Podemos marca como línea roja para pactar el referéndum en Cataluña

Podemos marca sus líneas rojas para cualquier negociación con otras fuerzas políticas. Este lunes, el candidato del partido, Pablo Iglesias, aseguró que será “imprescindible” para alcanzar acuerdos con Podemos asumir su “hoja de ruta de cambios constitucionales”, que incluye, entre otros elementos, organizar un referéndum de autodeterminación en Cataluña. No obstante, Iglesias también avisó de que su formación “no permitirá ni por activa ni por pasiva que gobierne el PP”, y no descartó la posibilidad de que se acaben celebrando nuevas elecciones.

Iglesias compareció tras una noche electoral en la que Podemos –junto a sus alianzas en Comunidad Valenciana, Cataluña y Galicia– se convirtió de golpe en la tercera fuerza política de España, con 69 diputados. No obstante, la fragmentación del Congreso y la tremenda igualdad entre los bloques de izquierda y derecha aboca a los partidos a entablar negociaciones. Iglesias, que aseguró que “ahora es la hora de los estadistas”, no quiso utilizar el término “líneas rojas”, pero sostuvo que Podemos tendrá hasta cinco exigencias irrenunciables en sus conversaciones, entre los que se encuentra una que el PSOE rechaza, a priori, de plano: organizar un referéndum en Cataluña, en el que el partido morado pediría el no a la independencia.

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“No hablamos de líneas rojas de negociación, sino de pegamento; no hablamos de propuestas programáticas, sino de consensos” sociales, argumentó Iglesias para justificar su negativa a renunciar a ninguna de sus cinco exigencias -además del referéndum en Cataluña, también piden reformar el sistema electoral, blindar los derechos sociales en la Constitución, prohibir las puertas giratorias y profundizar en la independencia de la Justicia- en las negociaciones. Y lanzó un dardo envenenado al PSOE: “Parece que los que mandan en el PSOE no entienden que España es un país diverso y plurinacional, y quien no entienda eso está entregando el gobierno a Rajoy”, denunció el líder de Podemos, que pidió a los socialistas que no se “bunkericen”. Si lo hacen, asegura, “que no cuenten con Podemos para entregar el Gobierno al PP”.

No obstante, Iglesias rechazó hablar explícitamente de pactos de investidura y aseguró que “ahora ha llegado la hora de los estadistas, y no tocan ni los nervios ni las prisas”. Por ello, el líder de Podemos anunció que iniciará una “ronda de contactos” con todos los líderes de las formaciones que han obtenido representación parlamentaria en el Congreso de los Diputados, y también reunirá al Consejo Ciudadano -el máximo órgano de dirección- de Podemos para analizar los resultados y los próximos pasos a seguir.

En cualquier caso, Podemos no descarta la convocatoria de nuevas elecciones si el resto de fuerzas no asumen sus exigencias, aunque Iglesias afirmó que la intención de su partido es negociar con "responsabilidad de Estado" porque "no toca" una nueva convocatoria. Sin embargo, el líder de la formación morada aseguró que Podemos sería "muy optimista" si se celebrasen nuevos comicios, ya que, a su juicio, la remontada del partido en campaña electoral ha demostrado que les ha faltado "una semana y un debate" para ganar.