La portada de mañana
Ver
La red infinita del lobby de la vivienda: fondos, expolíticos, un alud de 'expertos' y hasta un pie en la universidad

El Ojo Público

'Turno de palabra': pongamos que se habla de Madrid

Telemadrid ha estrenado programa de debate político en horario de máxima audiencia. Ni más ni menos, lo que debe hacer un medio público, tal y como hizo TVE en tiempos de Fran Llorente con el recordado 59 Segundos. Ojalá, como ocurrió con el citado programa de la cadena estatal, logré atraer el interés de los espectadores, y desmonte, así, el mantra de que cualquier programa que se emita después de las diez de la noche debe estar dedicado al espectáculo o a la ficción.

En el estreno contó con la ventaja añadida de contar con Íñigo Errejón, protagonista en todos los medios, y entrevistado en solitario en el arranque del espacio. Al margen de este hecho puntual, la esencia de Turno de Palabra radica en el debate entre los candidatos a la Comunidad y Ayuntamiento de Madrid, apoyado por sondeos realizados para una y otra convocatoria, y precedido por las opiniones de significados periodistas de diferentes medios.

Lo cierto es que el estreno tuvo ritmo e interés en su parte principal; lo segundo por los parlamentos de los políticos presentes: Gabilondo (PSOE), Errejón (Más Madrid), Villacís (Ciudadanos), y Martínez-Almeida (PP); lo primero, gracias a la excelente tarea del conductor del programa, Javier Gómez. Otra cosa es el intento, contraproducente, de alargar la duración más allá de las dos horas y media, con una nueva entrevista, más periodistas, y un grupo de actores, ofreciendo sus opiniones. Los primeros noventa minutos condensaron de manera suficiente el interés; un interés que fue decreciendo –e incluso restando– en la prolongación.

Más Madrid sería la fuerza más votada en el Ayuntamiento el 26M y Vox entraría en el Pleno empatado con el PSOE

Más Madrid sería la fuerza más votada en el Ayuntamiento el 26M y Vox entraría en el Pleno empatado con el PSOE

Descendiendo al detalle, no funcionó adecuadamente la iluminación en verde para el micrófono de aquel a quien correspondía la palabra –"más o menos", dijo con ironía Gabilondo–. Quizás convendría cortar el sonido, como destacaba visualmente el citado 59 segundos. Fueron claros e ilustrativos los gráficos con los resultados del sondeo, pero faltaron datos de la ficha técnica de la consulta: a nadie se le escapa que es más fiable cuanto más numerosa sea la muestra. Otro fallo, sin culpables, es que fue realizada justo antes del calificado como terremoto Errejón, con el anuncio de su presentación al margen de Podemos. Otro aspecto chocante es el tiempo dedicado a hablar de Vox... sin Vox presente. Una ausencia puntual, ya que el conductor del programa anunció que sí contarían con representantes de esa formación en próximas semanas.

Al margen de los contenidos expuestos por cada candidato, lo cierto es que durante su emisión los hastag #Telemadrid y #TDPalabra1 fueron tendencia en Twitter, con Ciudadanos muy activo, seguido por los seguidores de Errejón y Gabilondo y, con mucha menor presencia, del Partido Popular.

En cualquier caso, es digno de agradecer que una televisión pública tenga la valentía de dedicar horario de máxima audiencia a un espacio de confrontación política –en definitiva, a la información–, sobre todo en tiempos en que algunos responsables de grandes cadenas reducen el ya escuálido tiempo dedicado a estos contenidos, y defienden que "el entretenimiento es lo que pide la audiencia", como si ese dato aportara todo lo que necesitan los ciudadanos para formar una opinión libre.

Más sobre este tema
stats