Librepensadores
El que siembra vientos...
Recoge tempestades. El ser humano, como todo el mundo sabe, pasa por ser el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.
Y aquí estamos. El Parlamento de Cataluña acaba de aprobar la desconexión con España, y uno, que ya tiene muchos años, se queda, como el señor Marhuenda, estupefacto.
¿Y cómo llegamos aquí?, nos preguntamos. Y el subconsciente, muy consciente, nos responde: que conteste don Tancredo. Y don Tancredo –que se meó por todos los asuntos de Estado cuando lideraba la oposición: el pacto antiterrorista, la política exterior, los atentados del 11-M o la convivencia entre las distintas nacionalidades españolas– no contesta.
Aquel defensor de las esencias nacionales que recababa firmas contra el Estatuto de Autonomía; aquél que disculpaba a “La Condesa” que calificaba a Cataluña como territorio extranjero cuando La Caixa, a través de Gas Natural, intentó hacerse con Endesa y que prefirió que tomara su control una empresa italiana que se encargó de desguazarla; aquél que llegó al poder con mayoría absoluta catapultado por el cobarde Zapatero, que rodeado del peor Consejo de Ministros de esta mierda de democracia, que pide trabajo a la virgen del Rocío o concede medallas a la virgen del Amor, mientras recorta en Educación y Sanidad y deja sin subsidio a tres millones de desempleados; aquél registrador gallego que sabe perfectamente que ni sube ni baja, pues como don Tancredo pasó los cuatro años de legislatura perfectamente quieto, que asomaba a nuestros telediarios en medio cuerpo y pantalla de plasma leyendo el autocue sentado en el retrete mientras ojeaba el Marca; aquél, este, nefasto presidente que no tiene ni puta idea de cómo salir de este embrollo que con tanto ahínco ayudó a crear, logrando en ocho años de oposición y cuatro de Gobierno que los independentistas catalanes pasasen, según el CEO (Centro de Estudios de Opinión) del 12,9% de Noviembre del 2.005 (mismo porcentaje desde el año 1.991) al 49,4 de Mayo del 2.014. Y lo consiguió a pesar de que los catalanes han sido gobernados durante muchos, muchos años, por una pandilla de ladrones. Y ahora aquel don Tancredo, dispuesto a transmutarse en estafermo, pide árnica a todos los líderes políticos que tanto denostó.
¿Y ahora qué? No sé si quedará alguna virgen a la que invocar. Tal vez la del Pilar, la de los guardias civiles, para que propicie la destitución de Fernández de Mesa y Jorge Fernández, no vaya a ser que hagan alguna burrada.
Nota: Casualmente en el año 2005 Gas Natural lanzó la OPA sobre Endesa. Las burradas que desde la dirección de Endesa y desde el Partido Popular se dijeron sobre los catalanes significaron el despertar del independentismo que permanecía dormido desde hacía décadas.
Jorge Sampedro Reimúndez es socio de infoLibre