El arte cabe en una caja

Un colectivo artístico, dirán, es un ente que piensa y se mueve con un mismo discurso y a un mismo ritmo. Nada más lejos de la realidad. Un colectivo es un grupo de personas individuales, cada una con sus ideas, sus perspectivas y sus ambiciones. Eso es precisamente lo que refleja la muestra Retando a la suerte, en la Tabacalera de Madrid (hasta el 7 de septiembre), un proyecto de Nophoto comisariado por Tania Pardo.

Cuando recibió el encargo, allá por 2012, Pardo (Madrid, 1976) enseguida se hizo cargo del reto: ¿cómo preparar una exposición que tuviera un trasfondo común en la que participaran nada menos que doce almas fotógrafas? “Entonces pensé en las virtudes de un colectivo”, relata ella, “y se me ocurrió la idea de una cadena curatorial para aportar diferentes miradas de una manera individual”.

'Wuhan', 2010, de Jorquera.

Lo que hizo fue tirar de agenda y llamar a otros doce comisarios. Embarcados en el proyecto, cada uno propuso un concepto. Por ejemplo, Juntos. En torno a esa idea, los diferentes miembros de Nophoto presentaron una imagen, bien antigua o bien elaborada para la ocasión. El resultado es una exposición dividida en diferentes tramos temáticos, trece en total, en la que las diversas sensibilidades de los artistas se presentan agrupadas.

Ilustramos. Juntos es la propuesta de la propia Pardo. Ella ha escrito un texto, que se presenta impreso en una cartela, y junto a esta se despliegan las doce fotos de cada uno de los sujetos que componen el colectivo. A uno, la palabra le remite a una fotografía de un grupo de personas bailando en círculo en la playa. Las visiones de los otros, no tienen absolutamente nada que ver. 

Y así con todas las temáticas propuestas: Solos; Lo invisible; Crisis; Errores; Madrid; Pérdida; Placer; Félix (González Torres, el artista puertorriqueño); Desenfoque; Mussorgsky (compositor ruso del siglo XIX); Lo mejor; y ¿Documentos de ficciones? El resultado, como reza el subtítulo de la exposición se traduce en “trece comisarios, trece exposiciones y un colectivo”.

De ahí -además- viene el título, Retando a la suerte. Primero, porque se han juntado 12 + 1 comisarios, pero también por haber emprendido el proyecto -que, como explica Pardo, se ha ido fraguando en el tiempo con no pocas dificultades y una ayuda del ministerio de Cultura- en el año 2012, ese que los mayas habían predicho sería el último de nuestras vidas.

'17:15h. 17 de noviembre de 1989. Glorieta Carlos V, Madrid', Eduardo Nave.

Inspirada por Marcel Duchamp, la comisaria no había previsto preparar una exposición al uso. Lo primero que pensó fue crear museos portátiles a la manera de los que ideó el artista francés de principios del siglo XX: cajas en las que meter las obras en tamaño reducido para poder transportarlas siempre consigo, y que pudieran ser adquiridas por coleccionistas.

Esas maletas artísticas finalmente se crearon, y también se pueden ver en la Tabacalera. Cada una es de un color, que los comisarios han escogido según la sensación que les provocara el concepto que habían propuesto a los artistas. Así, la caja para guardar las fotografías sobre la idea Crisis es negraCrisis . Y la de Placer, por ejemplo, violeta. 

Aunque relativamente complicada de explicar, la exposición es en cambio muy fácil de visitar. Como dice Pardo, es "disfrutona". Las capas más teóricas llevan a pensar en la autorreferencialidad del arte y en la relación entre arte y espectador, que genera mensajes de ida y vuelta. Pero para llegar a ese estadio teórico, primero hay que ver de primera mano la muestra.