Aspiraciones

Sandra Bianchi

Aspiraciones

Cuando sea grande seré actriz, decía después de dar una pitada con fruición. Cuando sea grande seré una mujer decidida como mi tía Sonia. Cuando sea grande viviré sola y viajaré por el mundo. 

Después de cada deseo, la pequeña fumadora mordisqueaba el palito de chocolate que sostenía con elegancia entre sus dedos y exhalaba una voluta imaginaria que la ilusionaba tanto como su futuro, tan prometedor. 

Añoranza

Ella ocupa el tiempo de las noches serenas mirando la luna en la ventana. Su madre le dijo que estaría siempre ahí, observándola para que no se corte ese lazo invisible que las une más allá de la muerte. Por más que procura, no encuentra la señal materna en los misterios lunares. No desespera, aspira el aroma de una rosa nocturna. Allí se reúnen, en el perfume de la infancia. 

Circular

En las plazas las mujeres siempre están atentas a sus niños. Son las madres, tías, abuelas o hermanas que los siguen con la mirada cuando van en bicicleta, mientras juntan hojas al pie de un árbol, o si se distraen a jugar con un perro.

Algunas les compran helados, manzanas con caramelo y pochoclos, otras, los boletos de la calesita porque las plazas tienen sus usos y costumbres, sus rituales de permanencia.   

A veces a esas mujeres se le pierde la vista en las hamacas, el tobogán, el sube y baja. Sus hijos e hijas se han confundido entre los juegos. De lejos, todos tienen los mismos rulos, o el mismo jean con remera de colores. Se mezclan, se hacen uno. Los que se caen en el pozo del arenero dejan una estela de granitos de aire y risa apagada.

Las madres, tías, abuelas o hermanas sostienen una mirada extraviada cuando la tarde pasa y sus niños no aparecen. Caminan la plaza mientras enjugan su desesperación más temblorosa con un pañuelo blanco, ese que siempre llevan por si acaso.

Comer (en) cuentos: instrucciones de lectura

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Todavía siguen dando vueltas y más vueltas mientras buscan a su niño perdido y se preguntan cómo se mide el tiempo de la ausencia.

 

* Sandra Bianchi (Buenos Aires, Argentina). Es profesora en Letras, escritora, editora y gestora cultural. Se ha dedicado al estudio del microrrelato y a organizar actividades diversas sobre el género. Es autora, o coautora de las antologías 'La pluma y el bisturí' (2008), 'Arden Andes. Microficciones argentinochilenas' (2010), 'Cartón lleno I y II' (2012) y la versión argentina de '¡Basta! Cien mujeres contra la violencia de género' (2013) y '¡Basta! Cien hombres contra la violencia de género' (2016), 'Mínimas máximas' (2021), 'Historias a uno y otro lado' (2021). Sus microrrelatos están publicados en antologías nacionales y extranjeras. También ha publicado el libro 'Haiku de ida y vuelta' (2020). En la actualidad es la jefa de edición en Ediciones Santillana Argentina, coordina un espacio de microficción para docentes, un Club de lectura de microrrelato en la Biblioteca del Congreso de Argentina y conduce Universos mínimos, un programa dedicado a este género en Radio Bukowski

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