Continuará

Eduardo Madina: "'Halt and catch fire' es un viaje a la vida de los pioneros informáticos de los 80 que cambiaron nuestras vidas"

El político Eduardo Madina, actualmente directivo en la consultora de comunicación Kreab y colaborador en varios medios, comenta para Continuará Halt and catch fire, que se puede ver completa en Filmin. La serie es una propuesta ya terminada de 40 episodios desarrollados en cuatro temporadas. El título hace referencia a una frase hecha entre los ingenieros informáticos americanos. Parece tener su origen en un problema real ocurrido a finales de los sesenta por una orden que llevaba al ordenador a un bucle de trabajo que recalentaba sus componentes hasta el límite de echar humo. “Detener y arder”, dice la traducción literal del título. Jerga informática. No está al alcance de cualquiera. Pero la serie sí.

Además de profundizar en las personalidades y relaciones de sus protagonistas, la historia que ha elegido contar es relevante y muy atractiva. El salto extraordinario que dio la informática en los años 80 –y el 90–, cuando pasó de ser un asunto de grandes corporaciones a un elemento fundamental para cada individuo, como recordaba el mítico anuncio de Apple de 1984, citado en la propia serie. 

“La ingeniera interpretada por Mckenzie Davies es de una brillantez excepcional”

Como dice Eduardo Madina: “Lo que hace básicamente Halt and catch fire, serie creada por dos Christopher, Cantwell y C. Rogers, es llevarnos de viaje en cuatro temporadas al origen de la informática doméstica, ese salto por el cual aparatos muy complejos dejaron de serlo tanto para empezar a ocupar espacio en nuestras vidas, y en nuestras casas. Y con el paso del tiempo, cambiarlo todo”.

Entre los puntos fuertes de la serie está uno de los cuatro protagonistas. Según explica, “es una serie en la que destaca un personaje por encima de los demás, el interpretado por Mckenzie Davies, una grandísima actriz que podemos ver en algunas películas de las consideradas de culto. Su personaje es una ingeniera dotada de una brillantez excepcional, es una genio de la informática que consigue reproducir modelos informáticos muy novedosos, programaciones muy vanguardistas que sujetan aventuras empresariales de expansión del mercado tal y cómo hicieron las primeras grandes empresas de los pioneros de la informática en aquel originario Silicon Valley de los garajes, de pequeñas casas en las afueras de las ciudades que seguramente cambiaron el discurrir de la historia de la humanidad”.

Los personajes femeninos rinden homenaje a pioneras de los videojuegos

Los cuatro personajes centrales cubren bien los perfiles más destacados de la industria que se retrata. “Dentro de la serie hay como cuatro esquinas: los ingenieros, al mando o dirigidos por Mckenzie Davies, los diseñadores, los empresarios y los publicistas, todos identificados por unos personajes masculinos y femeninos que mezclan cuatro ángulos de una misma serie. Es como el cuadrilátero a través del cual se va desarrollando una historia en la que, por supuesto, se van combinando la historia de la humanidad de los últimos cuarenta o cincuenta años, la historia de Estados Unidos y la de las cuatro vidas internas y de sus relaciones entre ellas, cómo se acercan y cómo se alejan, con elasticidad”. Los cuatro son inteligentísimos y obsesivos, cada uno con sus talentos diferenciados y complementarios.

En un mundo eminentemente masculino, como fue el de la informática de aquellos años, los creadores, Cantwell y Rogerts, han querido rendir homenaje, con sus dos inteligentes, brillantes y luchadoras protagonistas femeninas, a varias pioneras. En una entrevista de presentación de la tercera temporada, explicaron cómo se basaron para ellas especialmente en Dona Bailey y Roberta Williams, ambas creadoras de videojuegos de éxito en la década de los 80. Bailey creó Centipede, uno de los mayores éxitos de juegos de Arcade (máquinas recreativas con monedas), y Williams es una figura imprescindible en la historia de juegos de aventuras gráficas, con numerosos títulos en su haber. Los dos guionistas y productores ejecutivos han anunciado recientemente que van a volver a colaborar para crear una serie basada en el cómic Paper girls, que en España edita Planeta, y que tiene una pinta muy sugerente. Otra vez estará ambientada en los 80, pero con ciencia ficción, terror y humor mezclados libremente.

“Es una serie desprovista de adornos”

Halt and catch fire no abunda en la nostalgia estética de otras series recientes. Madina lo describe así: “Diría que está desprovista de adornos. En el sentido de que no necesita de grandes ambientaciones tipo Mad men o de grandes diseños de interiores como hemos visto en otras series más recargadas. Es cruda, es real, parece a ratos documental más que ficción”. La serie no cuenta hechos reales, más bien muestra un pasado ficticio que se cruza con el que fue real. Se citan las empresas, los inventos y los gurús de los 80. Mientras, los protagonistas pelean por abrirse un hueco entre tecnologías que solo la audiencia sabe cuánto éxito acabaron teniendo.

La pasión de Madina por este título es compartida por muchos espectadores: “La serie tiene una nota espectacular en Filmin, de las más altas –dice el consultor–. Y alcanzar una nota tan alta no es fácil. Así que yo la recomiendo, en fin, con la misma puntuación que los usuarios, 8.5, que es, como digo, poco habitual”. Hay que actualizar este dato, ya que la valoración de la serie en la plataforma ha subido hasta el nueve. Y Madina resume las virtudes de esta ficción: “Es un viaje a algo que forma parte completamente de nuestra vida, está totalmente presente en nuestras casas, ahora en nuestros bolsillos, y tuvo una serie de pioneros que hace muchos años empezaron a pensar como dicen los ingleses: “Out of the box”. A creer que había vida más allá de lo que era previsible en aquellos momentos y a cambiar el modo de relación humano, hasta el punto de que el vídeo en el que está concedida esta entrevista lo hemos grabado con un pequeño móvil de una empresa que se llama Apple y que podía ser o haberse inspirado en aquello que identifica y significa la serie que con tanta insistencia os recomiendo”. Y así ha sido. Los creadores admiten influencias de Steve Jobs en una parte del personaje Joe MacMillan, y Apple aparece citada como IBM y todas las grandes compañías del momento.

Helena Resano sobre 'The last narc': “Reabre un crimen que fue noticia internacional y te deja pegada”

Helena Resano sobre 'The last narc': “Reabre un crimen que fue noticia internacional y te deja pegada”

Silicon Valey y Mythic Quest: banquete de cuervos”, otras dos series sobre informáticosSilicon ValeyMythic Quest

Para la parte de la audiencia de esta serie que disfrute conociendo el sector de la informática, clave en la innovación de los últimos cincuenta años, recomendamos especialmente otras dos propuestas. Ambas son comedias de oficina, y sus oficinas son de este sector. La primera, además de divertida, es una valiosa lección de empresa, en este caso de una startup tecnológica. Se trata de Silicon Valley, que dispone de seis temporadas en HBO. Cada una de ellas sigue un arco de desarrollo de la compañía de los protagonistas y cada episodio plantea un reto, un problema o una oportunidad en un mundo liderado por empollones con pocas habilidades sociales y que por tanto tienen la necesidad de tender puentes con relaciones públicas, financieros o empresarios con egos desbocados.

Y la otra es Mythic Quest: banquete de cuervos, en Apple TV, que hace lo mismo en otro sector extraordinariamente poderoso de la industria y completamente misterioso para la mayoría de la población, la creación de videojuegos. Esta propuesta cuenta con la colaboración del editor de juegos Ubisoft para que el videojuego creado tenga la calidad de los mejores del mercado, y sobre todo, muestra los tipos de personalidades que se dan en una oficina en la que se desarrollan aventuras virtuales. Se estrenó en febrero de este año y ya está aprobada su prolongación en una segunda temporada.

Más sobre este tema
stats