Elecciones 26-J

Las bases de Podemos e IU votan sobre el “preacuerdo” para el 26-J a falta de conocer la marca electoral

Pablo Iglesias y Alberto Garzón, de espaldas, celebraron este lunes un encuentro ciudadano tras el preacuerdo electoral.

La confluencia entre Podemos e IU llega a buen puerto. Este lunes al filo de las 20.00 horas, ambas formaciones emitieron sendos comunicados en los que anunciaron un "preacuerdo electoral" para acudir en coalición a las elecciones generales que se celebrarán el próximo 26 de junio. 

Tras la elaboración del documento, ambas fuerzas tendrán que organizar consultas entre sus militantes y simpatizantes para ratificar el pacto. Tanto el partido morado como la federación de izquierdas celebrarán estos referendos el martes y el miércoles. En caso de que las bases aprueben el acuerdo, la coalición se registrará el viernes.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y el líder parlamentario de IU-UP, Alberto Garzón, se fundieron en un abrazo en la Puerta del Sol de Madrid para simbolizar el acuerdo y, posteriormente, comparecieron en la Sala Mirador ante decenas de simpatizantes y dirigentes de sus organizaciones, que no dejaron de gritar "sí se puede" y "vamos a ganar al Partido Popular". Iglesias aseguró que la firma del preacuerdo es un momento "histórico" que "acerca la posibilidad de ganar al PP", mientras que Garzón abundó en esta idea y afirmó que la coalición "sienta las bases de la victoria ante el PP y Ciudadanos".

Las listas fueron el escollo final que impidió que la coalición se anunciara el pasado viernes, como estaba inicialmente previsto. Finalmente, IU y Podemos han acordado que la federación de izquierdas cuente con una sexta parte de los puestos de salida de las candidaturas, lo que, extrapolando los resultados de las elecciones del 20 de diciembre si ambas formaciones hubieran concurrido juntas, dejaría a IU con nueve puestos con opciones serias de obtener escaño. La federación, además, encabezará las listas de cuatro circunscripciones al Senado. La concreción de los nombres que estarán presentes en cada candidatura se deja para después de que las bases de los dos partidos aprueben el pacto.

Iglesias y Garzón no han aclarado todavía dos aspectos clave: en qué lista irá el líder de IU y bajo qué marca concurrirán a las elecciones. Respecto al primer asunto, se barajan dos posibilidades: que Garzón sea el número 5 de la lista por Madrid o que encabece la candidatura de Málaga. En cuanto a la denominación, a efectos legales se utilizará una fórmula que incluya los nombres de los diferentes partidos que se sumen al pacto (Podemos, IU, Equo...). Cuestión diferente es la marca electoral que utilizarán en las papeletas y la cartelería. Este último nombre aún no se conoce.

Campañas y financiación, por separado

Garzón será número 5 en la lista de Podemos e IU por Madrid

Garzón será número 5 en la lista de Podemos e IU por Madrid

Tal y como se decidió hace días, Podemos e IU llevarán a cabo campañas separadas, aunque el texto del preacuerdo incluye la posibilidad de que se celebren actos conjuntos entre las dos organizaciones, un extremo que confirmaron tanto Iglesias como Garzón. La financiación de las campañas también correrá a cargo de cada formación por separado, y según subraya el acuerdo, "la subvención electoral que reciba la coalición por los resultados en votos estará en el marco de la proporcionalidad acordada".

"La subvención electoral que reciba la coalición por escaño conseguido estará en relación directa con los escaños que obtenga cada organización", explica igualmente el preacuerdo, que señala que "en lo referente a los ingresos que se percibirán por la Ley de Financiación de los Partidos Políticos, la parte correspondiente a ingresos por votos se corresponderá con la proporcionalidad acordada con un incremento del 5 % para IU".

El programa electoral que defenderán ambas fuerzas sigue la misma filosofía. Como anunciaron las dos formaciones hace unos días, Podemos e IU tendrán un documento común con líneas programáticas básicas "que serán las únicas que obligarán a defensa colectiva", según se explicita en el preacuerdo. "En cuestiones no establecidas en el marco común hay soberanía de cada una de las organizaciones firmantes", apunta el pacto.

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