'Moción de censura' contra la oposición en la Asamblea de Madrid

En estos momentos en los que la vuelta al colecole se está convirtiendo en la zozobra de la educación; que la sanidad pública tiene a sus escasos sanitarios públicos agotados, desmoralizados, abandonados, enfermos, y planeado un hospital nuevo, pero sin saber de ampliación de plantilla; en los que el virus cambia de línea en línea en los supersaturados medios de transporte comunes; en los que se observa cómo estos asuntos son afrontados, enfrentados y controlados en otras zonas de la Península, en algunos casos con más contundencia y éxito, en otros cómo se han aplicado medidas drásticas a tiempo y controlado la situación, y en otros donde directamente la situación está bajo control y despuntando económicamente."

En estos momentos en los que es necesario liderazgo político y capacidad en cualquiera de los responsables de estos colectivos mencionados; y viendo qué tenemos al frente de cada uno, cómo se comporta, no ya sólo qué dice sino qué (no) hace; finalizando, el que todos estos altos cargos y sus cuadros directivos deban ser como mínimo exigido de dimitir, cuando directamente deberían ser vetados en cualquier edificio público y desposeído de cualquier función pública, es algo natural y exigible, y aquí lo estamos haciendo constantemente.

El problema es que nosotros, los lectores aquí, no tenemos ninguna capacidad de exigir prácticamente nada y aquellos dimitibles nos miran como vaca que mira al tren. Quien realmente debería plantear la dimisión, la remoción, la censura, la expulsión de estos cargos, debería ser la oposición en la Asamblea de Madrid. Exigirlo, día sí día también. Desde dentro de la propia Asamblea, hasta en todas las calles y arterias principales de todas las poblaciones de la Comunidad de Madrid.

Y en lugar de hacer lo que se les exige por el cargo que ostentan, ¿qué es lo que están haciendo? 

He visto un artículo de uno de ellos argumentando que para qué van a presentar una moción, pues presentarla para perder es como ir por ir. Hemos visto que algún programa de televisión ha sacado un cartel con la cara del líder del principal partido de la oposición en la Comunidad de Madrid al estilo de Se busca. Sabemos de la cabeza de uno de los partidos que ha sido ascendida a portavoz nacional y secretaria de la formación, a ver si alguien sabe de ella durante algunos minutos, pobrecilla. Y tenemos a la tercera formación prácticamente descabezada porque su principal cabeza visible decidió que iba a ser más útil en el Congreso de los Diputados al frente de todo un movimiento (consistente en él y otra persona en mitad del grupo mixto) que lo iba a cambiar todo gracias a su voto positivo a lo que saliese. De todos estos mimbres sale ocasionalmente algún que otro cesto para una casa de muñecas de supermercado, en forma de discurso bien hilado y con base pero reenviado en canales de chat. En resumen, la inanidad como enseña. 

He visto más capacidad de crítica y actuación en determinados periodistas*, en colectivos de sanitarios públicos o en grupos de profesores. Hay artículos de aquellos que desde luego hacen más daño que lo conocido estos meses en la Asamblea; de los segundos, actuaciones conocidas y concretas además de promesas de huelga o cumplimiento estricto de horarios que tienen que cumplir porque les apoyaremos para ello, se les ha tratado como héroes por cumplir su trabajo pero no deben paliar las carencias que otros les provocan; por último, los terceros llevan viviendo con angustia desde marzo su carencia de medios, de ánimo, las penurias de sus pobres alumnos, y llevan viendo desde entonces cómo son vilmente ignorados por sus responsables durante meses a pesar de airear sus frustraciones y limitaciones, siendo pagados con una caótica prueba masiva e improvisada a última hora en busca de profesores infectados, a pocos días u horas de empezar a impartir clase. Este colectivo dice que va a la huelga y a ella debe ir, se les exige que lo hagan por responsabilidad.

Es por estos motivos, además de los que ustedes lectores expongan, que es necesario, para despojar a aquéllos primeros (ir)responsables, que la oposición en la Asamblea de Madrid se vaya y sea sustituida por personas con más talento, lo cual es fácil. Por tanto, ante su por dejación de funciones, solicito se presente una moción de Censura contra la oposición en la Asamblea de Madrid, con el objeto de que sea sustituida. 

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Mientras esté en trámites iniciales dicha moción, y si no hay nadie que se considere más capaz para sustituirlos a todos, empezaré ofreciéndome a mí mismo, este humilde socio de infoLibre, como ponente y candidato a líder de la oposición en la Asamblea.

* He mencionado periodistas; en concreto hay uno que debería decir algo sobre un hermano suyo, supongo. Que alguien explique qué dice o hace dicho periodista ante lo que sucede con esta actual oposición.

Alex Hernández es socio de infoLibre