ONG critican la visita a España del presidente de Israel

El presidente de Israel, Reuven Rivlin, comenzaba este lunes en Madrid su visita de Estado, que durará poco más de 24 horas. A pesar de ser el primer mandatario israelí que visita España desde que en 1992 lo hiciera Chaim Herzog, Rivlin no ha sido bienvenido por todos, menos después de que el Ayuntamiento de Madrid le entregara la Llave de Oro de la ciudad. Lo cierto es que se trata de un gesto protocolario que viene siendo habitual desde que se recogiera en el reglamento del Consistorio en el año 1988, cuando se comenzó a otorgar esta distinción a todos los jefes de Estado que se encontraran en la ciudad en una visita oficial. Sin embargo, diversos colectivos pacifistas y en favor de la desocupación israelí en Palestina han criticado este gesto y la invitación a España. 

"Queremos subrayar que el Estado de Israel ha incumplido reiteradamente todas las resoluciones de las Naciones Unidas, año tras año. Que el Estado de Israel ha sido condenado por el Tribunal de Justicia de la Haya y que ha incumplido la sentencia; que es acusado por insignes personalidades de practicar apartheid contra la población palestina, incluidos premios nobeles". Es la carta que han enviado las ONG a la alcaldesa de la capital y en la que le recuerdan los motivos por los cuales se oponen de manera rotunda a la visita de Rivlin al Palacio de Cibeles. "Pertenecemos al grupo de los que no sentiremos ninguna congoja si el presidente de Israel no va al ayuntamiento", señala la misiva, firmada por Palestina Toma la Calle, la Asociación de la Comunidad Hispano-Palestina Jerusalén, Paz Ahora y la organización Unadikum, todas ellas integrantes de la Red Solidaria Contra la Ocupación Palestina (RESCOP). 

Para mostrar su repulsa a la visita y a la entrega de esta condecoración a Rivlin, a quien consideran un "señor de la guerra", las organizaciones convocaron una protesta en Cibeles a las 12.00 horas. A la salida del presidente del Ayuntamiento, donde tuvo lugar el encuentro con la alcaldesa, varias personas esperaban portando la bandera de Palestina en repulsa a su llegada a España. Este martes, la protesta tendrá lugar en el Senado, donde estará el mandatario israelí desde el mediodía. 

Acompañado de empresarios para negociar "contratos de guerra y ciberseguridad"

La agenda de Rivlin contempla la presencia del jefe de Estado de Israel en la inauguración del encuentro empresarial Hispano-Israelí, que tendrá lugar en la sede de la Confederación Española de Asociaciones Empresariales (CEOE) a las 10.00. Esta cita ha sido uno de los aspectos clave para que las organizaciones criticaran duramente la visita. Según explicó Julio Rodríguez, portavoz de la ONG Paz Ahora, el presidente de Israel viene acompañado de 40 empresarios con el objetivo de "firmar contratos de guerra y de ciberseguridad con firmas españolas". 

"Israel es un exportador clave de sistemas de ciberseguridad y armamento", afirma Rodríguez. "Estas ventas son especialmente crueles porque en su publicidad Israel vende las armas indicando que ya han sido probadas. Y lo han sido contra los palestinos y activistas de otros países", lamenta. "Es el valor añadido que presentan", añade Blanca Camps-Febrer, del Observatorio de Derechos Humanos y Empresa, quien añade, tras múltiples investigaciones en relaciones comerciales entre Israel y España –especialmente Cataluña–, que este tipo de visitas "siempre se aprovechan para hacer negocios". 

A pesar de que, según explica Camps-Febrer, el comercio entre ambos países es limitado, Israel está interesado en España como una plataforma que acerque sus negocios, sobre todo, a América Latina. No obstante, las exportaciones de material de defensa y seguridad desde nuestro país al país liderado por Rivlin superaron los 13 millones de euros de beneficios, según datos de la Secretaría de Estado de Comercio. Del otro lado, en 2014 Israel reveló que España sí se encuentra entre sus compradores de armas, aunque no se desveló el volumen exacto que alcanzaron estos negocios, según publicó El País. "Estas visitas siempre se aprovechan para hacer negocios", afirma Camps-Febrer. 

Sin embargo, la Embajada de Israel en España afirmó que la visita "es un símbolo de los estrechos lazos de amistad que unen a España e Israel". En la misma línea, el Ministerio de Asuntos Exteriores publicó un comunicado con las palabras pronunciadas por Rivlin antes de poner rumbo a nuestro país. "Es una visita histórica e importante a un país que es un verdadero amigo". El mandatario explicó además en su propio perfil de la red social Facebook que ha viajado a Madrid invitado por su "amigo Felipe VI y por su esposa, la reina Letizia", en una visita en la que estará acompañado por su mujer, Nechama Rivlin, y que espera sea "apasionante". "He venido a visitar a la floreciente comunidad judía, a reunirme con el presidente del Gobierno, a hablar en una sesión especial ante el Congreso y el Senado, a ampliar y estrechar la cooperación económica entre los dos países y también, por supuesto, para visitar el Bernabéu, como no podría ser de otra forma", dijo el jefe de Estado israelí.

Rechazan la visita de un "señor de la guerra"

"La palabra de hoy es vergüenza", critica Asunción Estriegana, de la organización Palestina Toma la Calle. "Ver el cartel de 'Welcome refugees' al lado de banderas de Israel es una auténtica contradicción, porque es uno de los países que más refugiados ha provocado en el mundo", lamenta. 

Después de que este verano se cumplieran 50 años de la ocupación militar israelí a los territorios palestinos –Gaza y Cisjordania–, varias ONG denunciaron que la situación, lejos de mejorar, no ha hecho si no empeorar. Así, según el último informe de la Oficina de las Naciones Unidas (ONU) para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), en el año 2016, ocho palestinos –todos de ellos civiles– murieron por operaciones militares israelíes en la franja de Gaza, entre ellos cuatro niños; y 210 personas resultaron heridas. En Cisjordania, por su parte, fallecieron 99 palestinos en manifestaciones, ataques y enfrentamientos con las fuerzas israelíes. En este caso, el número de personas heridas fue de 3.236.

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Según explica Ana Sánchez Mera, del Comité Nacional Palestino de BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones a Israel), varios informes evidencian la vulneración de Derechos Humanos que sufre la población palestina. "La ocupación no se puede negar y la comunidad internacional no puede mirar para otro lado", critica. 

Así, la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia Occidental (CESPAO) explicó en un reciente informe que la situación en Gaza y Cisjordania puede calificarse de apartheid y, por ello, el organismo insta a la ONU a aceptar este término, única vía posible para la solución del conflicto. "Es imperativa una

acción inmediata que evite el sufrimiento humano y finalice el crimen contra la humanidad que se está cometiendo", concluye.