Universitarios que lucharon contra Franco piden con 1.300 firmas que la Fiscalía investigue a Abascal

Un grupo de antiguos estudiantes de la Universidad de Málaga que lucharon por la libertad y la democracia frente al franquismo han remitido un escrito a la Fiscalía General del Estado donde requieren la apertura de una investigación al líder y portavoz parlamentario de Vox, Santiago Abascal, por sus polémicas declaraciones sobre Pedro Sánchez en una entrevista al medio argentino Clarín. El líder de Vox aseguraba que "habrá un momento que el pueblo querrá colgarlo de los pies" al presidente del Gobierno. Los denunciantes ven en estas afirmaciones "una manifiesta expresión de incitación al odio, categoría de comportamiento penada en nuestro ordenamiento jurídico, además de animar a la comisión de otros tipos punibles como los que tienen que ver con el daño a las personas".

En un escrito remitido al Fiscal General del Estado el pasado 21 de diciembre e impulsado en la página web Change.org, donde cuenta con más de 1.300 firmas, este grupo denuncia que las palabras del líder de Vox constituyen "un hecho execrable e inadmisible en cualquier democracia parlamentaria que propugne la convivencia pacífica entre su ciudadanía y el respeto a las instituciones emanadas de la voluntad de la soberanía popular reflejadas en las urnas".

La denuncia del PSOE contra Abascal: un movimiento de peso político pero discutible recorrido jurídico

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Para rematar el escrito, instan al Ministerio Público a que "adopte las iniciativas pertinentes en orden a dirimir las implicaciones penales en las que el comportamiento del Sr. Abascal haya podido incurrir".

El pasado martes 2 de enero llegó la respuesta de la Fiscalía. En el texto, el teniente fiscal de la Secretaría Técnica contesta al grupo de denunciantes que al ser Abascal aforado remite el escrito "a la Fiscalía del Tribunal Supremo por ser la competente para el conocimiento de los hechos".

Tres días después de las polémicas declaraciones de Santiago Abascal, el PSOE presentó una denuncia contra Vox y su presidente por su "clara incitación directa al odio y la discriminación". Esta acción de los socialistas constituyó un movimiento de fuerte peso político pero con un recorrido jurídico aún por demostrar.