Un año después de la toma de posesión del Gobierno del Partido Socialista de Portugal (PS), un 63% de los encuestados se declaran satisfechos o muy satisfechos del desempeño del Ejecutivo y el 71% creen que agotará la legislatura a pesar de que su estabilidad depende de apoyos puntuales de formaciones de como el Bloque de Izquierda, el Partido Comunista de Portugal o Los Verdes, informa Europa Press.
El estudio, elaborado por CESOP-Universidad Católica Portuguesa y publicado por Diário de Notícias, especifica que para los portugueses la labor del Gobierno es buena (60%) o muy buena (3%), mientras que el 25% de los preguntados creen que es mala (20%) o muy mala (5%).
En cuanto a la estabilidad de la geringonça o chapuza, como se ha venido a llamar la fórmula de gobierno que respalda al primer ministro António Costa, un 71% considera que el Ejecutivo agotará la legislatura, una cifra muy superior al 35% que lo creía hace un año. El 16% cree que no terminará la legislatura, muy por debajo del 52% que lo pensaba en 2015.
Además, el 68% considera que no hay alternativa en la oposición al actual Gobierno, frente al 18% que piensa que sí la hay. De los que creen que sí la hay, el 12% la atribuyen al Partido Social Demócrata (PPD/PSD).
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El Gobierno de Costa se basa en una aritmética parlamentaria inestable, ya que la coalición Portugal al Frente (PàF) –formada por PSD y Centro Democrático Social-Partido Popular (CDS-PP)– ganó las elecciones del 4 de octubre de 2015 con un 36,86% y 102 de los 230 escaños.
El PS, por su parte, obtuvo un 32,31% y 86 diputados, pero cuenta con apoyos puntuales del Bloque de Izquierda ( 19 escaños) y de la Coalición Democrática Unitaria, formada por el Partido Comunista de Portugal y el Partido Ecologista Los Verdes (17 escaños). Completan el hemiciclo cinco diputados elegidos por el PSD en solitario y el diputado Rui Manuel dos Santos Almeida, del partido ecologista Personas-Animales-Naturaleza (PAN).
El primer presupuesto de la era Costa fue aprobado tras largas negociaciones con los grupos de izquierda y parece que este año también está cerca un acuerdo. El sistema se basa en que el Bloque, comunistas y ecologistas plantean sus demandas al Gobierno socialista, que cede para incluirlas en los presupuestos sin salirse de las exigencias de disciplina que llegan de Bruselas.
Un año después de la toma de posesión del Gobierno del Partido Socialista de Portugal (PS), un 63% de los encuestados se declaran satisfechos o muy satisfechos del desempeño del Ejecutivo y el 71% creen que agotará la legislatura a pesar de que su estabilidad depende de apoyos puntuales de formaciones de como el Bloque de Izquierda, el Partido Comunista de Portugal o Los Verdes, informa Europa Press.