Las inscripciones en el Rexistro Único de Demandantes de Vivenda Protexida, paso imprescindible para poder optar a un piso con algún régimen de protección en Galicia, se encuentran en niveles máximos. El pasado 24 de septiembre, cuando Praza.gal consultó los datos para elaborar esta información, eran concretamente 22.678, un 25% más que hace apenas un año. Más de 17.000 de estas solicitudes se concentran en las siete principales ciudades, donde el incremento en apenas doce meses ya roza el 30%.
Pese a la caducidad de las peticiones a los tres años si no se renuevan —una de las modificaciones que el PP introdujo al regresar a la Xunta en 2009 sobre las condiciones del registro original, creado por la Consellería de Vivenda del Gobierno de coalición PSdeG-BNG—, las solicitudes encadenan récord tras récord. Y tienen como telón de fondo el final de la década y media en la que la vivienda protegida en general y la promovida por la Xunta en particular han estado paralizadas prácticamente por completo.
Con Vigo a la cabeza del total de peticiones (más de 7.000), resulta especialmente significativo que la ciudad donde más aumentan sea Pontevedra, con algo más de 1.500 que suponen casi un 60% más que hace un año. Las solicitudes se disparan precisamente cuando la Consellería de Vivenda ha subrayado que tiene "en marcha" en la ciudad unas 300 viviendas de promoción pública con los proyectos de Valdecorvos, Tafisa y As Devesas, áreas donde fue clave la cesión de suelo por parte del Concello, al que se sumará lo previsto en San Mauro, "para construir más de 2.000 viviendas, el 80% de ellas protegidas", indica el departamento de María Martínez Allegue.
Un reciente informe abordado en el Consello da Xunta cifra, concretamente, en 2.943 las viviendas de promoción pública que el Gobierno gallego tiene "en diferentes fases de tramitación y ejecución". Casi la mitad se sitúan en la provincia de Pontevedra, un total de 1.304 en seis ayuntamientos: las ciudades de Vigo y Pontevedra y en Vilagarcía, Mos, A Estrada y Lalín.
Pese a tratarse de una cantidad significativa, esas más de 1.300 viviendas para esa media docena de municipios —el mencionado balance no desagrega cuántas corresponden a cada ayuntamiento— apenas cubren el 13% de la demanda. Según las inscripciones en el Rexistro Único de Demandantes, en esas mismas localidades hasta 9.400 personas esperan por un piso con algún régimen de protección.
Algo similar ocurre en la otra provincia más poblada, A Coruña. Siempre según el balance de la Consellería, el Gobierno gallego promueve actualmente 966 viviendas en A Coruña, Santiago, Ferrol, Narón y Teo, ayuntamientos donde las peticiones de vivienda protegida superan las 6.000. Así, la oferta pública de los próximos años equivale al 15% de la demanda.
En Lugo, todas las viviendas en marcha están en la capital de la provincia, donde la Xunta promueve vivienda pública por primera vez desde el fin del Gobierno de PSdeG y BNG. Las promociones, señala la Consellería, alcanzan las 597, en una ciudad con 1.600 solicitudes pendientes, de las que el 65% no tendrán respuesta a corto plazo. En Ourense, por su parte, la Xunta proyecta 76 pisos en dos ayuntamientos (la capital y San Cibrao das Viñas), lo que equivale al 8% de las 881 solicitudes actualmente activas.
Si abrimos el foco al conjunto de Galicia, el mencionado total de 2.943 viviendas que la Xunta tiene "en marcha" responde a apenas el 12% de una demanda que, como muestra el mapa bajo estas líneas, se concentra sobre todo en las principales ciudades y sus áreas de influencia.
Son, concretamente, 34 los ayuntamientos con más de 50 solicitudes de viviendas protegidas —los destacados en el mapa en tonos rojos— encabezados por las áreas de Vigo y A Coruña. También destacan Lalín, Vilagarcía, Monforte o Sarria. Y puntos como A Mariña y, más hacia el interior, O Carballiño o Allariz.
Las inscripciones en el Rexistro Único de Demandantes de Vivenda Protexida, paso imprescindible para poder optar a un piso con algún régimen de protección en Galicia, se encuentran en niveles máximos. El pasado 24 de septiembre, cuando Praza.gal consultó los datos para elaborar esta información, eran concretamente 22.678, un 25% más que hace apenas un año. Más de 17.000 de estas solicitudes se concentran en las siete principales ciudades, donde el incremento en apenas doce meses ya roza el 30%.