Santiago ya estudia dónde colocar las estatuas del Mestre Mateo que tienen que devolver los Franco
La alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, ha apuntado que, después de el Tribunal Supremo haya condenado a la familia Franco a devolver al Ayuntamiento las esculturas de Abraham e Isaac, del Mestre Mateo, se estudiará el lugar donde colocarlas pero “la idea clara es que la gente pueda verlas”, según informa EFE.
En declaraciones a los medios de comunicación, la regidora ha explicado que todavía hay muchas decisiones por tomar dado que el fallo se conoció este jueves, por lo que dónde se instalarán las figuras, procedentes del Pórtico de la Gloria de la catedral que ahora se encuentran en el Pazo de Meirás (Sada), será una cuestión a tratar "con calma con personas especialistas e investigadores”.
El Supremo obliga a los Franco a devolver las estatuas del Pórtico de la Gloria al Ayuntamiento de Santiago
Ver más
“Miraremos cuál es el lugar idóneo para que estén, siempre con una idea clara y es que la gente pueda verlas, porque también es la manera de hacer memoria histórica” y que la ciudadanía “pueda recordar lo que pasó para que nunca más vuelva a suceder”, ha explicado.
Además, Sanmartín ha señalado que la asesoría jurídica debe estudiar la sentencia de la Sala Civil del alto tribunal que ha estimado los recursos de casación e infracción penal interpuestos por el consistorio de Santiago, cinco años después de que recurriese al Supremo. Con todo, la regidora confía en que este sea el final del proceso y las estatuas puedan retornar próximamente a Santiago aunque todavía es “pronto” para fijar fechas.
La alcaldesa ha considerado que la ciudadanía está “muy ilusionada” con el hecho de que “por fin" se ha hecho justicia con una decisión que se suma a la recuperación del Pazo de Meirás. Y ha dicho que, en esta materia, todavía hay que "seguir adelante” porque aún quedan “algunos espacios por recuperar”, como la Casa Cornide de A Coruña, donde el Ayuntamiento coruñés también ha dado los primeros pasos para intentar devolver el inmueble al patrimonio público.
