Entrevista

Diego de Ramón: “Me tomaron por loco cuando denuncié, pero seis años después han arrestado a los directivos de la CAM”

El abogado Diego de Ramón frente a la sede de la Audiencia Nacional.

Tono Calleja / Alicia Gutiérrez

A las once de la mañana del miércoles Diego de Ramón, el abogado autor de la denuncia que inició el caso CAM, llegaba a la Audiencia Nacional en la calle Prim de Madrid. Su intención era la de acudir al Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional para recabar los últimos autos y diligencias autorizadas por su titular, el magistrado Javier Gómez Bermúdez. Diego de Ramón, letrado de 60 años nacido en Murcia, no sabía en ese momento que el juez había ordenado la detención del exdirector general Roberto López Abad y de cuatro personas más vinculadas a la Caja de Ahorros del Mediterráneo. "Siento una gran satisfacción por los mayores que compraron preferentes", aseguró este abogado tras enterarse pon infoLibre de los arrestos.

– ¿Qué opina de la detención de Roberto López Abad y de Daniel Gil?"

– ¿De verdad me lo dice? ¿Los han arrestado? No me lo puedo creer... López Abad es el director general de la Caja de Ahorros del Mediterráneo. Y se llevó 5,8 millones de euros de indemnización. Y Daniel Gil era el responsable de las inversiones inmobiliarias, que se realizaron mediante más de un centenar de sociedades participadas, entre otras Hansa Urbana. La CAM daba créditos a las sociedades participadas, y Daniel Gil era el asesor ejecutivo de las inversiones inmobiliarias durante el boom del ladrillo.

– ¿Cuándo presentó la querella y por qué?

– Me tomaron por loco cuando denuncié en 2007, pero seis años después han arrestado a los directivos de la CAM. Y lo hice porque el dinero que se destinaba a instituciones sociales era ridículo y mínimo. Y estaba totalmente politizado. Las inversiones sociales se iban a sufragar fiestas, como por ejemplo el Entierro de la Sardina de Murcia y los Moros y Cristianos. Mientras tanto había personas mayores que no tenían ni para ponerse una dentadura o unas gafas. Todo ese dinero se dilapidaba. Y los aparatos de los partidos políticos que dominaban las cajas se autoconcedían créditos multimillonarios y sin garantías. Violaban la normativa bancaria. De ahí que la mayoría no se hayan cobrado.

– ¿Pero usted en ese momento conocía esas irregularidades?

– Sí, las conocía. Había un corredor financiero que abarcaba todo el levante peninsular, en el que participaban Banco de Valencia, Caja de Ahorros del Mediterráneo y Bancaja. Todas estas entidades ofrecían operaciones de crédito multimillonarias. Estamos hablando de cientos de millones de euros. En Murcia, en concreto, estamos hablando del crédito sindicato a la promotora Polaris World. Y entre los dirigentes estaban los representantes políticos puestos ahí por los presidentes de Murcia y Valencia, Ramón Luis Valcárcel y Francisco Camps, respectivamente. Y esos gestores políticos fueron los que llevaron a la quiebra a estas entidades. Las personas que intervenían en los consejos de administración daban créditos a diestro y siniestro, a bajo tipo de interés y sin control. Y en las cajas se crearon pequeños comités directivos que se inflaron los sueldos, se adjudicaron las pensiones vitalicias y se autoconcedieron créditos.

– Usted lo denunció en 2007...

– Yo lo denuncié primero al Banco Central Europeo y después al Banco de España. Desde 2007 he presentado doce escritos e informes jurídicos y económicos denunciando en el Banco de España las irregularidades de la CAM. También en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Y ninguno de ellos me hizo caso. Ni siquiera abrieron un expediente. Encontraba dificultades incluso para que me admitieran a trámite las denuncias. Me dirigí a la Fiscalía General del Estado. Y me dijeron que mi denuncia se  archivaba porque no veían indicios delictivos. Eso fue en julio de 2011. Pero en septiembre del mismo año, estando el magistrado de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, me la admitieron a trámite, cuando la Fiscalía me había dicho que no había indicios...

– Pero al final la Audiencia Nacional se la admitió...

– Sí, y están imputados porque manipularon los mercados. Y yo he pedido en reiteradas ocasiones el ingreso en prisión de los exdirigentes de la CAM o que les instalaran un anillo de control. Tras la caída de Lehman Brothers en Estados Unidos, las cajas crearon productos financieros para rellenar el agujero. Y los comercializaron a sus clientes más débiles, de perfiles inferiores a los 40.000 euros. Lo hicieron para superar las pérdidas que tenían. Y crearon las cuotas participativas, las preferentes y los demás productos financieros...

– Pero eso no solo lo hizo la CAM, el resto de entidades financieras también vendieron preferentes...

– Pero la comercialización de preferentes de la CAM fue aún mayor. Pues tenía varios miles de clientes. La mayoría de un perfil medio y bajo. Necesitaban cubrir el agujero de las grandes constructoras afines al partido político que gobernaba y que gestionaba en las cajas. Y que también eran cercanos a los directivos. De ahí que la mayoría de los créditos impagados sean de grandes constructoras como Martinsa, Polaris World o Llanera.

– Y ahora los dirigentes de la CAM han sido detenidos...

Yo le he pedido también a Gómez Bermúdez que investigue el crédito de mil millones de euros a la empresa Polaris World, que se concedió sin avales y sin garantías, cuando la empresa era deficitaria. Deben pagar por ese tema. Y ahora el juez pide una fianza de 35 millones de euros solidaria a López Abad y a su equipo directivo. Y lo que no es creíble es que digan que no tienen dinero. ¿Cómo no van a tener dinero si López Abad ya ha cobrado 5,6 millones de euros de la pensión vitalicia? Tenía un sueldo de 600.000 euros anuales, retribuciones económicas, dietas, y a parte pensiones vitalicias de 30.000 euros mensuales. ¡Hasta que se murieran!

– ¿Y todas estas prebendas se las aprobaron ellos mismos?

– Lo aprobaron ellos tras crear un comité. Y lo hicieron sin dar traslado a la Asamblea.

– Y en el caso del expresidente de la comisión de Control de la CAM Juan Ramón Avilés también se investigan los créditos blandos...

– Sí. Hay créditos concedidos a personas, como por ejemplo el expresidente de la CAM Modesto Crespo, que no tenían fecha de amortización. Eso quiere decir que podían pagarlo en cualquier momento. O lo que es lo mismo, si ellos no lo pagaban no había un plazo de ejecución para poder pagar ese crédito. Se podían morir y no pagar la deuda.

– Y seis años después López Abad y otros exdirectivos han acabado en la cárcel...

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– Estoy satisfecho. No por mi satisfacción profesional, sino por esos ancianos que compraron preferentes. Estos directivos no se escondían para pagar 700 u 800 euros por una habitación de hotel. Se jactaban de celebrar los consejos de administración en Nueva Delhi (India), algo que costó 500.000 euros por el desplazamiento de todo el consejo de administración, se fueron a Buenos Aires (Argentina) y a Pekín (China), montando en elefante a costa de la caja. No les importaban las pérdidas de las personas mayores. Tienen que pagarlo con la prisión. Y lo mismo debe pasar con el expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, que no se tiene que escapar. Yo me siento satisfecho por las personas mayores. Yo me he emocionado en mi despacho con mis propios clientes porque lloraban de la desesperación. Y eso me afectaba.

– ¿Qué estrategia va a seguir en el caso como acusación popular?

– Yo voy a pedir el ingreso en prisión de todo el consejo de administración. Sabían todo lo que estaba pasando. Y fueron ellos los que aprobaron la legalización de lo que hacían los directivos. Y entre ellos menciono al consejero murciano de Economía, Juan Bernal. Es auditor y economista, y no puede decir que no sabía nada de lo que pasaba mientras era miembro del consejo de administración de la CAM.

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