La semana pasada visité las casas de César Manrique y José Saramago en Lanzarote. Con Pilar del Río, recordé a José en su biblioteca, ese lugar en el que los lectores sentimos de cerca las huellas de una vida. Como estábamos a 9 de febrero, Pilar me llamó la atención sobre una entrada escrita en los Cuadernos de Lanzarote el 9 de febrero de 1995.
José Saramago recoge una historia que le había interpelado. A una calle de Badajoz le habían puesto el nombre de un piloto de la aviación republicana. Durante la Guerra Civil, había recibido la orden de bombardear la ciudad. Despegó, sobrevoló la ciudad y miró hacia abajo. ¿Y qué vio cuando miró hacia abajo?, nos pregunta a sus lectores el escritor portugués. Vio gente, vio personas, por lo que desvió el avión y arrojó las bombas sobre el campo.
La historia no acabó ahí. Cuando volvió a la base, comunicó que le parecía haber matado a una vaca. El capitán le preguntó por Badajoz y el piloto explicó que no había arrojado las bombas sobre la ciudad porque allí había personas. No protestó el capitán, y el aviador no fue conducido a un consejo de guerra. Cosas que pasaron, que pueden pasar.
La historia me recordó de manera inevitable un poema de Pedro Salinas titulado Cero. Lo escribió durante la Segunda Guerra Mundial, cuando la aviación aliada atacaba las ciudades italianas. Destrucción sobre las personas, el patrimonio histórico, el presente y el futuro de la vida. Salinas denuncia que es muy fácil apretar el botón cuando se está en las alturas, sin ver a las personas que van a morir, el edificio histórico, las ruinas, los siglos que saltarán por los aires. El poema iba a adquirir todo su sentido poco después cuando los aviones norteamericanos arrojaron sobre Japón las bombas atómicas, el gran invento, la gran hazaña de la tecnología humana, sólo comparable a los campos de exterminio, la producción industrial de cadáveres.
Para un poeta de la Generación del 27 la palabra altura estaba cargada de significado. Durante unos años se creyó por magisterio de Juan Ramón Jiménez y Ortega y Gasset que la poesía era el esfuerzo conceptual de superar la vida anecdótica para darle un significado universal a los acontecimientos. La poesía era el álgebra superior de la metáfora, un mundo de hermosura abstracta, como la geometría del cubismo. La belleza se complicó cuando el arte miró hacia abajo y vio a la gente.
Las preocupaciones de Saramago y Salinas son una buena referencia en medio de un mundo que está sustituyendo la historia de carne y hueso por una realidad virtual que convierte en abstracción la experiencia de la vida. Recordar que perdemos el sentido de la responsabilidad cuando dejamos de mirar hacia abajo, cuando dejamos de ver a la gente, es importante a la hora de pensar, organizar nuestra vida, nuestro trabajo, nuestras relaciones con los demás y nuestras opiniones políticas. Las abstracciones se llenan con facilidad de trampas y mentiras.
Pienso, por ejemplo, en los debates sobre Venezuela y en la dinámica de la obligación de elegir entre Guaidó y Maduro. Qué difícil entrar en las discusiones si se mira hacia abajo. Hace mucho tiempo que el comportamiento del Gobierno de Maduro dejó de ser respetable para una conciencia social y democrática. ¿Pero la alternativa es Guaidó? La gente de Venezuela está pagando todas las sanciones internacionales que promueve Donald Trump y todas las corrupciones del chavismo. Las nubes de esta situación hacen que llueva sobre mojado, una tormenta sobre un país que no se merece ni la falta de garantías democráticas, ni el imperialismo, ni la soberbia de una economía enfocada a mantener los privilegios de la desigualdad. Tampoco la manipulación, ni la indiferencia.
Un asunto de aviones, de mirar hacia abajo y ver a la gente. Mejor intentar ayudar que ir a sacar partido.
“LA POESÍA DEBE TENER COMO FIN LA VERDAD PRACTICA”
***
Si les digo que el sol en el bosque
Es como un vientre que se da en un lecho
Ustedes me creen aprueban todos mis deseos.
Si les digo que el cristal de un día lluvioso
Suena siempre en la pereza del amor
Ustedes me creen prolongan el tiempo de amar.
Si les digo que en las ramas de mi cama
Hace nido un pájaro que nunca dice si
Ustedes me creen comparten mi inquietud.
Si les digo que en el golfo de una fuente
Gira su llave un río entreabriendo los prados
Ustedes me creen más aun me comprenden.
Pero si canto sin dobleces a mi calle
Y a mi país como calle sin fin
Ustedes no me creen se van hacia el desierto.
Porque marchan sin meta sin saber que los hombres
Necesitan unirse y confiar y luchar
Para explicar el mundo y transformarlo.
***
PAUL ÉLUARD. 1948
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Se me ha escapado lo de 'la poesía es el esfuerzo conceptual de superar la vida anecdótica para darle significado universal a los acontecimientos' para luego concluir que la 'belleza del álgebra superior de la metáfora, del mundo de hermosura abstracta, como la geometría del cubismo se complica cuando mira hacia abajo y ve la gente'. Supongo que la vida anecdótica pertenece a la gente de forma que si la poesía se genera (o descubre, pero esto es otro tema) a partir de dicha vida anecdótica ¿cómo es que su belleza se complica si dirige la mirada sobre la gente? ¿Quieres decir que 'superar la vida anecdótica' es perder la conexión con dicha vida de la gente? Si así es, nada que ver con el álgebra (superior o no) pues en matemática la relación entre representante y representado es inviolable, siempre existente y jamás inconexa. Naturalmente, como se sabe, el álgebra 'no debe rendir cuentas' de sus cálculos (cómputos, investigaciones) o conclusiones con otra cosa que los entes abstractos sobre los que se basa. Me pregunto ¿qué tal sonaría decir que la identidad de Euler es 'poesía andante'? Tal vez, al final, sea bueno que yo no exagere tanto. Saludos.
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tierry: la pregunta tuya me llevó a indagar. No hallé la respuesta en la entrada que publica la Fundação Saramago, que refiere Luis en : 'Cuadernos de Lanzarote I (1993-1995)' la indagación del nombre del aviador y la calle, me llevó "de paseo" hasta un blog del que desconocía su existencia. Lo comparto para quién, como yo, le resulte un grato hallazgo:
http://www.buscameenelciclodelavida.com/
Luis: Sé de tu sentimiento con Ángel González, por lo que te leí. En su recuerdo, también, lo encontré en este espacio-blog, en una entrada.
«Nada es lo mismo»
La lágrima fue dicha.
Olvidemos
el llanto
y empecemos de nuevo,
con paciencia,
observando a las cosas
hasta hallar la menuda diferencia
que las separa
de su entidad de ayer
y que define
el transcurso del tiempo y su eficacia.
¿A qué llorar por el caído
fruto,
por el fracaso
de ese deseo hondo,
compacto como un grano de simiente?
No es bueno repetir lo que está dicho.
Después de haber hablado,
de haber vertido lágrimas,
silencio y sonreíd:
nada es lo mismo.
Habrá palabras nuevas para la nueva historia
y es preciso encontrarlas antes de que sea tarde.
Ángel González
De: «Grado elemental» – I. «El orden de las cosas» – 1962
Recogido en su poesía completa 1956-2001: “Palabra sobre palabra”
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Querido maestro: el artículo que usted escribe es brillante en cuanto al piloto republicano que "miró hacia abajo", pues nos transmite usted una opinión de conciencia en la que lleva usted toda la razón. Pero en lo que se refiere a Venezuela, creo que escribe usted "a medias tintas" sin poner el dedo en la llaga de lo que ocurre (no sólo en Venezuela) en todos los paises de América latina que no obedezcan ciegamente al Imperio que los domina con golpes de estados constante. Aunque lo intentaron en Cuba, con la que no pudieron de momento, lo intentaron también con Chile (donde pusieron a un dictador sangrientamente), con Granada (donde metieron a su ejército y ahí siguen), con Brasil (donde han apoyado a un dictador que posiblemente haga correr la sangre en ese país), con Bolivia (donde han defenestrado a un presidente votado por el pueblo y han puesto a una "prima hermana de Guaidó". Y un largo etcétera, maestro. Yo sé que a usted no hay que explicarle nada de esto, porque lo conoce mejor que yo. Pero le ruego que no entre en las desclasificaciones (a presidentes que han sido elegidos limpiamente), impuestas por los EE.UU. y apoyadas por peleles como Guaidó y los paises que los apoyan siguiendo las órdenes del Imperio.
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Corrió y corrió, sin rumbo, intentando acallar los zumbidos enloquecedores que la llevaron a esa casa grande, llena de niños de vidas truncadas. Durante 6 meses estuvo mirando el rostro de cada persona hasta encontrar el de su madre que no había dejado de buscarla después del bombardeo de Guernica. Entonces, le volvió la palabra. Es lo que aflora en mi memoria del relato de una entrañable amiga de mis padres.
Los responsables de esta salvajada programada, esos si que no dudaron en soltar las bombas.
Su texto es maravilloso Señor Montero, me conmueve, lo leo y lo leo. Es un caramelo agridulce. José Saramago y César Manrique ponen el buen sabor. De los otros nombres, presentes, me amargan el día a día. ¿A ver que tal se comportarían entre ellos si, me refiero a estos tres últimos, estuvieran un largo tiempo en una caverna?
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La vista desde las alturas puede ser espectacular, lo mismo se haga en una ciudad que en el campo o en la montaña. El otro día, en los Pirineos, con un día casi veraniego, día excepcional (que no sé si bueno, pues en este tiempo debería estar nevando y helando), la vista de los otros montes con las cimas nevadas, la contemplación de los campos, fuentes y arroyos, era un regalo para la vista, pero…
Bajas al valle, llegas a la ciudad y esa belleza desaparece y se entra en contacto con la vida real, con los problemas de nuestros semejantes que viven en el campo de la agricultura y ganadería, o con los problemas de tanta gente a la que no se le facilita un sistema de vida por el que puedan planificar su futuro. Viviendo a la misma altura de los demás se puede conocer mejor cuál es la realidad en la que estamos sumergidos.
Estoy con el poeta Celaya: «Maldigo la poesía concebida como un lujo / cultural por los neutrales / que, lavándose las manos, se desentienden y evaden. / Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.» Osasuna.
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Ocultar 2 Respuestas'Múltiple Órfico' es un poema que consta de 180 versos...
...
"Callar tan sólo es curvar una sonrisa
Si aparece que empieza lo que nunca diremos.
Cantar nunca fué hablar, ¡oh cero abierto!
¡Ay quien si lo supiera no diría!
El feroz resplandor de las luces nocturnas
Arrastrad al poeta. Ya sabeis. Confabula.
...
Descubrimos que es magia la distancia
y todo vuelve a ser, viejo, un comienzo.
Mirar hacia delante da mas miedo
Pensar es tan inútil, ¡vida mía!
La corriente me arrastra. Son las furias
Denuncias al poeta. No dejeis que prorrumpa.
...
Derribo el laberinto sin hallar la salida
Olvidamos que no somos números enteros
Nos descubrimos uno porque el cielo es un cero
¡tan joven, pese a todo, es la sabiduría!
¿A qué tanto tumulto? Soy vuestra luz oculta
¡Desmembrad al poeta! ¡Romped lo que articula!
...
Se escapa sin pensar por una espira
Cuando ya no se juzga y es tan bello el 'suspenso'
¡Oh el momento en que vivo! ¡Qué destructivo incendio!
¡Ay tú que dudas, débil, no afirmas, sólo gritas!
Vosotras, ondulantes, sois sólo una luz turbia
Reiros del poeta y adornadlo con trufas.
...
Entre el oro y la rosa cierta luz indecisa
Cuando es de noche y rompe la mar en nuestros versos
Rapidez intangible, beso sin labios, viento
La mañana sin ojos me da los buenos días.
¡Levadme, si, llevadme! Sois lo que en mi murmura
Destrozad al poeta, ¡y al viento sus basuras!"
(Manuscrito donado por el escritor Félix Maraña)
Llego ahora y no quería dejar de reconocer tu comentario, y responder el correo.
Maravillosas tus fotos. Gracias.
El artículo de LGM nos posiciona. Difiriendo de algún otro comentario, convencida. Los ciudadanos por sufragio eligen sus gobernantes, en democracia. Me he molestado en conseguir la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela... Oiga, ¡ni una pega!
Pero, ciertamente el GHP con su homómino vs.2.0, el de las coordenadas, deseo conocer/ ver a ambos y alguno mas, juzgados por la Corte Penal Internacional. Recochineo, premeditación y alevosia...y, además...hay quien considera que pueden quitar y poner gobernantes, en Estados independientes y democráticos...¿ANTE EL TERROR QUE SIEMBRAN EN LA POBLACIÓN?
¡No, de rodillas! R. B. de Venezuela.
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Ocultar 1 Respuestaswww.infolibre.es ISSN 2445-1592
En la posición de los expresidentes con Venezuela, bien se podría relacionar a uno de ellos con el piloto que mira para abajo, y por otro lado, a los que se asemejan con el piloto que apretó el botón en Japón.
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