El juez envía a prisión a Cerdán tras presentarse en el Supremo como víctima de una cacería política
El instructor del caso Cerdán en el Tribunal Supremo, Leopoldo Puente, ha dictado prisión provisional para el ex secretario de Organización del PSOE Santos Cerdán tras su declaración como investigado en el marco de la causa en la que se investiga el supuesto amaño de contratos de obra pública a cambio de comisiones, una comparecencia en la que lo ha negado todo y en la que se ha presentado como víctima de una cacería política. Será trasladado a Soto del Real. Una decisión que el magistrado ha adoptado a petición de las acusaciones populares y el fiscal Anticorrupción, Alejandro Luzón, que la semana pasada, sin embargo, rechazó enviar a prisión al exministro José Luis Ábalos y a su exasesor, Koldo García.
Tres semanas después del demoledor informe que puso punto y final a su carrera política, Cerdán se ha sentado este lunes en el Alto Tribunal para dar explicaciones sobre la supuesta trama criminal. Su declaración como investigado se ha producido una semana después de las comparecencias de Ábalos y García, en las que el magistrado Leopoldo Puente no pudo sacar más que una negación de los hechos. Pese a que hasta última hora se habló de la búsqueda de un acuerdo con Anticorrupción, el exministro evitó, finalmente, el choque directo con el resto de investigados. Él negó los hechos que se le atribuyen. Y el exasesor guardó silencio.
Una línea de defensa que ha mantenido Cerdán. El ex secretario de Organización, que solo ha respondido a las preguntas de su abogado, lo ha negado todo. Y se ha presentado como víctima de una cacería política. Una comparecencia en la que el fiscal Anticorrupción, que ha solicitado la prisión sin fianza al existir alto riesgo de fuga y de destrucción de pruebas, ha sido especialmente duro con el investigado, al que ha llegado a situar como jefe de la supuesta organización criminal y como responsable de extrapolar la supuesta trama navarra al Ministerio de Transportes que lideraba Ábalos.
El instructor de la causa considera que existen "consistentes indicios" de que Cerdán "pudiese haber participado", actuando junto al exministro, "en la percepción de premios económicos a cambio de concesiones irregulares". En concreto, cree que el exdiputado podría haber sido el encargado de "distribuir entre los diferentes partícipes" en la trama "las cantidades recaudadas". De ahí que Puente haya ordenado rastrear cerca de medio millar de cuentas bancarias en busca de las supuestas mordidas, algunas pertenecientes al exdiputado y sus familiares. Un ex secretario de Organización sobre la que se ha iniciado una exhaustiva investigación patrimonial que incluye, además de productos financieros, bienes en España y en el extranjero, relaciones societarias o donaciones.
El informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que ha abierto esta nueva línea de investigación en la causa se apoya en ocho grabaciones que los agentes incautaron a Koldo. En cinco de ellas, participa Santos Cerdán. "Estas conversaciones discurrían siempre por la exigencia de la cantidad de dinero que se les adeudaba: Ábalos, y por extensión Koldo, generaban la deuda con Acciona por presuntas adjudicaciones fraudulentas, y Santos se encargaba presuntamente de gestionar el monto y los pagos", recogen los investigadores en el citado documento, donde resaltan que las "contraprestaciones económicas" dimanantes de dicha constructora percibidas por los dos primeros y "gestionadas" por Cerdán ascenderían a 620.000 euros.
Una de esas conversaciones está fechada el 22 de abril de 2019. En ella, se escucha a Koldo decir a Cerdán: “Necesito algo de dinero, jefe, porque se lo di todo a él”. “¿Cuánto le dimos?”, preguntó entonces el segundo. Hablan entonces de 60.000. “Tienen que quedar allí, de allí eran 50 y 10 para ti”, completaba el exdirigente socialista. En otra de las conversaciones, en la que participan Cerdán, Ábalos y Koldo, el último dice: “450 se le dieron en tres sobres”. “¡Koldo! Que no quiero que hables de esto, que no se habla”, suelta el ex secretario de Organización de los socialistas.
En relación con las grabaciones, el exdirigente socialista ha dicho que "difícilmente" puede recordar "conversaciones de hace tanto tiempo". Ahora bien, no ha reconocido el "contexto" de las conversaciones que se recogen, que "no son íntegras". De ahí que haya querido dejar bien claro que lo que la Guardia Civil recoge en su informe sobre los audios es "completamente incierto". Exactamente lo mismo que hizo Ábalos durante su declaración la pasada semana, en la que llegó incluso a deslizar la posibilidad de que los audios intervenidos a su exasesor estuviesen manipulados.
Cerdán ha negado en todo momento la existencia de una trama navarra, rechazando así haber maniobrado para beneficiar a determinadas compañías. "No podía hacer ningún tipo de gestión, estaba en la oposición de 2015 a 2019", ha venido a decir el investigado, recordando así que en aquella legislatura el PSOE no formaba parte del Ejecutivo autonómico, liderado por Geroa Bai. Y ha rechazado en varias ocasiones haber recibido pagos, ni él ni la formación socialista, por la adjudicación de contratos de obra pública.
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Más allá de los audios, otro de los elementos que cercan a Cerdán es un documento incautado por los agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil en el registro del domicilio del empresario navarro Joseba Antxon, administrador único de Servinabar 2000. Se trata de un contrato de compraventa por el cual este último vendería a Santos Cerdán por 6.000 euros casi la mitad de participaciones de la citada sociedad, a la que los investigadores sitúan en el epicentro de la trama.
El exdirigente socialista ha dicho que conoce el documento, pero que nunca "ejerció el pago" para poder ser parte de la empresa. En este sentido, Cerdán ha explicado el "contexto" en el que firmó aquel papel. Dijo que lo hizo en un momento en el que estaba pensando abandonar. Que cuando se lo contó a Antxon, al que unía una relación de amistad, el empresario le ofreció ser "socio" y firmaron aquel contrato. Sin embargo, tras tener una conversación ese fin de semana con su mujer, en la que ésta le recomendó que no abandonara la política, Cerdán dio marcha atrás y dijo al empresario que se olvidara y que rompiese el contrato. De ahí que nunca se llegase a elevar ese documento a escritura pública.
Cerdán se ha detenido también en la "relación intensa" que mantiene desde 2011 o 2012 con Antxon. Tanto, que ambos llegaron a vivir juntos cuando el primero aterrizó en Madrid. Es más, ha contado que el empresario jugó un papel clave en la moción de censura que desalojó a Mariano Rajoy del Palacio de la Moncloa, por su conexión tanto con el PNV como con EH Bildu. Y ha sido, en este punto, cuando ha apuntado a una supuesta cacería política, señalando que su desempeño como "arquitecto de gobiernos progresistas" viene a explicar la situación judicial en la que se encuentra en este momento.