Conflicto palestino-israelí
Israel ordena a la Flotilla de la Libertad que dé media vuelta antes de atravesar el bloqueo de Gaza
La Flotilla de la Libertad, el contingente humanitario que se dirige a la costa de Gaza con tres activistas españoles entre sus 18 integrantes, ha informado este domingo de que las fuerzas israelíes que custodian la zona marítima ya se han puesto en contacto por radio con sus barcos para que retrocedan antes de llegar al límite impuesto por el bloqueo que mantiene Israel sobre el enclave palestino.
El capitán del buque insignia de la flotilla, el pesquero Al Awda, informó "hace una hora del primer contacto de más fuerzas de ocupación israelíes", según ha hecho saber la ONG Rumbo a Gaza en su cuenta de Twitter. Esta comunicación ha tenido lugar cuando el barco se encontraba a 60 millas náuticas de la costa de Gaza. "Es duro escuchar lo que dicen pero argumentan que estamos incumpliendo la legislación internacional", ha indicado el capitán del Al Awda, Herman Rekste.
El Ejército de Israel ha confirmado que sus fuerzas han interceptado la Flotilla de la Libertad, un contingente humanitario con ayuda para la Franja de Gaza, y formado por tres embarcaciones con al menos 36 activistas a bordo, entre ellos tres españoles, cerca de la costa del enclave palestino.
La situación, según los militares israelíes, se ha resuelto sin incidentes y los tres barcos están siendo remolcados a territorio israelí.
La flotilla se dirige a Gaza con unos 10.000 euros en ayuda humanitaria para la población de la Franja y un mensaje a las autoridades israelíes para que pongan fin al bloqueo por tierra y mar que pesa sobre la región, bajo el control del movimiento Hamás, enemigo declarado de Israel.
Según explica la portavoz de Rumbo a Gaza, Sandra Barrilaro, a Europa Press, es una misión con un importante componente político y simbólico, a sabiendas de que probablemente la ayuda que transportan acabará en manos de las fuerzas israelíes que asaltarán la flotilla antes de la llegada a la línea de control, y nunca llegarán a los palestinos.
Todos ellos esperan que la Flotilla sea asaltada por las fuerzas israelíes, y pesa el recuerdo del asalto de comandos hebreos contra la Flotilla de la Libertad del año 2010 encabezada por el barco Mavi Marmara, que se saldó con una decena de activistas muertos.
Por ello, Rumbo a Gaza ha instruido a los activistas con un protocolo para evitar cualquier tipo de incidente violento a bordo del barco. "Reciben una formación para organizar una resistencia no violenta", confirma la portavoz, antes de describir el protocolo de actuación. Para protestar contra el inminente asalto israelí, la ONG ha convocado a las 19,00 horas una concentración ante la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores en Madrid.
Corte de comunicaciones
La ONG Rumbo a Gaza ha confirmado que lanchas de la Armada israelí se han aproximado a la llamada Flotilla de la Libertad a 49 millas náuticas de la costa de la Franja de Gaza, y que las comunicaciones con los tres barcos que la componen y con los activistas que van a bordo, entre ellos tres españoles, se han visto cortadas "como paso previo al abordaje".
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Minutos antes, y desde la ONG Comité Nacional para la Ruptura del Bloqueo sobre Gaza se había informado, recoge la agencia palestina Maan, que el abordaje ya ha comenzado y que los barcos han recibido orden de atracar en el puerto israelí de Ashdod, en el sur del país, donde se procederá a la detención de los activistas y la incautación de la ayuda humanitaria que transportan.
"Poco después, se han aproximado varias lanchas Zodiac" al pesquero Al Awda, buque insignia de la flota, a bordo del cual se encuentran las españolas Lucía Mazarrasa y Emilia Nacher, junto a la israelí residente en España Zohar Chamberlain. El tercer español, Francisco Canales, se encuentra a bordo del velero Freedom, parte de la flotilla.
Nada más avistar a las lanchas, las comunicaciones con el pesquero se han cortado, "en lo que se trata de un signo de un abordaje, según nuestras experiencias previas", de acuerdo con la portavoz, que ha recordado que se trata de "un asalto en aguas internacionales" sobre las que Israel no tiene jurisdicción.
