Hong Kong
Un hombre hiere con un cuchillo a cuatro personas y arranca media oreja de un mordisco a un concejal en Hong Kong
Un hombre ha herido este domingo en Hong Kong a cuatro personas con un cuchillo y arrancado de un mordisco parte de la oreja de un concejal que intentó mediar en lo que, según las primeras investigaciones, se trató de un asalto derivado de la actual tensión social en el territorio, informa Europa Press.
Las víctimas eran un grupo de familiares que acababan de comprar en el centro comercial Cityplaza, en el distrito de Tai Koo, cuando se enzarzaron en una discusión con un individuo que sacó un cuchillo de la bolsa que llevaba y comenzó a lanzar puñaladas.
En pleno ataque, apareció el concejal Andrew Chiu Ka Yin, de la junta de distrito local, para intentar mediar. El agresor se lanzó hacia su rostro, que sujetó con ambas manos mientras propinó un bocado que arrancó media oreja izquierda al funcionario, a pesar de que en ese momentoun multitud había rodeado a ambos y estaba intentando disuadir a golpes al agresor.
Uno de los heridos por el acuchillamiento se encuentra en estado grave y se desconoce por el momento la gravedad del resto, así como el estado del agresor, que fue apaleado posteriormente por el gentío, antes de pasar a disposición judicial.
El concejal ha sido ingresado en el hospital Pamela Youde de Chai Wan, según su compañero Patrick Wong Chun-sing al South China Morning Post. La porción amputada de la oreja ha sido guardada en una bolsa de plástico pero "parece que no podrán injertársela, porque ha sido arrancada", ha explicado Chun Sing a Hong Kong Free Press.
El lugar había sido el escenario previo de una manifestación dentro de la ola de protestas que desde hace semanas recorren la ciudad contra las autoridades hongkonesas y el Gobierno chino, al que acusan de intromisión judicial.
Al menos 200 detenidos en la jornada de protestas más violenta de las últimas semanas
La Policía de Hong Kong ha detenido a 200 personas y ha incautado 188 bombas de gasolina este sábado durante las protestas antigubernamentales que se suceden en el país desde hace cinco meses.
Las personas han sido arrestadas por delitos de reunión ilegal, posesión de arma ofensiva, daño criminal y uso de cobertura facial durante una reunión "ilegal", ha expresado la Policía hongkonesa en un comunicado. Además de las 188 bombas de gasolina incautadas, la Policía también ha confiscado bastones extensibles y aerosoles de pimienta.
La de este sábado ha sido una de las jornadas de protesta más violentas desde que comenzaran las manifestaciones en Hong Kong. En último término, se dirigen contra el Gobierno de Pekín, al que acusan de atentar contra sus principios de autonomía. Los manifestantes han destrozado y quemado tiendas y han dañado instalaciones del transporte público de la ciudad. Además, algunos también han atacado a los transeúntes y han colocado clavos en las carreteras.
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Mientras tanto, la Policía de Hong Kong ha vuelto a recurrir a los gases lacrimógenos para despejar la nueva protesta convocada para este sábado en las calles del territorio. "El continuo vandalismo está afectando seriamente al orden público y la vida diaria de las personas", ha criticado la Policía de Hong Kong, al tiempo que ha reiterado que "no se tolerará ningún comportamiento violento". "La Policía continuará tomando medidas de aplicación decididas para salvaguardar la seguridad pública de la ciudad y llevar a todos los infractores ante la Justicia", ha recalcado.
La marcha, celebrada tras una "llamada de emergencia" realizada por los activistas prodemocráticos, ha protagonizado encontronazos con las fuerzas de seguridad en Victoria Park y Causeway Bay, dos de los habituales puntos de fricción de las protestas. De momento no se tiene constancia de heridos.
Estos nuevos enfrentamientos tienen lugar después de que el Gobierno chino anunciara el jueves su intención de "perfeccionar" la forma en que se nombra y releva al líder de Hong Kong, tras una reunión a puerta cerrada de cuatro días de duración entre los principales dirigentes del Partido Comunista en Pekín.
