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Consejo de Ministros

El Gobierno confía en que las inversiones y las medidas sociales atraigan a los independentistas al Presupuesto

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros.

Fernando Varela

El Gobierno confía en las virtudes del aumento de la inversión en Cataluña y de sus medidas sociales para convencer a los grupos independentistas de la conveniencia de aprobar su proyecto de Presupuestos pero no tiene intención de dar ningún paso que suponga interferencia alguna en el juicio del procés o alimente siquiera la hipótesis de un referéndum de autodeterminación.

En estos términos se pronunció este viernes la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la rueda deprecas posterior al Consejo de Ministros que ha aprobado la iniciativa más importante del Gobierno desde la moción de censura: su proyecto d cuentas de ingresos y de gastos para el presente año. “Espero que las inversiones previstas en Cataluña sean un elemento suficientemente atractivo” como para convencer al PDeCAT y a Esquerra, subrayó la ministra, que tampoco quiso renunciar de antemano al respaldo del PP y de Ciudadanos, aún a sabiendas de su posición contraria.

El Gobierno dispone ahora de casi cinco semanas para atraer a los presupuestos a otras formaciones políticas antes de que el Pleno del Congreso que previsiblemente se celebrará en torno al 11 y 12 de febrero decida si se los devuelve al Ejecutivo o permite su tramitación.

Montero no quiso hablar de cifras detalladas, a la espera de que la semana que viene se divulgue la letra pequeña del proyecto incluyendo el reparto por territorios, pero sí confirmó que por primera vez el Gobierno dará cumplimiento a lo que establece el Estatuto de Autonomía de Cataluña y que exige que la inversión del Estado se ajuste al peso de la comunidad en el PIB, que en estos momentos se sitúa en torno al 19%. Por eso la ministra subrayó que no se trata de “una contrapartida” al independentismo sino del cumplimiento de una ley orgánica como es el Estatuto catalán y destacó que también se dará satisfacción a las compromisos legales establecidos en los estatutos de otras comunidades.

“Yo soy optimista”, aseguró la ministra, porque “una vez que se comprueben las cantidades me parece muy difícil que los que defienden Cataluña puedan obviar estos Presupuestos”. El Govern lleva tiempo demandando más recursos y ahora tiene la oportunidad de recibirlos.

En la misma línea se pronunció la titular de Economía, Nadia Calviño. “Me parece muy difícil que cualquier partido político, también Ciudadanos y el PP” no los respalden. En su opinión tienen muy difícil explicar por qué se opone a unos presupuestos que atienden los compromisos españoles en materia de disciplina fiscal y al mismo tiempo incluyen medidas sociales “en beneficio de todos”.

¿Qué pasa si, aún así, los Presupuestos no salen adelante? Calviño citó dos amenazas. En primer lugar, un incremento del déficit público por encima de lo comprometido con Bruselas, porque habría que mantener los compromisos de gasto existentes sin poner en marcha las medidas de ingresos que prevé el proyecto del Gobierno. Y, en segundo lugar, una pérdida de confianza de los mercados internacionales que provocará un incremento de los costes de financiación de la economía española.

El proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 prevé una recaudación récord de 227.356 millones de euros, un 9,5% más respecto a lo recaudado este año, debido al crecimiento económico y a las medidas fiscales incluidas en las cuentas.

La ministra de Hacienda llevará el lunes a las diez de la mañana dicho proyecto a la Cámara Baja, para iniciar su tramitación parlamentaria, que si llega a culminarse se prolongará durante unos tres meses.

Según Montero las cuentas marcan un "punto de inflexión" en la política económica y presupuestaria de los últimos años, dado que se hace compatible la consolidación fiscal con el crecimiento del gasto público, redistribuyendo la riqueza y apostando por un modelo económico "más inclusivo y sostenible".

Las nuevas cuentas, que se han elaborado con una previsión de crecimiento del 2,2% para este año, un décima menos de lo estimado inicialmente, contemplan un incremento de ingresos de todas las figuras tributarias, especialmente del Impuesto sobre Sociedades, cuya recaudación crecerá un 14,1%, hasta los 27.579 millones, debido al alza del tributo para las grandes empresas.

Asimismo, los ingresos por el IRPF crecerán un 4,9% respecto a la recaudado este año, hasta los 86.454 millones, mientras que el IVA recaudará en 2019 78.307 millones, un 11,7% más. Los ingresos por impuestos especiales sumarán 23.057 millones, un 11,8% más; y otros ingresos tributarios recaudarán 11.959 millones, un 16,4% superior al cierre de 2018. En conjunto, los ingresos tributarios ascenderán a 128.930 millones, un 11,9% más.

De su lado, los ingresos no tributarios sumarán los 25.745 millones de euros, en este caso supone un descenso del 2,6% respecto al avance de liquidación de 2018. De esta forma, el total de ingresos no financieros alcanzarán los 154.675 millones, un 9,2% más.

Tras haberse aprobado ya el alza del 1,7% de las pensiones, del 3% de las mínimas, el incremento salarios de funcionarios de al menos un 2,25% o el aumento del Salario Mínimo a 900 euros, las nuevas cuentas fijan un tipo mínimo del 15% en Sociedades, la subida de un 1% de Patrimonio, la rebaja del tipo del 25% al 23% en Sociedades para pymes que facturen menos de un millón de euros, y la bajada del IVA de servicios veterinarios y de los productos de higiene femenina.

En paralelo a las nuevas cuentas, se están tramitando ya, y se aprobarán, decretos leyes para la creación de nuevas figuras impositivas como la tasa Google o el gravamen a las transacciones financieras.

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El Ejecutivo de Pedro Sánchez quiere dar un impulso a las medidas sociales y para ello los Presupuestos recogen distintas medidas, como la supresión del copago farmacéutico, el aumento de las becas para estudio y ayudas para material escolar en etapas obligatorias (coste de 536 millones); un aumento del 40% de la dotación de Dependencia (515 millones) y el Plan de Eficiencia Energética de Hogares Vulnerables (Feder) (400 millones).

Otras medidas derivadas del acuerdo presupuestario entre el Gobierno y Podemos son la recuperación del subsidio para mayores de 52 años; la cotización a la Seguridad Social de los cuidadores (coste de 315 millones) y el aumento del permiso de paternidad de 5 a 8 semanas.

Las medidas que conllevarán un menor coste serán la financiación a ciencia (273 millones), vivienda (173 millones), ayudas para el material escolar (50 millones) y comedor (25 millones), para cultura y cine (20 millones), el Pacto contra la Violencia de Género (20 millones) o las oficinas de despoblación (10 millones).

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