Podemos
Errejón, a la espera de que Iglesias acepte sus condiciones para desembarcar en Madrid
El secretario de Análisis Estratégico de Podemos, Íñigo Errejón, prepara su desembarco en la Comunidad de Madrid para ser el candidato del partido morado para presidir la región en 2019. Pero, para dar definitivamente el paso y llevar a término el pacto que suscribió tras Vistalegre II con el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, el ex número dos ha puesto tres condiciones: tener autonomía a la hora de nombrar a su equipo y defender su discurso, liderar una lista en la que sus afines sean mayoría y buscar un perfil similar al de Manuela Carmena para que lidere la candidatura morada a la Alcaldía de Madrid.
La derrota que sufrió Errejón en el congreso de Vistalegre II y la consiguiente pérdida de influencia en la estructura estatal de Podemos obligó al que fue número dos del partido a reposicionarse. Por ello, Errejón alcanzó en la primera reunión de la nueva dirección un acuerdo con Iglesias: ser el candidato de Podemos a la Presidencia de la Comunidad de Madrid. Para alcanzar ese puesto necesitaría el refrendo de la militancia en primarias, pero el apoyo de Iglesias y el de la dirección madrileña –capitaneada por el pablista Ramón Espinar en alianza con los anticapitalistas– prácticamente le garantizaría la victoria, aunque lo cierto es que algunos dirigentes próximos a Espinar y al sector anticapitalista en la Comunidad de Madrid no ven con buenos ojos la idea por las diferencias políticas y de estrategia que mantienen con Errejón.
Desde que Iglesias y Errejón alcanzaron aquel acuerdo han pasado dos meses, y aunque no ha habido más pronunciamientos públicos al respecto, en privado sí que ha habido movimientos. El actual secretario de Análisis Estratégico se ha mantenido desde Vistalegre II alejado del foco mediático y sus apariciones en los medios han sido contadas –de hecho, la única colaboración que ha mantenido de manera regular, hasta el momento, es en la tertulia política de Hora 25, en la Cadena Ser– como manera de hacer ver que acepta los resultados y, a su vez, para evitar quedar posicionado como el líder de la corriente crítica. Pero, a la vez que ha dejado de mostrar su opinión en público sobre la estrategia de su partido, Errejón ha ido preparando el terreno para su desembarco en la Comunidad de Madrid.
Autonomía en discurso y estrategia
Según fuentes del sector errejonista consultadas por infoLibre, son tres las condiciones que el ex número dos ha planteado a Iglesias para aceptar de manera definitiva la postulación, y las tres tienen que ver con su capacidad de decisión a la hora de elaborar la estrategia política de su candidatura. En primer lugar, Errejón pide tener las manos libres para nombrar a su equipo y seguir su propia estrategia discursiva, en ocasiones enfrentada a la de la dirección estatal y la regional. Además, plantea la necesidad de consensuar una lista con pablistas y anticapitalistaspablistas que, no obstante, sea "coherente" con quien la lidera, es decir, que tenga mayoría errejonista.
Por último, los dirigentes próximos a Errejón consultados afirman que también debería existir una "coherencia" entre la candidatura a la Comunidad de Madrid y la que Podemos presente, en alianza con otras fuerzas, para el ayuntamiento de la capital. Toda vez que la alcaldesa Manuela Carmena asegura que no repetirá como candidata de Ahora Madrid, la alianza –que incluye a Podemos, Ganemos y dirigentes de IU– tendrá que buscar un nuevo número uno para su candidatura, y el errejonismo defiende "un perfil similar" al de la exjueza:errejonismo un liderazgo fuerte, carismático y procedente de la sociedad civil.
Iglesias y Errejón reafirman su "objetivo estratégico" común: ganar en la Comunidad de Madrid
Ver más
No obstante, y aunque Iglesias aceptara sus tres condiciones, Errejón se encontraría con varias reticencias en su camino para liderar la candidatura de Podemos a la Comunidad de Madrid. La primera partiría de su propio partido, ya que el errejonismo está en clara minoría frente a la alianza de pablistas y anticapitalistas con la que Ramón Espinar consiguió ganar el congreso que celebró Podemos a finales de 2016. El pacto alcanzado entre Errejón e Iglesias levantó ampollas entre algunos de los dirigentes madrileños, porque el nombramiento del ex número dos como candidato para 2019 incrementaría notablemente su capacidad de influencia para llevar a la práctica unas tesis que chocan con las de Espinar y su equipo. No obstante, pese a estas desavenencias, el secretario general autonómico anunció públicamente que apoyaría una candidatura de Errejón, a quien consideró un aspirante "magnífico" a la Presidencia del Gobierno regional.
El segundo impedimento que tendría que superar el actual secretario de Análisis Estratégico tiene que ver con sus aliados, IU y Equo. Errejón siempre se ha mostrado ambiguo con respecto a la conveniencia de reeditar la alianza Unidos Podemos, aunque tanto Iglesias como Espinar tienen claro que la alianza con IU debe repetirse e incluso estrecharse y esa tesis fue la que se impuso con claridad en Vistalegre II. Pero, además, la federación de izquierdas ya anunció a principios de marzo que organizará sus propias primarias para escoger un candidato antes de ponerse de acuerdo en una lista conjunta con Podemos y Equo, si finalmente la coalición se conformase.
Pese a que las condiciones ya están planteadas y los jugadores ya han puesto sus cartas sobre la mesa, aún no existe un calendario para el eventual desembarco de Errejón en la Comunidad de Madrid. La cuestión de los tiempos es clave, ya que el hecho de que Errejón quedase confirmado oficiosamente como candidato en los próximos meses le daría mucho mayor margen de maniobra para promover sus tesis aun frente a las de la dirección de Espinar que si su candidatura se hiciese efectiva a pocos meses de los comicios, que en principio tendrán lugar en 2019.