Marina Quiroga es la protagonista de Un asunto privado. El personaje interpretado por Aura Garrido en la serie de 2022 producida por la gallega Bambú para Prime Video no logra, a pesar de sus intentos, separar su realidad como hija de una familia de la alta sociedad en una ciudad gallega imaginaria —una fusión de Vigo y Pontevedra, lugares de rodaje— de su pasión: la investigación de una serie de crímenes con la complicidad de Héctor (Jean Reno), su mayordomo y amigo.
A lo largo de la trama, Marina Quiroga debe ir sorteando contradicciones y obstáculos para aceptar que debe conciliar la faceta de la vida le colocó con el trabajo que siempre quiso desempeñar. Al fin y al cabo, la investigadora y la hija de una buena familia son la misma persona y ambas son inseparables. Y así lo deben aceptar todas las partes implicadas en la historia.
La semana pasada, Praza.gal informó del resultado infructuoso de un nuevo intento por intentar acceder, a través de los mecanismos de la ley de transparencia, al acuerdo firmado en 2021 entre Altri e Impulsa Galicia, la sociedad fundada por la Xunta y Abanca para "apoyar la maduración" de proyectos que optasen a los fondos europeos Next Generation. La existencia del pacto es pública desde que fue firmado ya que Altri lo divulgó; pero su contenido, no.
Tras la negativa inicial del Gobierno gallego a la solicitud, Praza.gal recurrió a la Comisión de Transparencia de Galicia alegando, entre otras cuestiones, que la Xunta tenía el documento porque estaba firmado por Francisco Conde, entonces vicepresidente de la Xunta de Galicia y conselleiro de Economía, cargo que lleva aparejado la presidencia de Impulsa Galicia. Pero la respuesta, como el título de la serie, fue un "no" alegando que se trata de un asunto privado. La misma persona, pero con facetas que no se tocan entre sí.
Como es sabido, la Xunta tiene, con un 40%, la participación más relevante en Impulsa Galicia. Este porcentaje es la que le permite designar la presidencia y, al mismo tiempo, alegar que no controla la mayoría de la empresa porque, incluso sumando el 10% con lo que cuenta Sogama, no supera el 50%. La decisión política fue no superar la mitad y así, por ejemplo, poder responder ahora que no hace público el pacto con Altri porque Conde lo firmó "en su calidad de presidente de un órgano de una sociedad mercantil privada, representándola en un negocio jurídico privado" y "no en su calidad de cargo público" en "representación" de la Xunta.
Ver másLa Xunta dice que el pacto secreto con Altri lo firmó un conselleiro como un "negocio jurídico privado"
Este argumento es una pieza más del escudo público-privado construido por la Xunta en torno a Impulsa, con el que discrepa el Consello de Contas. Para el órgano fiscalizador, el hecho de que al 40% de la Xunta se sume el 10% de Sogama —empresa participada mayoritariamente por la Administración con un 51%— demuestra que, en realidad, el Gobierno controla al menos el 50% de las decisiones de Impulsa, compañía en la que concurren otros elementos que "apuntalan el control público", como su ubicación física en instalaciones públicas —la sede del Igape, en Santiago— o ser parte de las "actuaciones estratégicas de la política industrial de la Xunta de Galicia".
El asunto privado sirvió, por el momento, para decir "no" a revelar el pacto con Altri mediante la ley de transparencia. También para responder en bloque a las reiteradas solicitudes parlamentarias del BNG y el PSOE gallego, que tras esta última respuesta prepara un nuevo paquete de iniciativas parlamentarias al respecto, mientras estudia las vías legales para intentar obtener la documentación del pacto secreto con la compañía portuguesa.
Esta semana, al ser cuestionado al respecto, el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, restó importancia a la cuestión y dio por bueno la consideración de asunto privado para la firma del entonces conselleiro y vicepresidente, actualmente diputado del PP en el Congreso. Previamente, ante las reclamaciones de divulgar el pacto secreto, se limitó a reducir las acusaciones de ocultación a "lo mismo de siempre". "Outra vaca no millo" —expresión gallega que podría traducirse en castellano como "otro que tal baila"—, ironizó el líder del Ejecutivo gallego el pasado febrero.
Marina Quiroga es la protagonista de Un asunto privado. El personaje interpretado por Aura Garrido en la serie de 2022 producida por la gallega Bambú para Prime Video no logra, a pesar de sus intentos, separar su realidad como hija de una familia de la alta sociedad en una ciudad gallega imaginaria —una fusión de Vigo y Pontevedra, lugares de rodaje— de su pasión: la investigación de una serie de crímenes con la complicidad de Héctor (Jean Reno), su mayordomo y amigo.