Moda

De la pasarela a la calle: "¿Cuántas mujeres caben en una talla 34?"

Una modelo luce las creaciones del diseñador Roberto Verino en la primera jornada de la pasarela Fashion Week Madrid.

Las denuncias de la extrema delgadez femenina en las pasarelas de moda han sido una constante en los últimos años. Numerosos anuncios han sido retirados por mostrar imágenes de mujeres extremadamente delgadas, representando un cuerpo femenino irreal.Además, en el backstage también se han producido bastantes críticas. Muchas modelos han denunciado a algunas marcas que han rechazado contar con ellas por no estar suficientemente delgadas. "Acabo de regresar de Tokio/Japón, donde Louis Vuitton organizó un hermoso desfile de Crucero en Kioto, pero yo no llegué a asistir porque me prohibieron ir al evento por ser 'demasiado gorda'. (Uso una talla 34-36)", escribió en su cuenta de Instagram la modelo danesa Ulrikke Hoyer, como publicó El País

Ahora, sin embargo, parece que la firma dueña de Louis Vuitton ha cambiado de opinión. La pasada semana, el imperio LVMH –dueña también de Loewe– y Keing anunciaron su compromiso de que su moda no desfilaría en las pasarelas con modelos demasiado delgadas. Entre las cinco nuevas reglas que han adoptado se encuentra que las modelos que trabajen para sus marcas deben acreditar su buen estado de salud mediante un certificado médico, además de vestir una talla superior a la 32 para las mujeres y superior a la 42 en el caso de los hombres. 

Este jueves, con el comienzo de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid, la guerra de las tallas se traslada a la capital. "Desde hace años, nosotros presentamos a modelos con una imagen saludable", afirma Charo Izquierdo, directora de la antigua pasarela Cibeles, quien añade que la prohibición de presentar a modelos con una talla 32 en las pasarelas es algo lógico porque ese extremo "era escandoloso". "No es una cuestión de talla", prosigue, "es una cuestión de salud, y nosotros nos ceñimos a los estándares de Índice de Masa Corporal (IMC) marcados por la Organización Mundial de la Salud (OMS)". El organismo internacional fija en 18,5 la barrera entre un IMC que refleja el peso normal y el peso por debajo de los límites saludables. 

En el año 2006, la pasarela española de referencia de moda rechazó al 30% de sus modelos por su extrema delgadez. La decisión se adoptó porque la cita "es el espejo de muchas jóvenes" que podrían poner en peligro su salud por intentar llegar a los niveles de "infrapeso" que muchas veces estaban representados en las pasarelas. Así lo expresó Concha Guerra, viceconsejera de Economía e Innovación Tecnológica de la Comunidad de Madrid, tras adoptar este acuerdo de manera conjunta con las principales agencias de modelos, representantes de la Asociación de Creadores de Moda y expertos en el ámbito de la endocrinología y nutrición. 

Fomento de una "imagen irreal" de la mujer

María del Carmen Galindo, presidenta de la Federación Española de Asociaciones contra la Anorexia y la Bulimia (FEACAB), explica que los cánones estéticos que se presentan en las pasarelas no implican necesariamente un aumento en el número de trastornos alimenticios, pero sí es verdad que fomentan un prototipo de belleza "que no es para nadie". "El modelo estético que presentan no es real. ¿Cuántas mujeres caben en una talla 34?", se pregunta. 

Según un estudio del Instituto de Biomecánica de Valencia, un 40% de las mujeres españolas tiene problemas para encontrar ropa de su talla, mientras que un 60% de los hombres se enfrentan al mismo problema. "En España, las tallas de la ropa no se adecúan al perfil físico" ni de los hombres ni de las mujeres, detalla el estudio. Esto provoca, en muchas ocasiones, que las personas tiendan a intentar imitar las modas y los cánones que observan en las pasarelas o en las revistas.

Pero hay algunas personas que no cumplen los requisitos de esas modas, prosigue Galindo, por lo que pueden verse frustradas y desarrollar problemas alimenticios. "Ahí hay que hacer mucho trabajo de educación. Esa imagen no es la real", añade. 

En este sentido, en el año 2013, un total de 26.000 chicas españolas sufrían anorexia o bulimia. Esta cifra supone un 6% de toda la población española. Entre los chicos, el porcentaje es algo menos elevado pero igualmente preocupante: 2.000 chicos padecían este tipo de enfermedades, según los datos de la Asociación contra la Anorexia o la Bulimia (ACAB). Sólo en la unidad infanto-juvenil del Hospital Clínico de Zaragoza se registraron 89 casos nuevos relacionados con la anorexia y la bulimia en 2016. "De las personas entre 15 y 26 años –que son las que más riesgo tienen–, un 5% desarrolla este tipo de enfermedades" que, además, traen asociados otros trastornos como la ansiedad o la depresión, explica. 

Marian Fernández Arroyo, psicóloga de la Asociación en Defensa de la Atención a la Anorexia Nerviosa y Bulimia (ADANER), coincide con Galindo. Según explica, la representación de este tipo de cuerpos "no es la causa" de los trastornos "pero, si ya te encuentras en riesgo de padecerlos, lo aumenta". "Esto funciona con personas que son muy perfeccionistas y se ponen metas irreales. Si no llegan a ellas, se frustran y, como tienen que tener todo controlado y lo más controlable es la alimentación", acaban sufriendo este tipo de enfermedades. "Nunca van a llegar al peso que quieren, siempre va a ser menos", lamenta.

El problema es presentar "solo" ese modelo

Bajo estas premisas, la Comunidad de Madrid elaboró en el año 2007 un Pacto social contra los trastornos del comportamiento alimentario destinado a "profundizar y alcanzar un compromiso firme para que los condicionantes socioculturales dejen de ser una amenaza para la salud". En este sentido, se establecieron varias líneas de actuacvión destinadas expresamente a que las firmas de moda y creativos publicitarios no proyecten una imagen irreal que pueda provocar enfermedades alimenticias, especialmente a los jóvenes. 

Se establece que las firmas de moda y las empresas de publicidad deben rechazar "la presentación de modelos o imágenes que carezcan de una masa corporal en los límites saludables" y fomentar "nuevos modelos corporales más acordes con la realidad". 

Yolanda Domínguez, artista visual y experta en comunicación y género, opina que el principal problema es la representación de cierto tipo de cuerpo. "El problema no está en las mujeres delgadas, sino en la falta de diversidad de los cuerpos" explica. "Se invisibilizan aquellos que no son delgados y se acaban estigmatizando".

"Queremos pertenecer a grupos y el grupo de mujeres exitosas es el de las mujeres delgadas", prosigue. Así, lo que se acaba representando en las pasarelas y en los medios de comunicación es un "mundo ideal" al que intentan aspirar los jóvenes, que acaban frustrados si no alcanzan lo que se supone que es el éxito. 

Además, explica, no sirve de nada que existan múltiples tallas si no todas están representadas en los catálogos de moda. "Lo inclusivo es usar modelos diversas, no separarlas por tipos de cuerpo", critica. 

El Banco Central Europeo recomienda a los gobiernos de la zona euro invertir más en salud y educación

El Banco Central Europeo recomienda a los gobiernos de la zona euro invertir más en salud y educación

Acuerdo olvidado entre el Ministerio de Sanidad y la industria de la moda

En el año 2006, el Ministerio de Sanidad negoció un acuerdo con las firmas de moda –entre las que se sumaron Inditex, El Corte Inglés, Cortefiel y Mango– con el objetivo de fijar unas herramientas que permitan prevenir los trastornos alimenticios como la anorexia y la bulimia. Sin embargo, según han denunciado las organizaciones dedicadas a prevenir y tratar este tipo de enfermedades, el acuerdo, once años después, no ha llegado a ningún término.

"Lo que se hizo fue encasillar a las mujeres en tres tipos de cuerpo, pero no nada más", denuncia Galindo. Se refiere al estudio del Ministerio de Sanidad que estableció tres tipos de morfotipos del cuerpo de la mujer: diábolo, cilindro y campana. De esta manera, conociendo el cuerpo de las españolas, se pretendía alcanzar uno de los mayores objetivos del acuerdo: la unificación de las tallas que aún hoy parece lejos de alcanzarse. 

Más sobre este tema
stats