La portada de mañana
Ver
Nadie quiere parar a Netanyahu: Israel, cada vez más fuerte e impune tras 40.000 muertos en Gaza

Las grabaciones de Villarejo

Los audios con Villarejo arruinan las opciones de Cospedal de encabezar la lista de las europeas

María Dolores de Cospedal, en el Pleno del Congreso de los Diputados.

La exsecretaria general del PP no vive su mejor momento. Retirada de la primera fila de la política tras haber perdido en la primera fase de las primaria del PP y renunciar a la presidencia de los conservadores de Castilla-La Mancha, no pocos en su partido veían su designación como presidenta de la Comisión de Exteriores del Congreso como la antesala a su incorporación como número uno a la lista del Parlamento Europeo. Ahora, la filtración de audios de una reunión secreta en la sede del PP en julio de 2009 en la que, junto a ella, participaron su marido, Ignacio López del Hierro, y el comisario jubilado José Manuel Villarejo en las que habla de encargar "trabajos puntuales" al agente complican su salto a Bruselas.

"Hasta la fecha no puede decirse que Cospedal haya cometido ningún delito, pero tampoco puede negarse que, independientemente de cómo termine el caso, ha quedado muy tocada", sostiene un dirigente conservador.

"Las grabaciones no son la mejor tarjeta de presentación para la lista al Parlamento Europeo. Sería hacer la mitad del trabajo a la oposición", añade un diputado. En los últimos días, han crecido las voces dentro del PP que, en privado, creen que Cospedal debería apartarse para no perjudicar a un partido del que ha sido número dos y que se la juega en las andaluzas del próximo 2 de diciembre y en las europeas, autonómicas y municipales de 2019.

En Génova rechazan hablar de candidaturas. Aseguran que, una vez que Susana Díaz ya ha convocado elecciones en Andalucía no procede abordar las listas para las citas electorales de 2019 hasta pasados los comicios andaluces. El adelanto electoral hizo que los conservadores pospusiesen la convención nacional, prevista inicialmente para los días 1 y 2 de diciembre, a mediados de enero. Casado concibió este gran acto de partido como un foro para abordar cuestiones ideológicas y como tope para tener cerradas las listas.

No hay nada cerrado

"Nunca hemos dicho nada de ninguna candidatura que no esté proclamada, por lo que nunca se ha dicho nada de las opciones de Cospedal en la lista del Parlamento Europeo. No hay nada cerrado", señalan desde la dirección nacional.

Hace unas semanas la propia Cospedal remitió un comunicado a los medios de comunicación en el que se desvinculaba de los movimientos, sobre todo a través de las redes sociales, que la promovían como cabeza de lista al Ayuntamiento de Madrid. Este movimientos fue interpretado, en sectores del PP, como una forma de no desviar el foco del Parlamento Europeo.

Una idea extendida en el PP en los últimos días es que si Cospedal no es destinada a Bruselas, el portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, tendría "casi todas las opciones" de encabezar la lista. El eurodiputado es incluido por sus compañeros también en las quinielas para encabezar la lista al Ayuntamiento de Valencia, una plaza importante para los conservadores. Las encuestas que encargue Génova al respecto serán también claves a la hora de que la dirección nacional deshoje la margarita. "Hay que pensar en los mejores candidatos para el partido", defienden.

No es ningún secreto que María Dolores de Cospedal fue un elemento clave para la victoria de Pablo Casado en el congreso extraordinario para la sucesión de Mariano Rajoy. Tras perder en la primera fase, la exsecretaria general puso a disposición del ahora líder del PP a gran parte de su equipo. Muchos de sus apoyos también fueron en la segunda fase a parar a él.

En circunstancias normales, este contexto movería a Casado a colocar a Cospedal como cabeza de lista al Parlamento Europeo. El líder de los conservadores ubicó a dirigentes de la máxima confianza de la exnúmero dos del PP en puestos clave del partido. Por ejemplo, el exministro Juan Ignacio Zoido es presidente del Comité Electoral, el órgano que supervisa las listas, y la exministra Dolors Montserrat fue nombrada portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso.

Casado debe "marcar territorio"

Ahora, tras los audios, se ha instalado en dirigentes del partido la teoría de que Casado, si bien está en una situación compleja, tiene en su mano "marcar territorio" y dejar claro que en el PP sólo hay un líder y él tiene la última palabra.

En este sentido, defienden que "se juega mucho" si, de complicarse el caso, la respuesta que da no es contundente. "Está ante el desafío y la oportunidad de poner él nuevos listones de exigencia en el PP", valora un líder regional.

No obstante, las fuentes consultadas consideran que Cospedal, que ha sido número dos del PP, sabe hasta dónde se puede hacer daño a unas siglas y debería saber cuándo dar un paso atrás.

Cospedal se aferra al escaño y el PP acepta su dimisión a medias

En las últimas horas, el PP ha intentado mantener a Casado al margen de la polémica y ha ubicado como línea roja para actuar contra Cospedal la comisión de un delito. 

Casado, explican quienes le conocen, no quiere cometer los errores del pasado. No quiere, como le ocurrió a Mariano Rajoy en varias ocasiones, poner la mano en el fuego por personas que después tuvieron que abandonar su cargo. Pero tampoco ser injusto como en el partido se cree ahora que se fue con el exministro José Manuel Soria. O con la fallecida Rita Barberá.

El líder del PP, que ha visto como los escándalos de corrupción vuelven a estar en el foco cuando sólo lleva 100 días al frente del partido, romperá su silencio este jueves en una rueda de prensa en Huelva.

Más sobre este tema
stats