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La salida de la crisis

Bruselas recela del 'niño modelo' de Europa y exige a España más ajustes

El ministro de Economía, Luis de Guindos, esta semana en el congreso anual de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos.

El "niño modelo" de Europa, según definió a España el Deutsche Bank, no lo es para Bruselas. La Comisión Europea no se cree las cuentas del Gobierno para 2015, coloca a España entre los países con más desequlibrios económicos en sus cuentas públicas –junto a Grecia y Chipre– y pide nuevos ajustes para cumplir con los objetivos de déficit (4,2% en 2015 y menos del 3% en 2016), además de una nueva vuelta de tuerca al mercado laboral. "El ajuste sigue incompleto", advierte Bruselas un mes antes de que entre en vigor una reforma que prevé una rebaja de impuestos de 9.000 millones de euros en dos años.

Pese a los recelos de la Comisión Europea, que estima un crecimiento para España el próximo año del 1,7% frente al 2% previsto en los presupuestos, el Gobierno está tranquilo. Cree que el cálculo de Bruselas sobre el déficit de 2015 en España (4,6%, cuatro décimas por encima de la previsión oficial) se debe sólo a que los técnicos de la Comisión son un poco más pesimistas sobre las previsiones de crecimiento. Como marca el guión, el ministro de Economía, Luis de Guindos, descartó que el Ejecutivo vaya a aprobar ajustes adicionales.ajustes adicionales

España, aunque ha mejorado con las reformas que alaba Bruselas (en 2013 incumplía seis indicadores de 11 y ahora "sólo" cinco), sigue mostrando desequlibrios respecto a los objetivos del Tratado de Estabilidad. Según el documento (página 40) elaborado por Bruselas, España incumple en paro (24,1% de media en tres años frente al 10% objetivo); deuda pública (92,1% del PIB frente al 60%); deuda privada; cuota de mercado exportador y posición neta en inversión internacional.

Cumplidores e incumplidores

Bruselas mantiene a España en el "pelotón de los torpes" por desequilibrios entre ingresos y gastos. En la división que hace el Gobierno comunitario entre países que cumplen (Alemania, Irlanda, Luxemburgo, Holanda y Eslovaquia), los que cumplen a medias (Estonia, Letonia, Eslovenia y Finlandia) y los que no van a cumplir, España ocupa lugar en este último bloque junto con Bélgica, Francia, Italia, Malta, Austria y Portugal. Estos siete países son, en opinión de los técnicos de la Comisión, el mayor peligro para la estabilidad de la eurozona. Es su conclusión tras analizar los borradores presupuestarios de 2015.

En ese contexto, la Comisión Europea desconfía de los presupuestos elaborados para 2015 por un Gobierno que presume de haber dejado atrás la crisis y haber convertido a España en el motor de crecimiento de la eurozona. “El proyecto (de presupuestos)", dice Bruselas, "no asegura el cumplimiento de los objetivos fiscales.objetivos fiscales La Comisión invita a las autoridades a tomar las medidas necesarias”. “España ha hecho ciertos progresos relativos a la parte referida a las reformas estructurales incluidas en las recomendaciones del Semestre Europeo”, pero “debe hacer más progresos”, concluye la Comisión. 

Los números no salen. Al menos, no salen para Bruselas, que expide su receta para solucionar el problema: una reducción de los tipos impositivos del impuesto sobre la renta; una nueva reducción –temporal— de las cotizaciones sociales para los nuevos contratos firmados en 2014 y medidas correctoras” para los Gobiernos autonómicos que no cumplan con los objetivos fiscales.

Otra vuelta de tuerca

El Comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, concretó el llamamiento al Gobierno para que dé otra vuelta de tuerca a la reforma laboral. La Comisión, dijo Moscovici en una conferencia de prensa recogida por Europa Press, es "consciente de que el paro es el principal problema" el parode España en términos de desequilibrios macroeconómicos y por ello, según ha dicho Moscovici, recomienda al Gobierno "reformas estructurales, en particular en el sector del mercado de trabajo".

La confianza del Gobierno en que el crecimiento de la economía bastará para cubrir cualquier desequilibrio no sólo provoca desconfianza en Bruselas. También los responsables con más y mejor información oficial –los del Banco de España– han alertado sobre el posible incumplimiento del objetivo de déficit en 2015.

La lupa está sobre los presupuestos del año próximo. Han sido elaborados, según el Gobierno, para apuntalar la salida de la crisis. En realidad, las cuentas del Estado, aún sin recortes añadidos como reclama Bruselas, no supondrán ningún alivio para la población más golpeada por la crisis desde 2008.

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Menos parados y menos prestaciones

Los presupuestos prevén un descenso del número de parados de 5,6 millones a 5,2 millones, pero al mismo tiempo recogen un ahorro cercano  a los 4.500 millones en el pago de prestaciones. Resultado: el número de parados sin ningún tipo de protección crecerá por encima de los 1.600.000 actuales.

Para los jóvenes menores de 25 años, la situación aún será peor. El último dato coloca la tasa de paro en este colectivo en el 53,8% (49,3% en Grecia) pero al año próximo la renta básica de emancipación sólo alcanzará los 14 millones (40 millones en 2014), sin que la puedan cobrar nuevos perceptores. nuevos perceptores

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