Libertad de expresión

Comunidad y Ayuntamiento de Madrid mantienen en su puesto al censor de la obra 'Presos políticos'

Cristina Cifuentes y Manuela Carmena, en una imagen de archivo.

El presidente de Ifema, Clemente González Soler, reconoció este jueves que cometió un error al ordenar la retirada de la obra Presos políticos en la España contemporánea de ARCO. Pero, pese a que Ifema es un consorcio de mayoría pública, su acción le puede salir gratis, ya que de momento ni la Comunidad ni el Ayuntamiento de Madrid tienen pensado pedir su dimisión o forzar su destitución, un cese que podrían provocar si uniesen sus votos en la Junta Rectora de Ifema. De igual forma, pese a que González Soler ha pedido disculpas, aún se desconoce si la obra será restituida: la decisión queda en manos de la galería, donde aseguran que "de momento" no hay intención de volver a exponer las imágenes censuradas.

La polémica estalló el miércoles, cuando se conoció que el presidente de Ifema había pedido a la galerista Helga de Alvear la retirada de la obra del artista Santiago Sierra –en la que se muestran los rostros pixelados de 24 personas que el autor califica de "presos políticos", entre ellos el exvicepresident catalán Oriol Junqueras y los activistas Jordi Sànchez y Jordi Cuixart–, un requerimiento al que la marchante accedió. La polémica generada provocó que el Ayuntamiento de Madrid forzase una votación de la Junta Rectora de Ifema para tratar de devolver la obra a la exposición, pero tanto la Comunidad de Madrid que preside Cristina Cifuentes como la Cámara de Comercio de Madrid, que reúnen el 62% de los votos del órgano, se negaron a ello.

Sin embargo, la controversia generada ha provocado que González Soler haya tenido que pedir perdón. En un comunicado hecho público este jueves –y acordado con la Comunidad, el Ayuntamiento, la Cámara de Comercio y la Fundación Montemadrid, el cuarto miembro del Consejo Rector–, el presidente de Ifema presentó sus "sinceras disculpas" ante la polémica desatada por su petición de retirar la obra, una solicitud que, asegura, "en ningún caso perseguía ejercer ninguna censura a la creación". "No hubo mala fe en esta acción, y aceptamos las críticas recibidas, comprendiendo que debemos evitar en el futuro cualquier circunstancia de esta naturaleza", se indica en el texto.

Pero, pese a reconocer el error, González Soler ni asumió responsabilidades ni planteó la reposición de la obra censurada, y la Comunidad y el Ayuntamiento tampoco se lo han pedido, pese a que el consistorio presionó el miércoles para que la decisión se revirtiese. El coordinador general de la Alcaldía, Luis Cueto, se mostró satisfecho por la carta de disculpas y aseguró que "todo artista tiene que tener la libertad máxima de creación", y quiso dar carpetazo al asunto al asegurar que "con esta rectificación las cosas quedan saldadas". Así que la corporación que dirige Manuela Carmena pretende pasar página.

Por su parte, el consejero de Cultura de la Comunidad de Madrid, Jaime de los Santos, también mostró su satisfacción por el paso atrás y aseguró que era "necesario" rectificar. De los Santos señaló que "como ciudadano" no hubiese pedido retirar la obra y como galerista "tampoco la hubiera retirado", pero también afirmó que la decisión se tomó "entre dos adultos libres y en democracia", el presidente de Ifema y la galerista. Estas declaraciones suponen un viraje en la posición del Gobierno regional, que votó el miércoles en contra de restituir la obra cuando lo propuso el ayuntamiento. Fuentes de la consejería se justifican asegurando que quien tiene representación en el Consejo Rector de Ifema que ratificó la decisión no es la Consejería de Cultura, sino la de Economía, que no les consultó sobre el sentido de su voto.

En su comunicado, además, el presidente de Ifema aseguró que "el único órgano competente en la evaluación de los contenidos" es el Comité Organizador de ARCO, y en este sentido Cueto sostuvo que ahora la decisión de si volver a colgar o no la obra depende de la galerista Helga de Alvear. No obstante, fuentes del equipo de Alvear consultadas por infoLibre señalaron que "de momento, las cosas se van a quedar como están", es decir, con los polémicos cuadros en el almacén. Y la propia galerista admitió públicamente que "todos" han hecho "el ridículo", y ella "la primera".

De Alvear afirma no haber decidido aún si volverá a colgar la obra, pero en su declaración ante los medios retó irónicamente a Ifema a "que venga y la cuelgue si quiere". Pero los cuadros van a volver a ser expuestos, sea en ARCO o no, ya que han sido adquiridos por el empresario Tatxo Benet, que ha propuesto al Museu de Lleida exhibirlos allí. "Nosotros estamos encantados", declaró a Europa Press el director de la galería catalana, Josep Giralt.

El cese del presidente de Ifema

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Pese al enorme desaguisado provocado por la decisión de González Soler de pedir la retirada de la obra, ni el Ayuntamiento ni la Comunidad de Madrid tienen pensado provocar la caída del presidente de Ifema –si sumaran sus fuerzas podrían destituirlo, según los estatutos del consorcio– o, al menos, pedirle su dimisión, según confirmaron fuentes de ambas instituciones a este diario. "Por ahora no está encima de la mesa", señala el consistorio, mientras que el Gobierno regional se remite a las declaraciones de De los Santos, que afirmó que "rectificar es de sabios". De hecho, según informa El Independiente, fue el propio González Soler quien amenazó con dimitir el pasado miércoles si se reponía la obra censurada.

González Soler llegó a la presidencia de Ifema en 2016 tras un acuerdo entre el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid para buscar un perfil independiente que se ocupase del consorcio. Según indicaron fuentes oficiales de la Comunidad de Madrid a infoLibre, el dirigente no cobra nada por dirigir Ifema y, en el tiempo que lleva en el puesto, "está realizando una muy buena gestión económica", motivo que alegan para no forzar su dimisión.

Clemente González Soler es ingeniero aeronáutico y ha desarrollado toda su carrera como empresario en el sector del aluminio, y carece por tanto de experiencia previa en la organización de ferias. Tal y como explica la web de Ifema, es fundador, propietario y presidente ejecutivo del Grupo Alibérico, primer grupo privado de España en el sector del aluminio, "con 35 empresas y 17 fábricas y centros de distribución en cuatro continentes". Asimismo, es vicepresidente de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) y también ocupa un puesto en  el Comité Ejecutivo y la Junta Directiva de la principal patronal a nivel estatal, la CEOE.

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