El PSOE rechaza "las amenazas" de Puigdemont y califica de "tramposa" su oferta de diálogo

El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, mostró este jueves el apoyo de los socialistas al Gobierno en la aplicación del artículo 155 de la Constitución tras la segunda respuesta del president de la Generalitat, Carles Puigdemont, al requerimiento enviado por el Ejecutivo para paralizar el proceso independentista en Cataluña. Para Ábalos, la advertencia de que el Parlament podrá votar la secesión en los próximos días es una "inadmisible amenaza", y Puigdemont hace una oferta de diálogo "tramposa" desde el momento en el que únicamente "se aviene a intentar negociar las condiciones" de la independencia, por lo que el PSOE se muestra partidario del 155 con la condición de que la intervenición del Estado en Cataluña sea "lo más breve posible".

Ábalos compareció al filo de las 12 de la mañana, apenas unas horas después de que Puigdemont enviase su respuesta a la Moncloa avisando al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que "si persiste en impedir el diálogo" el Parlament "podrá proceder, si lo estima oportuno, a votar la declaración formal de la independencia que no votó el día 10 de octubre". "Entendemos que la respuesta no ha contestado una vez más a la pregunta que se le hizo sobre lo que ocurrió en el Parlament", sostuvo Ábalos, que aseguró que la "responsabilidad" de las instituciones, ahora mismo, es "recuperar el autogobierno" en Cataluña.

Y, para ello, "al Gobierno le corresponde tomar la iniciativa", apuntó el dirigente, que afirmó que el Ejecutivo contará con el apoyo del PSOE, que ahora mismo negocia con la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría las medidas concretas a aplicar. Estas medidas, aseveró Ábalos, serán las que condicionarán si el respaldo de los socialistas al 155 si "es absoluto, relativo o en qué grado". Para el PSOE, las medidas adoptar deben ir encaminadas a "restaurar la democracia, preservar el autogobierno catalán y garantizar los servicios públicos".

El secretario de Organización del PSOE criticó que Puigdemont insista en pedir diálogo cuando los independentistas únicamente están dispuestos a "hablar sobre la desconexión respecto de España, apelando a los resultados de un referéndum sin garantías ni controles basado en una ley inconstitucional, en el que la independencia obtuvo un 38% de votos del censo". "Ese marco de diálogo no lo podemos aceptar", y tampoco las afirmaciones de que en España "existe represión política", sostuvo Ábalos, que insistió en que "España es una democracia consolidada donde funcionan el Estado de derecho y la separación de poderes". Y recordó que, en Cataluña, "el Parlament se encuentra ahora mismo suspendido en la práctica" por decisión de la mayoría independentista.

Para el dirigente socialista, la mejor prueba de que los secesionistas no quieren dialogar sin condiciones es su negativa a participar en la comisión impulsada por el PSOE para llevar una reforma territorial a la Constitución. "En el Congreso se ha manifestado estos días representantes del independentismo diciendo que lo único que quieren dialogar es la marcha de Cataluña de España", ya que "no les interesa el Estado autonómico ni cualquier modelo que permita mantener integridad territorial", ni tampoco "una reforma constitucional" que cambie "el pacto político que regula la convivencia entre los españoles". "No asumimos la bilateralidad entre el Estado y un pretendiente a miniestado", zanjó Ábalos.