La portada de mañana
Ver
Cinco reflexiones cruciales para la democracia a las que invita la carta de Sánchez (más allá del ruido)

Caso Serrano

Hacienda culpa directamente al juez Serrano de la pérdida "premeditada" de 1,37 millones de una ayuda pública

Francisco Serrano (derecha), junto a Santiago Abascal, en una fotografía durante la etapa como parlamentario del dos veces candidato andaluz de Vox.

La Agencia Tributaria acusa a Francisco Serrano, dos veces candidato de Vox a la presidencia de la Junta de Andalucía, de haber provocado un menoscabo de 1,37 millones de euros de dinero público a través de una empresa, Bio Wood Niebla, que en 2016 recibió una ayuda estatal para construir una fábrica que se quedó en proyecto. Hacienda le reclama directamente casi 850.000 euros a Serrano, que es la cantidad en la que fija su responsabilidad solidaria, figura que la Agencia Tributaria utiliza para trasladar a los administradores la responsabilidad del dinero adeudado por las empresas. Así figura en un expediente de derivación de responsabilidad tributaria contra Serrano, al que ha tenido acceso infoLibre y que está incorporado al sumario del caso de posible fraude de subvenciones actualmente en instrucción.

La Agencia Tributaria, coincidente en sus conclusiones con la UDEF, señala cómo “gran parte” del dinero de la ayuda pública acabó en envíos a las sociedades de Serrano, préstamos a terceros, fondos de inversión, pagos con tarjeta de comidas en restaurante y viajes y “demás liberalidades de socios y administradores”. Serrano ha negado reiteradamente todas las irregularidades. “Es indiscutible el conocimiento cabal” del vaciamiento de la empresa por parte de Serrano, señala la Agencia Tributaria. El expediente es rotundo en sus conclusiones: “Francisco de Asís Serrano Castro es CAUSANTE DIRECTO [la mayúscula es del informe] de la ocultación y transmisión del dinero percibido” por Bio Wood Niebla “procedente del Ministerio de Industria” con “la finalidad de vaciar el patrimonio" de la sociedad y "frustrar cualquier actuación de la Administración tributaria tendente a su cobro”. Se produjo, añade el documento, un “levantamiento del caudal disponible en saldos bancarios de Bio Wood Niebla, que debía haber estado destinado a la finalidad para la que se concedió el préstamo, que no es otra que la construcción de una industria de pellets en Niebla”. Y añade: “La apreciación conjunta de los elementos de hecho que resultan del expediente permite llegar a la razonable conclusión de que la actuación de Francisco Serrano ha sido premeditada”.

En cuanto al investigado, mantiene su línea de declararse al margen de las irregularidades, defender que no se lucró con el proyecto y responsabilizar a sus dos exsocios. Serrano, que aún no ha tenido la oportunidad de declarar como investigado ante el instructor del caso, no responde a las cuestiones de infoLibre, periódico que desveló el caso [ver aquí el dosier completo].

Un caso de posible fraude

Serrano está bajo investigación por un caso de posible fraude de subvenciones. El que fue juez estrella de Vox y uno de sus socios, Enrique Pelegrín, constituyeron la sociedad Bio Wood Niebla en marzo de 2016 para solicitar una ayuda pública al Ministerio de Industria, que finalmente lograron en diciembre de ese año. Había un tercer socio en la sombra, Javier López, también implicado en el impulso del proyecto. Los tres están citados para declarar como investigados ante el juez instructor en mayo. Este periódico ha tratado de recabar la versión de los tres, sin éxito.

La cuantía de la ayuda conseguida por la sociedad de Serrano y Pelegrín ascendió a 2,48 millones. El préstamo público debía servir para la construcción de una fábrica de pellets –combustible a base de madera– en Niebla (Huelva). En la base del procedimiento había una irregularidad: la sociedad logró la ayuda gracias a un documento que contenía una falsedad, ya que se atribuía una maquinaria industrial para realizar el proyecto que en realidad no poseía. Fue ese engaño en una escritura pública, en el que Serrano participó directamente, el que permitió a la empresa conseguir el dinero público, que ni ha sido devuelto ni ha servido para poner en marcha el proyecto comprometido.

A raíz del desvelamiento de los hechos por parte de este periódico en octubre de 2019, Rubén Sánchez, vicepresidente de Facua, presentó una denuncia ante la Policía Nacional, que inició una investigación que ahora instruye el juzgado 16 de Sevilla, con el juez Juan Gutiérrez Casillas al mando. Por el camino, el dos veces candidato de Vox dimitió el verano pasado acorralado por las revelaciones.

Gutiérrez Casillas tiene a estas alturas de la investigación dos grandes frentes para profundizar. El primero es cómo se consiguió el dinero. El segundo, dónde acabó. Hay terreno recorrido ya. El Grupo de Blanqueo de Capitales y Anticorrupción de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional ha ido acumulando datos. En diferentes atestados incorporados al sumario, los agentes han recogido que la sociedad, tras la obtención de los fondos, envió dinero de la ayuda a empresas de Serrano, en concreto un periódico y un bufete de abogados, y realizó distintos préstamos, entre otros fines ajenos al objetivo de la ayuda. Los agentes han puesto también en manos del juez Gutiérrez Casillas la siguiente conclusión: que un millón de euros salido de Bio Wood Niebla tras cobrar la ayuda fue a parar a una segunda sociedad de Serrano, Proyectos e Inversiones Serralba, y de ahí a una tercera, Pellex Energía.

Los agentes han detectado además movimientos sospechosos de dinero que atribuyen a un intento deliberado de evitar su rastreo y su recuperación, según los informes que han ido incorporando a la causa. Además, han pedido al juez instructor que ordene el bloqueo de un "fondo de inversión" abierto en Ibercaja por Bio Wood Niebla en el que llegó a haber más de 1,5 millones de euros, según los investigadores. Creen que allí fue a parar una parte del dinero. Un testigo ha implicado en la apertura de ese fondo a Serrano, la base de cuya defensa es asegurar que fue engañado por sus socios y que no se lucró. Sobre nada de esto responde Serrano, insistentemente requerido por este periódico.

Agencia Tributaria

Si el frente policial presenta nubarrones para Serrano, el de Hacienda no está más despejado. Sobre todo porque la Agencia Tributaria coincide en el grueso de sus conclusiones con la UDEF, según la documentación incorporada al sumario a la que ha tenido acceso infoLibre. La Delegación Especial de Andalucía de la Agencia Tributaria inició en agosto de 2020 un expediente de derivación de responsabilidad tributaria a Serrano por su posible condición de responsable solidario de la deuda de Bio Wood Niebla con la Hacienda pública. Dicha deuda, que tiene su origen en el préstamo recibido de Industria y de la que Serrano no es responsable en su totalidad, supera los tres millones, concretamente 3.010.190,2 euros, ya que incluye un recargo de más de 500.000 euros, lo que eleva la cuantía con respecto al préstamo original entregado por el ministerio.

¿Por qué existe una deuda? Obvio. El dinero pagado por el Ministerio de Industria en diciembre de 2016 era un préstamo que nunca fue devuelto por Bio Wood Niebla. Además, no sirvió para construir la prometida fábrica de pellets, que hoy es una mole abandonada y a medio hacer en medio del campo.

Ahora el expediente abierto a Serrano por Hacienda, 147 páginas incorporadas al sumario del caso, aporta datos de interés sobre las actividades de los socios, especialmente del que fue candidato de Vox. Firmado por el jefe del equipo regional de recaudación, el expediente concluye que “el perjuicio o quebrantamiento” a las arcas públicas en el que participó Serrano, hasta su salida de la empresa el 4 de octubre de 2017, asciende a 1,37 millones. Ese es el “quebranto directamente provocado” por Serrano, según el documento. “Y ello –añade el expediente– sin tener en cuenta el quebranto que implica haber falseado la cifra del capital fundacional”.

No obstante, el cálculo final del dinero “distraído e imputable a la conducta” de Serrano “no reparado posteriormente por actos de terceros” es más bajo, 848.123,61 euros. Esta cantidad se corresponde con lo que la Agencia Tributaria considera “líquido distraído” y es la fijada como “responsabilidad” de Serrano. La Agencia Tributaria tiene en cuenta que Serrano figuró en la empresa no durante todo el plazo concedido por Industria para ejecutar la inversión, sino algo menos del 74%: 642 de los 873 días totales.

Los 1,37 millones apuntados como quebranto imputable a Serrano son resultado de sumar disposiciones de fondos, desembolso y préstamos no devueltos, usos ajenos a la finalidad de la ayuda pública, según la Agencia Tributaria. Los 848.123,61 euros se obtienen de restar a los 2,48 millones pagados por Industria la garantía de reintegro que estaba asegurada (casi 250.000 euros), el embargo de activos financieros (no llega a 3.000 euros) y la cantidad empleada por la empresa en el proyecto, 1,38 millones. 

Una "reprobable distracción"

El dos veces candidato de Vox a la presidencia de la Junta, que hizo carrera política denunciado el abuso de las “paguitas”, recibe un contundente repaso de la Agencia Tributaria. El expediente se detiene en todas las supuestas irregularidades cometidas por los socios de Bio Wood Niebla con la ayuda pública, sobre las que viene informando este periódico desde 2019: falseamiento del capital de la empresa para obtener la ayuda, supuesto ingreso de dinero proveniente del Ministerio de Industria en fondos de inversión, envío de dinero a empresas del propio Serrano, préstamos a terceros, gastos personales ajenos al fin del préstamo... “Se realizaron disposiciones de cantidades directamente por los socios y administradores para fines particulares”, señala el expediente. Ha habido una “reprobable distracción” de los fondos públicos, añade, a través de “sociedades creadas por los fundadores de Bio Wood Niebla”, en referencia a Serrano y Pelegrín.

El informe no se limita a señalar a la empresa. Apunta contra Serrano, al que achaca haber tenido “plena conciencia” del vaciamiento de la sociedad. Hacienda atribuye a Serrano los supuestos necesarios para ser responsable, como la “ocultación o transmisión de bienes y derechos del obligado al pago [en este caso, Bio Wood Niebla] con la finalidad de eludir el embargo”. El informe destaca que, en vez de dedicarlo íntegramente a la fábrica, una promesa industrial que levantó expectativas en Niebla y quedó en nada, “se ha destinado en gran parte a otras finalidades distintas para la que fue concedido, en concreto: préstamos a sociedades vinculadas o a terceros interrelacionados, constitución y ampliación del entramado societario a cargo de Francisco de Asís Serrano y de Enrique Pelegrín, compraventa de fondos de inversión, disposición en efectivo, gastos de VISA en restaurantes, viajes, ocio, y demás liberalidades de socios y administradores”. El documento no detalla todos y cada uno de estos gastos ajenos a los fines de la ayuda. Sí es insistente en que Serrano tenía que saberlo. “Es indiscutible el conocimiento cabal” de los hechos por su parte, “debido a su condición de socio, administrador y autorizado en las cuentas hasta el 04/10/2017”, añade el informe, que recuerda que el juez fue “participante directo” en las operaciones cuestionadas.

La alcaldesa del pueblo afectado por el proyecto investigado por fraude sitúa al juez Serrano en el origen de las gestiones

La alcaldesa del pueblo afectado por el proyecto investigado por fraude sitúa al juez Serrano en el origen de las gestiones

El documento totaliza en 1,38 millones lo correspondiente a las “actividades propias” de Bio Wood Niebla desde su creación. Es la cantidad, dice el informe, “efectivamente pagada”. Es decir, en la mejor hipótesis para la sociedad, eso es lo que ha gastado en el proyecto. El resto, más de un millón, ha sido dedicado a otros fines, según la Agencia Tributaria, que atribuye a Serrano un “conocimiento del perjuicio que se estaba provocando” con su actitud ante la futura exigencia de reintegro. Dicha actitud es calificada de “elusiva”, lo que impide corregir un “levantamiento patrimonial” que ha causado un “perjuicio para los intereses de la Hacienda Pública”.

Se ha combinado una “ausencia evidente de voluntad de aplicar los fondos obtenidos a la finalidad a que estaban destinados”, con haber “vaciado el patrimonio líquido de la compañía con el que podían haber hecho frente, al menos parcialmente, a la obligación de reembolso”, según la Agencia Tributaria. Ello ha contado “con la indudable participación activa, colaboración, consentimiento y al menos ausencia de rechazo” de Serrano, establece el expediente, que considera que “concurren los presupuestos legalmente establecidos para declarar responsable solidario” a Serrano, por su “condición de” causante” de la “ocultación y transmisión del patrimonio líquido” de Bio Wood, “a sabiendas de que ello produciría el incumplimiento de la obligación de reintegro [...] y la imposibilidad por parte de la Administración de hacer posible su cobro”.

Serrano, como viene haciendo desde que este periódico destapó el caso en octubre de 2019, no ofreció respuesta a las preguntas planteadas para este artículo. El investigado, según la información del expediente a la que ha tenido acceso este periódico, alega que su implicación en el proyecto fue más formal que efectiva, que no obtuvo lucro con el proyecto y que no participó en las irregularidades. Una carta firmada por Serrano y localizada por la UDEF prueba la implicación del investigado en la gestión del proyecto bajo sospecha incluso después de conocer irregularidades, lo cual complica esta línea de defensa. El dos veces candidato de Vox culpa a sus socios para defenderse de la acometida de la Agencia Tributaria. Este periódico trató de recabar las versiones de Pelegrín y López, sin éxito.

Más sobre este tema
stats