". En las bases del concurso se señala que el vídeo debe ser un tributo a Milei. Demasiado culto a la personalidad de quien se proclama libertario. El vídeo ganador será presentado en la cena de la libertad.
El Instituto Juan de Mariana, que también ha premiado a otros defensores de la libertad como Vargas Llosa, Jiménez Losantos, Pedro Schwartz o Carlos Rodríguez Braun, ofrece seminarios, conferencias y cursos de verano, así como un congreso de economía austriaca.
Sus dirigentes son sobre todo profesionales de la economía y el periodismo que colaboran a han colaborado con las fundaciones Faes y Disenso, así como con medios como Expansión, El Imparcial, Intereconomía y Libertad Digital, o ejercido funciones docentes o directivas en la Universidad Rey Juan Carlos o Francisco Marroquín.
Cuando Milei grita "¡Viva la libertad, carajo!", escucho "¡Viva mi libertad!". La libertad nunca ha necesitado ir acompañada de ninguna palabra malsonante, excepto cuando en realidad se dice "¡Viva mi libertad!", y la vuestra me importa un carajo.
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Julián Lobete Pastor es socio de infoLibre.