Crisis en el PSOE

La cúpula del PSOE espera ganar con “claridad” en el Comité Federal, mientras el ‘no’ a Rajoy se extiende entre las bases

La cúpula del PSOE espera ganar con “claridad” el Comité Federal mientras el 'no' a Rajoy se extiende entre las bases

Ibon Uría

El PSOE sigue sin decidir qué votará si Mariano Rajoy (PP) acude nuevamente a la investidura antes de que el 31 de octubre se disuelvan las Cortes y se convoquen las terceras elecciones. Y, mientras el sector que se impuso al ex secretario general Pedro Sánchez en el Comité Federal del día 1 espera una victoria más holgada cuando se plantee en ese mismo órgano el giro a la abstención, entre la militancia prosperan las recogidas de firmas para defender el no y la convocatoria urgente de un congreso.

Fuentes de la nueva dirección del partido consultadas por infoLibre admiten que el enfado entre las bases del partido es considerable. El malestar, de hecho, es mayor de lo que inicialmente se calculó, según estos cargos. Sin embargo, pronostican que en el Comité Federal las mayorías serán bien distintas y que, cuando se abra oficialmente el debate entre "ir o no a terceras elecciones", será esta última posición la que se imponga con "claridad". Esa reunión no tiene fecha por ahora pero, si se celebra en fin de semana, casi la única opción posible es la del 23 de octubre.

Una vez reunido el Comité Federal, en la cúpula socialista consideran que el resultado de la votación podría ser más holgado que el del pasado 1 de octubre. Entonces hubo una diferencia de 25 votos entre partidarios y detractores de Sánchez –el resultado fue de 132 a 107–. Fuentes del sector mayoritario aseguran que se han producido "realineamientos" desde entonces, especialmente entre "cargos medios y altos" en el escalafón orgánico, que se estarían pasando del no que defendió el anterior secretario general a las tesis que ponen el énfasis en evitar unas terceras elecciones.

Hay, además, otro factor que beneficia a este sector: la caída de la ejecutiva de Sánchez implica la salida del comité de los miembros que no pertenecen a este último órgano por ninguna otra condición. Así, de los 18 fieles a Sánchez que quedaban en en la dirección del partido a fecha 1 de octubre y que pudieron votar en aquel Comité ahora sólo podrán hacerlo César Luena –por ser líder del partido en La Rioja–, Eva Díaz Tezanos –secretaria general del PSOE en Cantabria– y la balear Francina Armengol. En cambio sí tendrán derecho a voto los diez integrantes de la gestora, donde el reparto de fuerzas es de siete u ocho miembros a favor del sector que derrocó a Sánchez y dos o tres favorables al ex secretario general. En síntesis, la diferencia de apoyos entre uno y otro sector podría ensancharse en una veintena de votos, simplemente por el cambio en la dirección.

Mayor preocupación que el resultado provoca, en cambio, la posibilidad de que algún barón del partido se desmarque y pida mantener la negativa a investir a Rajoy. Hasta ahora los cargos de la gestora han evitado la palabra abstención y no se han pronunciado abiertamente a favor de esta opción. El portavoz de la dirección provisional, Mario Jiménez, aseguró este lunes que "no es razonable" tener tres elecciones "en un año" y que los diputados socialistas están de forma "muy mayoritaria" por evitar unos nuevos comicios. No fue más allá. Pero hay dirigentes territoriales que, pese a estar entre quienes maniobraron para finiquitar la etapa de Sánchez, defienden el no en público. Por eso la cúpula del partido no descarta que el voto en el Comité Federal donde se decida la abstención sea en urna. De darse esa circunstancia, se invertiría la situación de la reunión del 1 de octubre: entonces eran los afines a Sánchez quienes reclamaron el sufragio secreto y sus detractores quienes lo rechazaron.

Recogidas de firmas

En paralelo, entre la militancia avanzan las iniciativas de recogidas de firmas para defender el no a Rajoy y la convocatoria de un Congreso Federal extraordinario, que vendría precedido de las correspondientes primarias a la Secretaría General del PSOE. De acuerdo con los últimos datos de censo del partido, hay 189.256 afiliados socialistas. Los estatutos de la organización contemplan la convocatoria de un congreso cuando así lo soliciten la mitad más uno de los militantes, de modo que serían necesarias casi 95.000 rúbricas para forzar el cónclave. Este domingo, José Antonio Rodríguez Salas, alcalde de Jun (Granada) y uno de los impulsores de la iniciativa, aseguró que se habían recabado hasta entonces 64.892 firmas, de modo que faltarían otras 28.828.

Entre los últimos firmantes figuran, además, hasta 192 alcaldes del PSOE, siempre según los datos de los promotores de la iniciativa. Es el caso de Óscar Puente, regidor de Valladolid, quien en declaraciones a infoLibre asegura: "Que se hayan recogido ya más de 60.000 firmas demuestra qué piensa la militancia. Es un movimiento además muy transversal, están firmando afiliados que en 2014 apoyaron a Pedro Sánchez, Eduardo Madina o a José Antonio Pérez Tapias". Puente afirma que entre las bases es muy mayoritaria la opción de mantener el no a Rajoy: "La gestora sabe que, si pregunta a los militantes, más del 80% se pronunciaría en contra de la abstención", dice en conversación con este diario.

También respaldan el no y la convocatoria del congreso la candidata a primera secretaria del PSC y alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet, Núria Parlon; el del alcalde de Terrasa, Jordi Ballart; y el regidor de Ibiza, Rafael Ruiz. El secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, uno de los apoyos de Sánchez, anunció en la mañana de este lunes que firmaría el documento en las próximas horas. Comparten esa misma posición la secretaria general de los socialistas navarros, María Chivite, quien este lunes reiteró que el "sentir mayoritario" de los militantes de su federación es mantener el no al PP, y el secretario provincial del partido en Valladolid, Javier Izquierdo, que reclamó no "blanquear la corrupción del PP".

En la tarde de este lunes, varios dirigentes del PSPV-PSOE de la provincia de Valencia, autodenominados "lobby socialista 3.0", reafirmaron su no y expresaron su voluntad de que esta decisión sea consultada y refrendada por la militancia del PSOE, en un proceso con "mayor transparencia y participación de las bases". Así, cargos de nueve comarcas valencianas celebraron un acto en Silla para hacer ver su "firme oposición" a que se facilite un Gobierno del PP, lo que implicaría, a su juicio, "condenar al país a cuatro años más de políticas de recortes en servicios sociales y de leyes restrictivas para los ciudadanos".

Desde el pasado 1 de octubre, fecha de la dimisión de Sánchez, han defendido el no y pedido la celebración de un congreso, además, la líder del PSOE en Baleares, Francina Armengol; el número uno de los socialistas de la provincia de Valencia y diputado José Luis Ábalos; el secretario general del partido en A Coruña, Julio Sacristán; el líder de los socialistas de Toledo, Álvaro Gutiérrez; y el concejal del Ayuntamiento de San Sebastián Ernesto Gasco. Asimismo, la corriente Izquierda Socialista ha emprendido otra campaña de recogida de firmas para que los militantes promuevan en sus respectivas agrupaciones asambleas donde se solicite a la dirección del PSOE que convoque una consulta en la que se decida si se mantiene el no o si los 85 diputados socialistas se abstienen en la investidura de Rajoy.

Los cargos de la gestora, por ahora, prefieren no ahondar demasiado en sus valoraciones de estas iniciativas. Su portavoz, Mario Jiménez, se limitó este lunes en una rueda de prensa a afirmar que las recogidas de firmas "son decisiones de militantes" que no se van a "juzgar" desde la cúpula transitoria del partido y cuya "traducción real" está por ver: "Cada uno lleva el debate como cree, quiere o entiende", dijo. Jiménez añadió que, en todo caso, forzar la convocatoria del congreso llevaría "al mismo sitio que tiene encomendada la gestora", pues a la dirección actual únicamente le corresponde pilotar el PSOE hasta la celebración del cónclave. El secretario de Organización del PSOE de Andalucía, Juan Cornejo, incidió en ese mismo punto: preguntado por las voces que piden un congreso de manera urgente y primarias, Cornejo replicó que ambas circunstancias "son un mismo paquete" y que habrá primarias "sí o sí". 

"Más allá de que se logren o no las suficientes firmas para forzar la convocatoria urgente del congreso, que decenas de miles de militantes se movilicen debería alejar la tentación de la actual gestora de convocar el congreso lo más tarde posible y quedarse mientras tanto ella al frente del partido", dice por su parte el alcalde de Valladolid, Óscar Puente.

Las agrupaciones piden el 'no'

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La negativa a facilitar un Gobierno del PP también es, según las fuentes consultadas por este diario, el sentir mayoritario en las asambleas que se están celebrando en numerosas agrupaciones locales del PSOE. Muchas de ellas, eso sí, se celebran con carácter meramente informativo y, por tanto, no se aprueba resolución alguna ni se producen votaciones. 

Entre las agrupaciones que han celebrado asambleas figura la de Gijón, a la que pertenece el actual presidente de la gestora, Javier Fernández. Fuentes socialistas señalan que, aunque fue una reunión informativa donde no se votó ningún documento, el sentimiento que se impuso "abrumadoramente" fue el del no a Rajoy. "La defensa de la abstención para evitar terceras elecciones la realizaron sólo algunos militantes con responsabilidades institucionales, como [el diputado] Antonio Trevín o 'Tini' Areces". Este último, el expresidente asturiano Vicente Álvarez Areces, es el senador al que la gestora decidió este lunes proponer para la Portavocía del grupo socialista en el Senado.

A escala autonómica, los comités regionales de Cantabria y Murcia también se han reunido en los últimos días. En el primero de los casos, la secretaria general y vicepresidenta autonómica, Eva Díaz Tezanos, pidió debatir "con coherencia y lealtad" y admitió que "sea cual sea la decisión no estará exenta de riesgos". Fuentes del PSOE cántabro señalan que en la reunión de este sábado se produjo debate en profundidad sobre la situación del partido, aunque no se llegó a votar ningún documento con el que fijar posición. El Comité Regional de los socialistas murcianos, celebrado ese mismo día, propuso por su parte que se celebren reuniones a nivel local para, en palabras del secretario general autonómico, Rafael González Tovar, "saber lo que opinan una a una todas las personas" del PSOE.

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