La gran patronal entra en campaña: advierte en un manifiesto que la salida de Cataluña de la UE sería un desastre

Los grandes empresarios toman posiciones de cara a las elecciones autonómicas del próximo 27 de septiembre. La próxima semana, Foment del Treball, la CEOE y la Cámara de Comercio de España se pronunciarán la semana que viene con un manifiesto en el que advertirán sobre los riesgos de una independencia unilateral de Cataluña, promovida por partidos como Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), ERC o las CUP. Fuentes conocedoras del texto indicaron a infoLibre que el manifiesto mantiene "las formas suaves propias de un catalanismo responsable" y pone el foco en que una hipotética salida de Cataluña de la UE y el euro a causa de la declaración de independencia sería "un desastre".

El manifiesto será apoyado por las patronales, pero no por ninguna empresa en particular, a pesar de que las tres patronales cuentan con representantes de las compañías más grandes de Cataluña. El motivo, según sostienen las fuentes consultadas, es que "al igual que Cataluña está dividida por la mitad" en su apoyo o rechazo a la independencia, lo mismo ocurre con las "estructuras de cada una de las grandes sociedades", por lo que el hecho de que una empresa apoyase explícitamente el manifiesto podría generar tensiones en el seno de su dirección.

Foment del Treball es la patronal que agrupa a buena parte de las principales empresas de Cataluña, y en su junta directiva cuenta con representantes de compañías como Aguas de Barcelona, Endesa, Freixenet, Mercadona o FCC. Su presidente, Joaquim Gay de Montellá, se ha pronunciado en varias ocasiones desde que en 2012 el presidente de la Generalitat, Artur Mas, declaró su intención de caminar hacia la independencia de Cataluña: en 2013, por ejemplo, el empresario defendió la necesidad de firmar un "pacto fiscal" –la idea inicial de Mas– entre los Gobiernos autonómico y central, una idea que sigue reclamando a día de hoy.

Los pronunciamientos de Foment del Treball, no obstante, han ido endureciéndose en los últimos meses. Y es que, si hace apenas unos días Gay de Montellá mostraba sus dudas sobre el proceso de independencia asegurando que, de ganar las fuerzas que lo defienden, podría durar "años", el pasado julio era mucho más tajante al asegurar que la patronal no colaboraría con una eventual Hacienda catalana si no se llegase a un acuerdo con el Gobierno español, ya que a su juicio implantar el organismo de forma unilateral generaría "cierta inseguridad jurídica y fiscal" a las empresas.

Ahora, Foment del Treball ha decidido dar un paso más, dada la cercanía de las elecciones. Y en la misma línea se pronunciarán otras dos patronales presididas por empresarios catalanes: la CEOE, liderada por Juan Rosell (exdirigente precisamente de Foment), y la Cámara de Comercio de España, capitaneada por Josep Lluís Bonet, presidente de Fira de Barcelona y de Freixenet. La idea es publicar la próxima semana el manifiesto que, según explican fuentes de una de las principales empresas catalanas, "aún no está escrito, pero sí en marcha".

La salida de Europa, "un desastre"

El documento, sostienen estas mismas fuentes, tratará de "no ser incendiario". No obstante, no será complicado deducir su rechazo a la independencia, ya que las patronales que lo suscriben opinan que el mundo de la empresa "tiene que mirar a Europa y a la unidad de mercado" y consideran inaceptable "plantear una salida de la UE o del euro". "Cualquier empresario sabe que sería un desastre", afirman las fuentes consultadas por este periódico.

Una postura claramente contraria a la independencia mantiene Empresaris de Catalunya, otra patronal de tamaño mucho más modesto que fue fundada en diciembre de 2014 con el objetivo de "alertar de las consecuencias negativas que traería el proceso secesionista catalán para la actividad económica de Cataluña". Su presidente, José Bou, asegura estar "informado, alerta y al tanto" del manifiesto que se publicará la semana que viene, y señala que, si su organización no es formalmente invitada a unirse al mismo, se "adherirá" públicamente a sus postulados "porque es muy importante llamar de una vez a las cosas por su nombre".

Bou llama la atención sobre el hecho de que "casi un millar de empresas –987 es la cifra concreta– hayan abandonado Cataluña en el año 2014", una afirmación que sostiene apoyándose en la base de datos de Axesor, una agencia que analiza el riesgo crediticio privado. Cataluña recibió en 2014 un total de 602 compañías, si bien el saldo resultante –385 sociedades menos en un año– es el peor de las 17 autonomías. "Entendemos que la causa principal de este fenómeno, además de la presión fiscal o un exceso normativo, es el proceso de independencia, que crea malestar y preocupación entre los empresarios", dice Bou, quien asegura que "si se llegara a dar una declaración unilateral de independencia, este goteo se convertiría en una autopista y las empresas saldrían en masa de Cataluña, porque no quieren incertidumbres".

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Pero no todos los empresarios catalanes son, ni mucho menos, contrarios a la independencia o al derecho a decidir. Pimec –acrónimo de las siglas en catalán de Pequeña y Mediana Empresa de Cataluña–, por ejemplo, muestra su apoyo a un referéndum de independencia, descartando "posicionarse a un lado o a otro". "Hay pluralidad porque representamos a todas las pymes, y entendemos que teniendo 110.000 empresarios que son socios en toda Cataluña cada uno puede tener su opinión", argumenta una portavoz en conversación con infoLibre.

Quien sí muestra claramente sus simpatías por la opción independentista es el Cercle Català de Negocis, una organización que agrupa a cerca de un millar de empresarios. "Los empresarios, profesiones y autónomos que integramos el Cercle Català de Negocis queremos la creación de un Estado catalán que reinvierta los excedentes de nuestra economía en Cataluña; que garantice la competitividad de nuestras empresas; y que se integre libremente en el marco internacional", explica su propia página web.

infoLibre trató de ponerse en contacto con esta organización para conocer su opinión sobre el manifiesto que prepara la gran patronal catalana, pero ningún responsable atendió la llamada. No obstante, su posición es clara: en su web, el Cercle Català de Negocis ha publicado informes en los que analiza "el expolio y las perversiones estructurales del sistema fiscal español", así como las "oportunidades de negocio en la Cataluña independiente" o el hecho de que, a su juicio, "salir de España asegura las pensiones de los catalanes".